Los investigadores del caso Villarejo están estrechando el cerco no solo en la cúpula del Ministerio del Interior bajo el Gobierno de Mariano Rajoy sino también en exdirigentes del partido. Prueba de ello son las conversaciones que ha incluido la Fiscalía Anticorrupción en su escrito por el cual piden imputar a Jorge Fernández Díaz y María Dolores de Cospedal por el espionaje a Luis Bárcenas. En el mismo incluyen la charla mantenida entre José Manuel Villarejo y el chófer del tesorero, Sergio Ríos Esgueva, en la que hablan de la necesidad de conseguir el material que atesoraba el exresponsable de finanzas del PP. Según comentaron, guardaba en dos pendrives información clave de presuntas cuentas irregulares del partido y relativa también a otros dirigentes como la propia Cospedal o Javier Arenas.
De acuerdo con el escrito, al que ha tenido acceso La Información, precisamente la conversación que dio lugar a la apertura de esta pieza separada del caso Villarejo fue la mantenida entre el comisario jubilado y el entonces chófer de Bárcenas y de su mujer Rosalía Iglesias que acabó siendo captado por la Policía para este encargado, bautizado como Kitchen. El encuentro se produjo en 2013, año en que comenzó este operativo parapolicial y que coincide con la salida de Bárcenas del partido y el arranque de la investigación de la caja 'b' del PP. El topo le cuenta que Bárcenas tiene conversaciones grabadas de entonces compañeros de la formación como Gerardo Galeote que le decían que era "el corazón del partido" y que no entraría en prisión.
Igualmente se refieren a otros encuentros sobre este mismo asunto que implican al expresidente del PP andaluz Javier Arenas. "Esa conversación probablemente le hará mucho daño", dice Villarejo, a lo que el topo de la Policía responde: "Está muerto". "Lo único que este tipo de conversaciones macho, en ese pendrive, es algo que de alguna manera hay que darle al tarro para encontrarlo. Al ser un sitio tan pequeño lo puede tener en cualquier lugar", espeta Villarejo mientras Ríos Esgueva confirma que el día de su detención llevaba dos pendrives sobre las cuentas del PP. "Sí, los recogí yo, tron", le asegura el chófer el cual cumplió con éxito la misión por la que cobró 2.000 euros al mes de los fondos reservados del Estado. En ese mismo encuentro, Ríos Esgueva le informó también de una reunión en Génova entre Bárcenas y "el presidente" (en referencia a Mariano Rajoy), en el que el primero le advirtió que tenía información sensible de Cospedal.
"El marido había hecho muchas guarradas"
En el transcurso de la conversación, Ríos Esgueva le relata a Villarejo la manifiesta enemistad entre el exresponsable de finanzas del PP y la exministra porque ésta última "le quería quitar del cargo". "Yo eso lo sé porque ahí también influye mucho el marido, que había hecho muchas guarradas", le dice. Se refiere el topo a Ignacio López del Hierro, también en la lista de la Fiscalía Anticorrupción para figurar como imputado por los delitos de prevaricación, revelación de secretos y malversación de caudales públicos. Villarejo apenas interviene en esta parte concreta de la charla si bien este mismo informe refleja que el comisario ya había tenido relación previa con Cospedal y su marido en el año 2009.
De hecho, los fiscales argumentan que la también exsecretaria general del PP y su marido tenían conocimiento expreso de la existencia del operativo contra Bárcenas primero por el interés personal para controlar el material en posesión del extesorero y segundo porque como secretaria general era consciente de que también atesoraba datos claves contra otros exaltos cargos del PP. En relación a la reunión que tuvo junto con su marido y Villarejo en la sede del PP en 2009, el escrito lo enmarca en la propuesta que le hizo el agente de elaborar "encargos puntuales" relacionados en gran medida con la trama Gürtel por los lazos del PP con Francisco Correa.
15 millones por anular la Gürtel
También en 2009, Villarejo advirtió al marido de Cospedal de la existencia de la investigación de la red Gürtel en Valencia y del caso Brugal por el que se investigó en un juzgado de Orihuela (Alicante) presuntos amaños de concursos públicos. Según se desprende de estas conversaciones que el comisario grabó a escondidas, todos estos hechos los conoció gracias a las filtraciones del entonces comisario jefe de la UDEF, José Luis Olivera Serrano. Con todo, la documentación incautada en su domicilio tras su detención en noviembre de 2017 pone de manifiesto que cerró preacuerdos de contrato desde sus empresas con un abogado del entorno del PP.
La documental hace referencia a un "proyecto de estrategia jurídica con el objetivo de evaluar la posibilidad de anulación total de actuaciones del SG", en referencia al sumario de la trama Gürtel. Se trata de una información que el propio Villarejo corroboró en sede judicial el pasado mes de marzo en el curso de la cual destapó que los contactos los mantuvo con el abogado, ya fallecido, Ignacio Peláez. El presupuesto por esta acción se cifró en 15 millones de euros con una provisión de fondo de cinco millones si bien es cierto que, según lo concluye Anticorrupción, no se ha llegado a acreditar que este trabajo saliera adelante.
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