El juicio del caso Bankia no cumplirá con el calendario establecido. La suspensión de la vista poco después de su arranque y el gran número de testigos citados a declarar ha provocado que el tribunal de la Audiencia Nacional al frente del mismo señale nuevas fechas en julio y septiembre de manera que el procedimiento, que arrancó en noviembre, se acabará alargando, como mínimo, hasta diez meses.
Los magistrados de la Sección Cuarta fijan nueve sesiones en julio y otras nueve en septiembre siendo el último día señalado el 18 de ese mes. En un primer momento se había establecido como término del procedimiento el 26 de junio, de manera que estos cambios suponen que se alargue dos meses más. Los principales motivos que les han llevado a ampliar el plazo de este macroprocedimiento son, por un lado, el 'parón' inicial de varias semanas que tuvieron que acordar por motivos de salud de la fiscal del caso, Carmen Laúna, y, por otro, el gran número de testigos que están dando su versión sobre las irregularidades en la salida a bolsa que se juzgan en la vista.
Precisamente la baja sobrevenida de la representante del Ministerio Público provocó un cisma entre las partes del gran juicio por la crisis económica dado que se produjo en pleno interrogatorio de Rato. La insistencia de los magistrados a que el Ministerio Público nombrara un sustituto para Laúna provocó que el fiscal jefe de la Fiscalía Anticorrupción, Alejandro Luzón, cogiera temporalmente las riendas del mismo, teniendo en cuenta que estuvo al frente de la causa durante los cinco años de instrucción. El tribunal consiguió de esta manera que no se eternizara un juicio ya de por sí denso debido a los 34 acusados que lo integran y la cantidad de testigos y periciales propuestos durante el mismo.
La sugerencia de Rato
Aunque todavía queda más de una quincena de testigos por escuchar, los magistrados ya han puesto la vista en el siguiente momento procesal en el juicio, que es el de la prueba pericial. Por ese motivo han requerido a los acusados que comuniquen los peritos concretos que quieren que comparezcan de cara a organizar mejor las citaciones. Al respecto, el que fuera presidente de la entidad, Rodrigo Rato, ha remitido un escrito a la Sala al que ha tenido acceso La Información, en el que propone que se establezca un orden de comparecencia cronológico.
El exvicepresidente económico del Gobierno propone que esta parte clave para cualquier procedimiento penal se distribuya por materias siguiendo un orden temporal porque de esta forma se logrará una exposición más coherente. En concreto, sugiere que las periciales se dividan en tres periodos: los hechos concernientes a la formación del SIP y la formulación de las cuentas de 2011; todo los relativo a la salida a bolsa de julio de 2011 y finalmente los hechos posteriores al debut bursátil. En este último grupo se encuadrarían los expertos que tengan que pronunciarse sobre la reformulación de cuentas y la posterior nacionalización del grupo.
Renuncia de testigos
Sin embargo, todavía quedan testigos que escuchar en las próximas semanas. Después de que más de una decena de exaltos cargos del Banco de España hayan desfilado por sede judicial y tras escuchar igualmente a Julio Segura y Fernando Restoy en calidad de presidente y vicepresidente de la CNMV en el momento de los hechos, el tribunal mantiene las citaciones programadas en principio hasta el próximo 27 de mayo. De esta manera, entre las más de 15 personas que todavía tienen que aportar su versión de los hechos de cara a esclarecer si hubo o no fraude de inversores en este asunto, destacan la expresidenta de la CNMV Elvira Rodríguez, la exdirectora de Auditoría Servicios Centrales en Bankia Soraya Paredes y los socios de Ernst&Young Francisco José Fuentes y Roberto Díez.
Con todo el tribunal está pendiente de recibir las respuestas que formule la directora gerente del FMI Christine Lagarde al cuestionario elaborado por la acusación que ejerce la CIC y que solicitó su testifical de cara a averiguar el papel concreto que ha jugado el FMI en la última etapa del banco antes del cambio de gestores y de la entrada del FROB en escena. Aunque su intervención en el procedimiento se producirá de una manera completamente diferente al resto de testigos, la relevancia de la misma no es menor a tenor de la actuación del FMI en este asunto. Con todo, algunos acusados han mostrado su intención de renunciar a testificales inicialmente propuestas como es el caso del exministro socialista Virgilio Zapatero.
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