Los motores del proceso de escucha de Yolanda Díaz empiezan a bramar. Tras dos actos en Madrid, Sumar diseña ya una agenda de encuentros fuera de la capital. La primera parada será el norte, posiblemente en la Galicia natal de la vicepresidenta segunda. Pero todo está aún sin cerrar, a la espera de conocer el calendario gubernamental y parlamentario del inicio del próximo curso. Díaz tiene claro que no quiere mezclar Gobierno y plataforma; además todos los actos y desplazamientos serán financiados a través de aportaciones particulares en un proceso de 'crowdfunding' que ya está en marcha.
El proceso de escucha estará organizado en torno a más de 25 grupos de trabajo. Bajo ellos se articularán las diferentes materias que se desplegarán más tarde en los actos públicos: educación, ciencia, digitalización, las preocupaciones de los jóvenes... Será un proceso, y esto es importante, bidireccional. Es decir, los grupos de trabajo nutrirán de contenido a los actos públicos en los que estará Díaz y esos actos también servirán para nutrir de ideas a los coordinadores.
Especial importancia tendrán los asuntos económicos en el proceso de escucha. Economía en el sentido amplio: trabajo, impuestos y, esencialmente, energía. Este último campo es especialmente importante para Díaz y quiere explorarlo como ya hizo hace unas semanas cuando se reunión con expertos del sector. No hay que perder de vista que Los Verdes en Alemania están disparados en las encuestas y en España es una realidad demoscópica que se está siguiendo de cerca en el Gobierno.
No hay que perder de vista que Los Verdes alemanes están disparados en los sondeos
Los perfiles económicos tendrán peso relevante en el proceso de escucha de Díaz. De hecho, los principales colaboradores del Ministerio de Trabajo tienen un perfil económico, destacando el de Joaquín Pérez Rey, su secretario de Estado. Pero, como decimos, Díaz separará Gobierno y Sumar de forma clara. De ahí que se está rodeando de expertos ajenos tanto al Ejecutivo como a los partidos que componen el espacio confederal.
Serán profesionales independientes, en su mayoría. Especialistas académicos, miembros de la administración pública, expertos de la empresa privada que están decidiendo implicarse en el proceso de escucha. Fuentes de Sumar indican que habrá perfiles de todo tipo. También se están implicando nombres con vinculaciones políticas, eso sí, como Ernest Urtasun, eurodiputado y vicepresidente de los Verdes/ALE. El catalán ya estuvo en El Matadero de Madrid.
El grueso de nombres que conformarán el equipo del proceso de escucha es aún una incógnita. De momento, porque Yolanda Díaz quiere darlos a conocer a la vuelta de las vacaciones de verano, indican las mismas fuentes.
Lo que sí ha dejado claro Díaz es que Sumar no llegará a las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2023. Ella sí estará en mítines, pero no como plataforma política. Los partidos que conforman el espacio confederal tendrán, por tanto, que conformar sus propias candidaturas en los próximos meses. Podemos ya está en ello con la gran duda de Madrid, comunidad y ayuntamiento, donde Más Madrid también intentará conformar la oposición en el ala izquierda.
En una entrevista concedida hace unos días a la Cadena SER Galicia, Díaz estimó que entre final de año y enero de 2023, Sumar podrá tener "una gran visión del país que queremos para la próxima década" y, solo después, se "decidirá colectivamente si se convierte en un proyecto electoral o no". "Sumar es un movimiento ciudadano, no es un proyecto electoral", añadió.
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