Llega un nuevo Euríbor, reformado en su cálculo para hacerlo más sólido y, sobre todo, con mayor participación del sector bancario europeo. El Instituto Mercados Monetarios Europeos (EMMI) ha anunciado que comenzará a desplegar el nuevo método de cálculo de los índices Euríbor a partir de mayo y de forma gradual durante un periodo que durará seis meses para "facilitar una transición fluida y minimizar las interrupciones para los participantes del mercado", según el ente.
Los cambios serán poco visibles para el usuario final y limitadas en la mayoría de los casos, pero pueden dar lugar a una mayor volatilidad en las cotizaciones de los plazos más largos como el Euríbor a 12 meses. La reforma entrará en vigor cuando se espera que comiencen a abaratarse las hipotecas a tipo variable en las revisiones interanuales de estos préstamos. Dicho de otro modo, habrá reacciones algo más bruscas en algunos momentos pero, a la vez, se evitarán tendencias que desconecten de la realidad de la financiación mayorista.
¿Por qué sucederá esto? Uno de los cambios en la metodología busca eliminar la referencia de los futuros y derivados -que miden las expectativas de lo que va a suceder- en el cálculo del índice. "Las simulaciones con la metodología actualizada que se realizaron antes de que comenzara la consulta mostraron que la volatilidad de las fijaciones del Euríbor a plazos más largos podría aumentar ligeramente", advierte Benjamin Schroeder, estratega de tipos de ING.
Los aspectos clave de la reforma del Euríbor se centran en cambios técnicos en los tres niveles actuales de obtención de datos. El nivel 1 se basa en la tasa promedio ponderada por volumen de operaciones de financiación interbancaria superiores a los 10 millones de euros a un plazo determinado. El nivel 2 permite incorporar datos de entidades que no realizan transacciones de ese tamaño, mientras que el nivel 3 es aún más flexible pero exige que los datos estén respaldados y documentados.
Previa consulta al sector, el EMMI propone eliminar el nivel 3 basado estimaciones internas y modelos pese a que generaban el 44% de las contribuciones de los datos para los Euríbor a 3, 6 y 12 meses. El nuevo Euríbor será más auténtico y real para evitar, por ejemplo, las desviaciones y divergencias respecto a la política de tasas del Banco Central Europeo (BCE) como ha ocurrido entre finales de 2023 y 2024. El banco central pasará a ejercer una mayor influencia sobre el Euríbor.
Un pasado con sombras y escándalos
El EMMI se ha convertido en el guardián y garante de la integridad del Euríbor desde la última reforma del indicador que se puso en marcha en 2018 y culminó en 2020 con la plena operatividad del cálculo del Euríbor, después de lo escándalos de manipulación de los índices interbancarios durante los años previos a la crisis de 2008. Bancos como Citi, HSBC, JPMorgan, UBS, Crédit Agricóle, Deutsche Bank, Société Générale y Royal Bank (RBS, hoy Natwest) se enfrentaron a multas millonarias en la UE por manipular el Euríbor o el Libor, su equivalente británico.
El EMMI se encarga desde 2016 de velar porque esto no vuelva a sucede. Su papel es el de Administrador Autorizado bajo la Regulación de Indicadores de la Unión Europea (BMR) y está supervisado por la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA). En 2016, la Comisión Europea designó al Euríbor (acrónimo de crónimo de Euro Interbank Offered Rate) como un indicador crítico debido a su importancia sistémica para la estabilidad financiera. En España, cerca de medio billón de euros en préstamos tienen referenciado su coste a su evolución.
Como publicó 'La Información' al inicio de la reforma el pasado octubre, el Euríbor había pasado de una metodología pura de cotizaciones y datos promedio del interés de los préstamos entre bancos a través de una encuesta telefónica que luego publicaba Reuters, a una metodología híbrida desde 2019 que incorpora datos de un panel de bancos con transacciones reales debidamente documentadas. Este modelo tiene sus pros y contras. Uno de ellos es el coste y descenso de participación de los bancos en la elaboración del indicador. El EMMI busca atraer a más entidades ahora.
Quién forma parte del panel y del EMMI
El panel del Euríbor del EMMI incluye 19 representantes de varios países europeos. y entidades financieras, como Austria (Raiffeisen), Bélgica (Belfius), Luxemburgo (Caisse d'Epargne), Países Bajos (ING), Portugal (Caixa General), Reino Unido (Barclays), dos entidades italianas (Intesa, Unicredito), dos alemanas (Deutsche y DZ), cinco francesas (SG, HSBC Continental Europe, Natixis, Crédit Agricolé y BNP), y cuatro entidades españolas: Banco Santander, BBVA, Cecabank y Caixabank.
El Euríbor, como índice de referencia del mercado monetario, ha sido fundamental desde su introducción en 1999 para reducir los costos de financiación, prevenir tensiones y gradualmente sustituir las tasas de referencia nacionales en los países que adoptaron el euro. Desde entonces, ciudadanos, como los de España, han tenido acceso a las hipotecas más baratas de la historia.
En términos de gobernanza, el EMMI ha estado presidido desde junio de 2022 por Satu Huber, una ejecutiva finlandesa con experiencia en la industria de gestión de fondos. El consejo del EMMI incluye ocho representantes de asociaciones bancarias, entre ellos Lorena Mullor, en representación de la AEB española.
El Euríbor cuenta con su propio comité de vigilancia dentro del EMMI, compuesto por 12 expertos independientes y presidido por Michael Schneider, un consultor financiero y exjefe de tesorería de la entidad alemana DZ Bank. José Carlos Cuevas, socio de la firma de auditoría EY, es uno de los miembros de este comité.
Además, el EMMI mantiene un órgano asesor de expertos para asuntos técnicos, en el que participa el Banco Central Europeo (BCE) junto con representantes de supervisores financieros y entidades privadas. Este comité, conocido como EMMEC, está presidido por Frederic Pailloux, subdirector de Tesorería de Société Générale.
Los delegados españoles ante este comité al cierre de 2023 eran José Manuel Tassara de León, responsable de financiación y Mercados Monetarios en Cecabank, y Luis Barrigón, Jefe de Mercados de Corto Plazo en Banco Santander. Como suplentes se encuentran Belén Laín, del departamento de Renta Fija y Mercados Monetarios de Cecabank, y Diana Martín de Oro, operadora del Santander.
