Los hogares se han convertido en los grandes inversores en Letras del Tesoro Público. En julio, según los datos adelantado por el Banco de España, los particulares tenían invertidos 18.523 millones de euros en deuda del Estado a corto plazo, un 11% más que en junio, cuando la inversión se situó en los 16.608 millones de euros. Además, se convierten en los grandes inversores en papel del Estado, superando a bancos y aseguradoras y al propio Banco de España.
Mes tras mes, las tenencias de los inversores particulares van rompiendo estadísticas. Así, estos más de 18.000 millones de la deuda del Estado en manos de los ahorradores más conservadores suponen la mayor cifra de toda la serie histórica, que arrancó en 2016. Además, se da la circunstancia de que el volumen de las Letras en manos de familias superan a la inversión de bancos, aseguradoras y del propio Banco de España, cuya monto total se sitúa en los 13.905 millones de euros.
De esta manera, los particulares se convierten en el segundo tenedor de este tipo de papel del Estado a corto plazo, únicamente por detrás de los no residentes, aunque les siguen de cerca, al cerrar estos últimos julio en los 21.379 millones de euros. El tercer mayor inversor en Letras del Tesoro serían las propias entidades, con algo más de 11.000 millones de euros, una cifra que es algo inferior a los 12.000 millones de euros registrados en el mes anterior.
Las aseguradoras, por su parte, terminaron el séptimo mes del año incrementando su posición en papel del Estado hasta los 2.460 millones de euros. Cabe destacar también el papel que están teniendo las gestoras, que han elevado su inversión en Letras del Tesoro y rompen la barrera de los 5.000 millones de euros (5.326 millones de euros).
De esta manera, la inversión en Letras sigue ganando terreno entre los ahorradores, ante el hueco dejado por los bancos en depósitos. Hace apenas un año, cuando la remuneración de este tipo de inversión no había despegado, la inversión de deuda del Estado a corto plazo en manos de las familias se situaba en los 25 millones de euros, lo que supone una mejora del 74.992%.
Las rentabilidades se frenan
El apetito creciente entre las familias ha hecho, sin embargo, que la rentabilidad de las Letras del Tesoro se frene pese a la subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), que colocó el precio oficial del dinero este septiembre en el 4,5%, el nivel más elevado desde 2001. Precisamente, en la subasta de septiembre se ha saldado con un simbólico recorte hasta el 3,680% de las Letras a doce meses, aunque para el plazo a seis meses la subida del tipo marginal ha sido testimonial hasta el 3,67% desde el 3,66%.
En cuanto a los plazos a tres y nueve meses, en esta última referencia, la rentabilidad marginal se ha situado en el 3,737%, registrando un ligero repunte respecto al 3,7% de la subasta de agosto, mientras que a tres meses ha caído hasta el 3,49%, desde el 3,53%.
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