La respuesta a la gran pregunta: ¿vuelven a las tiendas las prendas que se agotan?

  • Las marcas no siempre reponen su stock una vez que se agota por diferentes motivos, de ahí que aumente el apremio por hacerse con ellas.
Ropa
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Los españoles cada vez nos gastamos más en ropa. Así lo revela el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su Encuesta de Presupuestos Familiares. En este estudio podemos ver cómo, tras la salida de la crisis, cada vez destinamos más a comprar nuevas prendas de vestir. El pasado año, una media de 608,6 euros por persona, un 4,5% más que en 2016.

Aunque todavía estamos lejos de los más de 700 euros que nos dejábamos antes de la crisis, le estamos cogiendo gusto otra vez a eso de irnos de compras. Sobre todo ahora que es mucho más fácil gracias a Internet. Si bien puede que eso haya sido el desencadenante de que actualmente nos cueste más encontrar lo que queremos. 

Porque ahora podemos comprar en línea de inmediato, lo que supone que cada vez las prendas se agoten antes. El gasto en moda comprada virtualmente aumentó el año pasado un 38%, según la misma encuesta del INE, lo que supone que la ropa y el calzado ya representan el 3% de las transacciones que realizamos por Internet. Y todo ello con visos de crecimiento. 

Por eso, encontrar la prenda deseada puede convertirse en misión imposible. Más si cabe teniendo en cuenta que el 'see now/buy now' -lo veo, lo compro- ya se ha instalado en la mente del consumidor y también de los comercios. Ahora lo que interesa es dar al cliente lo que quiere al momento y hacer que no pierda el deseo con prendas nuevas cada semana. Por ello, encontrar la prenda ideal no siempre es posible.

¿Qué pasa cuando una prenda se agota?

Así, una de las grandes preguntas que se hacen prácticamente a diario los consumidores es si la prenda agotada que querían va a volver a la tienda, algo sobre lo que rodea una gran incertidumbre, porque nunca hay una respuesta cerrada. Y, además, tampoco sucede lo mismo en las tiendas físicas y en las online.

Ante todo, tenemos que tener en mente que siempre existe la posibilidad de que vuelva si se hacen devoluciones. Esa puerta siempre está abierta, incluso cuando se trata de colecciones exclusivas de las que solo se hace una tirada hasta agotar existencias. Por lo tanto, no está todo perdido al 100%. 

Las propias firmas se encargan de dar pistas sobre si las prendas agotadas volverán a estar disponibles. En sus páginas webs, cuando una prenda se agota, a veces dan la posibilidad de apuntarse a la lista de avisos vía email que se envían a los clientes interesados cuando la prenda vuelve al stock online. Pero otras veces esa posibilidad no existe... ¿Quiere eso decir que no va a volver? Rotundamente no se puede decir que no, pero es probable que ya no se reponga a no ser que es haga una devolución.

Esto es lo que sucede con las colecciones exclusivas, por ejemplo. Nos lo confirman desde H&M, donde precisamente tienen ahora a la venta la colaboración anual con una firma de lujo, que este 2018 le ha tocado a Moschino. Según la firma sueca, al tratarse de una colaboración exclusiva, las prendas agotadas solo volverán si se hacen devoluciones. Si no, no se van a fabricar más.

Lo mismo sucede en Zara con su última colección, la más cara hasta la fecha con prendas por encima de los 300 euros. Se llama SRPLS y es también exclusiva, por lo que tampoco repondrán el stock una vez que se agote. Estas colecciones exclusivas son la excusa perfecta que tienen las enseñas de generar deseo en el consumidor -"si no lo compras ya, te quedarás sin ello"- y de asegurarse que no va a quedar nada sin vender. Una estrategia totalmente redonda.

¿Cuál es la política de cada marca?

Para entender por qué a veces vuelven las prendas y otras no, este medio ha preguntado a las principales marcas democráticas españolas para conocer cuál es su política al respecto. Donde más claros se muestran es en H&M, desde donde señalan que depende del volumen de compras que haga la compañía.

"De algunas prendas, la marca adquiere grandes volúmenes y cuando se van agotando los repone. En otros casos no son tan grandes, por lo tanto, cuando el stock se agota, las prendas no vuelven", indican. Esto es lo que pasa, como hemos señalado, con la colección de Moschino para H&M, que se podrá comprar hasta que se agoten existencias. 

Por su parte, Zara sigue una estrategia similar, también teniendo en cuenta el éxito que pueda tener una prenda o no. Como ya contamos aquí, lleva ya varias temporadas reponiendo una chaqueta tipo biker forrada de pelo que cada invierno se convierte en un hit de ventas. Si bien, por norma general, la firma del grupo Inditex no repite nunca prendas de una colección en otra, aunque a veces las versiona, pero nunca las hace iguales.

De forma general, en todas las tiendas del grupo gallego (Zara, Uterqüe, Bershka, Stradivarius, Pull&Bear, Oysho o Massimo Dutti) la restitución de prendas depende del stock disponible también. Igualmente, si hay grandes volúmenes, también se irán reponiendo según se agoten las tiradas. Si no, una vez agotadas, no volverán, así no los indican desde la compañía. Hay que tener en cuenta que la ropa se va enviando a las tiendas por tandas, por lo tanto, se reponen cuando se van agotando. Si bien hay veces que solo se hace una tirada de una prenda, de ahí que no la veamos nunca más. Esto suele suceder con las prendas más arriesgadas u originales, cuyo éxito no es seguro al 100%. Con una tirada corta, la marca se asegura no tener exceso de stock.

En Mango, por su parte, manejan diferente escenarios. Si la prenda se agota pero quedan unidades en el almacén, se repone sin problema, pero si también se quedan aquí sin existencias, intentan ser "lo más retroactivos posible y encargar una producción adicional de la prenda en la medida que sea posible", señalan desde la firma catalana. De este modo, Mango no descarta que ciertas prendas que están totalmente agotadas se vuelvan a producir, a diferencia de las anteriores.

Pero, ¿a qué se debe la vida tan corta que tienen ahora las prendas? Porque otras se han convertido en icónicas y siempre se repiten, como los famosos vaqueros Levi's 501, por ejemplo. Como nos explica Sandra Bravo Durán, socióloga de moda y consultora Customer&Digital en Everis, actualmente vivimos en una sociedad en la que "los consumidores están fascinados por lo nuevo e inmersos en un sistema de 'moda líquida', donde las tendencias fluyen tan rápido que es muy difícil detenerlas y captarlas a tiempo por parte de las empresas".

De ahí la "creciente necesidad" de las marcas por ajustar la innovación a la demanda de los consumidores. "La eventualidad en la oferta unida a la escasez, hace que el cliente se sienta privilegiado y perciba un mayor valor. La idea del “lo veo, lo quiero y lo quiero ya” está muy presente en la sociedad de consumo. Poco a poco se va dejando atrás el concepto de acumulación, y las experiencias adquieren cada vez más protagonismo. Ahora se da un mayor valor a aquello que puede disfrutarse durante un breve periodo de tiempo, obteniendo una sensación de exclusividad y privilegio", señala la experta en moda.

Por lo tanto, a través de estas prendas 'rápidas' que duran en el mercado poco tiempo, las firmas dan a los clientes aquello que les haga sentirse únicos y diferentes a los demás -si hay menos prendas disponibles, menos personas las llevarán-. "Cada vez es más difícil la fidelización y el 'engagement' con los clientes, por ello las empresas ahora promueven el sentido de pertenencia a la marca a través del estatus, haciendo sentir especiales a los clientes con productos únicos, nuevas ediciones especiales, pre-ventas limitadas, promociones efímeras o reducción de los tiempos de espera. De esta manera, los consumidores se sienten unos privilegiados por poseer un producto o vivir una experiencia que no ha llegado a todo el mundo", asevera. Por lo tanto, cuando compres una prenda, siéntete 'afortunado', porque seguro que muchos se van a quedar con las ganas.

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