El Índice Nikkei 225 de la Bolsa de Tokio escaló por encima del nivel psicológico de los 40.000 puntos por primera vez, abriendo la puerta a mayores ganancias en su histórico rally de los últimos meses. El índice cerró con un aumento de 198,41 puntos, equivalente al 0,5%, en comparación con el cierre del viernes, situándose en 40.109,23 puntos. Las acciones relacionadas con semiconductores, como las de los fabricantes de equipos Tokyo Electron y Advantest, encabezaron las ganancias, con aumentos del 2,4% y del 3,7%, respectivamente.
No obstante, el panorama general fue algo más diverso. Las acciones de gran capitalización, como Fast Retailing, propietario de Uniqlo, y Toyota Motor, experimentaron descensos. Al cierre de la sesión matutina del lunes, alrededor de dos tercios de las empresas cotizadas en la sección Prime de la Bolsa de Tokio registraron caídas. Tomoichiro Kubota, analista senior de mercado en Matsui Securities, señaló que los inversores están apostando a que el auge de la inteligencia artificial continuará impulsando el gasto en semiconductores, beneficiando a las empresas niponas involucradas en el proceso de fabricación, según el diario Nikkei.
El selectivo Nikkei 225 ha experimentado un aumento del 19% desde principios de año, después de haber aumentado un 28% en 2023. El 22 de febrero superó su máximo histórico anterior establecido en diciembre de 1989. Este repunte también ha sido impulsado por inversores extranjeros, atraídos por las reformas en el gobierno corporativo, un yen débil y la Cuenta de Ahorro Individual Nippon, o NISA, un programa de inversión con impuestos diferidos dirigido a pequeños inversores.
Los inversores nacionales ayudaron a impulsar el movimiento el lunes al unirse a los fondos globales que han sido los principales impulsores del rally. El bróker SBI Securities Co señaló que su aplicación de operaciones bursátiles se bloqueó brevemente cuando una inundación de clientes intentaba iniciar sesión.
Fin de la deflación
"Los 40.000 puntos del Nikkei 225 son ciertamente un nivel psicológico clave, que podría ofrecer cierta resistencia para el índice y generar volatilidad", explicó Charu Chanana, estratega de Saxo Capital Markets con sede en Singapur, en declaraciones a Bloomberg. "Pero cuando los factores estructurales siguen siendo favorables, y la debilidad del yen continúa, es probable que sea más una señal alcista que alimentar cualquier preocupación sobre las acciones japonesas estén sobrecompradas".
El índice más amplio Topix retrocedió un 0,1%. Aunque también ha estado en una tendencia alcista, aún está aproximadamente un 6% por debajo del récord que estableció hace más de tres décadas antes de que estallara la burbuja de precios de los activos en Japón. Goldman Sachs elevó su pronóstico para el índice a 2.900 desde 2.650 en los próximos 12 meses para incorporar un fuerte crecimiento de las ganancias y una expansión de la valoración. El nuevo objetivo representa un aumento del 7,2% desde el cierre del lunes.
El Nikkei recuperó su máximo de 1989 el mes pasado a medida que inversores de todo el mundo se acumularon en las mayores compañías de Japón ante el mejoramiento de los rendimientos para los accionistas, la debilidad del yen y los beneficios corporativos en auge. El respaldo de Warren Buffett el año pasado impulsó la confianza en el mercado de la nación, y las preocupaciones sobre una desaceleración en China llevaron a muchos fondos a cambiar a Japón.
Los movimientos en el Nikkei habían sido moderados después de alcanzar el hito el 22 de febrero, ya que los inversores tomaron ganancias y algunos analistas expresaron sorpresa por la rapidez del rally. Sin embargo, las pérdidas fueron limitadas ya que los inversores ingresaron para comprar en las caídas. Hay algunas preocupaciones de que el mercado de valores pueda estar sobrecalentándose.
"Aunque los 40.000 puntos para el Nikkei 225 son un punto de paso, el ritmo es demasiado rápido y el nivel se alcanza un poco demasiado temprano para que la economía y el desempeño real de las empresas puedan mantenerse al día. El crecimiento de la economía es un maratón de larga distancia, y el mercado de valores ha corrido tan rápidamente que podría perder el aliento", advierte Ayako Sera, estratega en Sumitomo Mitsui Trust Bank, informa Bloomberg.
Sin embargo, muchos inversores extranjeros siguen siendo optimistas sobre las acciones japonesas. BlackRock Inc., el mayor administrador de activos del mundo, y Amundi Asset Management, el gestor de fondos más grande de Europa, esperan que el crecimiento de las ganancias y los cambios en la gobernanza corporativa mantengan la fortaleza. Las empresas están siendo alentadas por la Bolsa de Tokio a publicar informes sobre sus planes para aumentar las valoraciones de las acciones. Algunas han anunciado recompras de acciones y aumentos de dividendos. Las adquisiciones de empresas por la administración están en aumento y los inversores activistas también están intensificando sus campañas.
Los datos publicados el lunes mostraron que el sentimiento empresarial está mejorando. La inversión en bienes de capital de Japón excluyendo software aumentó en el último trimestre de 2023. Mientras tanto, el Gobierno de la nación está considerando declarar oficialmente el fin de la deflación, informó la agencia Kyodo durante el fin de semana. "Esto no es una fiebre sin fundamento", argumenta Masahiro Yamaguchi, analista de mercado senior en SMBC, citando el contexto económico y corporativo saludable tanto en Japón como en los EE. UU.
