Escasez de OPVs

El 'índice del miedo' acecha a Putin para desatascar las salidas a bolsa europeas

La invasión rusa sobre Ucrania ha desestabilizado el indicador de volatilidad VIX hasta unos niveles en los que los asesores financieros desaconsejan los procesos de colocación por alto riesgo de fracaso. 

Toque de campana. BME
El 'índice del miedo' acecha a Putin para desatascar las salidas a bolsa europeas
RAFA MARTIN - BME

El indicador de volatilidad VIX, conocido como el 'índice del miedo', mantiene en vilo a numerosas ofertas públicas de venta (OPV) y de suscripción (OPS) de acciones. La incertidumbre en el mercado es tal que los bancos de inversión asesores de este tipo de operaciones desaconsejan rotundamente la activación de las mismas ante el elevado riesgo de fracaso. Solo un nivel estabilizado entre los 20 y los 25 puntos se entendería razonable para proceder a ejecutar una salida a bolsa exitosa. Por encima estarían abocadas al fracaso, a un perfil inversor de no agrado y a una fuerte presión en precio. 

Aunque durante las últimas semanas se ha apaciguado (alrededor de 24 y 29 puntos), lo cierto es que desde que estalló la invasión rusa sobre Ucrania el índice se ha colocado sobre unos umbrales que arrojan una situación de temor en los mercados con la consecuente dificultad para la toma de decisiones racionales de inversión. En las dos últimas jornadas se ha disparado cerca de un 20% por datos de inflación peor de los esperados. En todo caso, se sitúa muy lejos de los 82,63 puntos que llegó a tocar el 16 de marzo de 2020 tras el cierre total de la economía a nivel global como medida de urgencia para contener la expansión del coronavirus. En ese momento, el pánico disparó esta marca hasta elevarla a cotas cercanas a las de la gran recesión de 2008. 

Se sitúa sobre unos umbrales que arrojan una situación de temor dificultando la toma de decisiones racionales de inversión, aunque está lejos de los 82 de marzo de 2020

El factor clave ahora mismo es que el VIX se equilibre y gane perdurabilidad en el nivel óptimo para poder desatascar las operaciones que a principio de año quedaron suspendidas y otras que estaban siendo valoradas antes de que se desatase la guerra. Eso sí, el origen de la estabilización y de la rebaja de la hostilidad es fundamental. Varios expertos consultados por este periódico coinciden en señalar que un descenso por elementos coyunturales no ayudaría a despejar las dudas en el mercado. 

El componente tractor debe ser una pacificación de la invasión. De este modo, solo una reducción estable motivada por una minoración de las tensiones entre Rusia y Ucrania permitirían al VIX dar señales positivas para reactivar los debuts bursátiles. Tras 107 días de conflicto armado, Putin asegura que la invasión continúa según lo previsto aunque con pequeños cambios tácticos al no poder predecir lo que ocurre en el frente. La cifra de civiles muertos desde el inicio de la guerra asciende ya a 4.302 personas, mientras que los heridos se sitúan en 5.217, según el último balance difundido por la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.

Así las cosas, son numerosos los saltos al parqué que han quedado aparcados hasta que se obtenga una mayor visibilidad. La tecnológica Wetransfer estaba a punto de salir a cotizar en la Bolsa de Ámsterdam, igual que la farmacéutica Cheplapharm Arzneimittel. En España, el caso más destacado es Ibercaja. Aunque la entidad aragonesa tiene todos los deberes hechos para emprender su andadura bursátil en cualquier momento, tiene claro que si no ve opcionalidad para salir a lo largo de este mes, su estrategia pasará por eliminar la presión regulatoria en términos de calendario constituyendo el fondo de reserva de unos 300 millones.

En un informe reciente, EY constata esta desaceleración. Esta situación la atribuye a una variedad de problemas, como el aumento de las tensiones geopolíticas; la volatilidad del mercado de valores; la corrección de precios sobre compañías que habían lanzado una OPV recientemente; la creciente preocupación por el aumento de los precios de las materias primas y la energía; el impacto de la inflación y el aumentos de los tipos de interés; así como el riesgo de que el Covid-19 continúe frenando una recuperación económica global completa.

El frenazo ya está incluso afectando a los habituales asesores financieros. Credit Suisse ha lanzado un 'profit warning' tras alertar que seguirá perdiendo dinero durante el actual trimestre. La entidad se escuda fundamentalmente en el frenazo ocurrido entre los emisores en salidas a bolsa y otras operaciones de su banca de inversión como consecuencia de la guerra y la incertidumbre.

Mostrar comentarios