La banca española sigue gozando de una cómoda posición de liquidez pese a la devolución de las TLTROS que tuvo que afrontar el pasado junio lo que aleja una mejora significativa de la rentabilidad de los depósitos como se esperaba antes de que se produjeran estos vencimientos. Y es que el pasado 28 de junio, los bancos europeos tuvieron que pagar casi 478.000 millones de euros de las TLTROS, las inyecciones de liquidez con las que el Banco Central Europea (BCE) regó al sector financiero durante la pandemia, y de los cuales, más de 60.000 millones de euros correspondían a las principales entidades españolas.
Los seis bancos cotizados han revelado en los informes financieros del primer semestre que sus ratios de cobertura de liquidez, conocida por sus siglas en inglés como LCR, se mantienen por encima de los niveles exigidos por el supervisor europeo, sin que se haya producido un impacto significativo de estos prepagos en estas métricas. De esta manera y dentro de la banca cotizada, tres han logrado incrementar sus ratios, dos han visto como se reducía, aunque siguen doblando los niveles exigidos, y una entidad la ha mantenido estable.
Así, Banco Santander comunicó una sólida liquidez, ya que logró al cierre del segundo trimestre incrementarla levemente en seis puntos porcentuales hasta llegar al 158%, frente al 152% de los tres primeros meses del año y muy por encima del 100% exigido. BBVA también consiguió mejorar estos niveles en el segundo trimestre de 2023 respecto a los tres primeros meses del año hasta el 148%, frente al 142% de los tres primeros meses anteriores.
Caixabank, Sabadell, Bankinter y Unicaja, por encima del 200%
El resto de entidades siguen contando con una posición especialmente cómoda, ya que sus ratios duplican el mínimo exigido del 100%. Es el caso de Caixabank. La entidad que dirige Gonzalo Gortázar cerró los seis primeros meses del año en el 207%, después de haberlo subido en 15 puntos porcentuales, mientras que la media de los doce últimos meses se situó en el 230%. En los tres primeros meses del año, esta métrica era del 192%.
Banco Sabadell también duplicó los niveles exigidos por el BCE hasta el 200%, aunque esta cifra supone una caída de 25 puntos porcentuales con respecto a los doce meses precedentes. Sin embargo, con respecto a los tres primeros meses del año, ha caído en 20 puntos. Aunque es Unicaja Banco la entidad que encabeza el ranking a cierre de junio pese al haber reducido su ratio de liquidez en 14 puntos porcentuales: el banco con sede en Málaga cerró en el 284% en el segundo trimestre, frente al 298% del dato anterior.
Por su parte, Bankinter terminó el semestre con unos niveles de liquidez similares al registrado en el arranque de año. La entidad que pilota María Dolores Dancausa terminó con una ratio de liquidez del 200%, frente al 198% del primer trimestre.
Se mantiene las previsiones de la 'beta de depósitos'
Precisamente el conato de crisis financiera desencadenada por la quiebra de Sillicon Valley Bank, primero, y la posterior compra de Credit Suisse por parte de UBS, en segundo lugar, puso el foco en esta métrica. Se esperaba que la banca española se viera forzada a incrementar la retribución de las imposiciones a plazo fijo para hacer frente a una posible fuga de los saldos y ante estas devoluciones.
Sin embargo, estas expectativas no se han cumplido debido a que las entidades españolas habían acaparado mucha liquidez durante los años de tipos negativos. De hecho, es uno de los argumentos que emplean los bancos para alejar un incremento de las retribuciones de las imposiciones a plazo fijo.
Es más, durante la presentación de los resultados del primer semestre, las entidades españolas han mantenido sus estimaciones de una beta de depósitos, la predisposición que las entidades tienen en pagar por los depósitos, en torno al 25%, un porcentaje inalterado con respecto a las mismas estimaciones del primer trimestre y una cifra que contrasta con el precio del dinero en la eurozona, que está actualmente en el 4,25%. En ese sentido, las campañas actuales en depósitos provienen fundamentalmente de la banca digital y neobancos.
Por otra parte, el BCE también ha instando a las entidades a que eleven la retribución de los depósitos. En ese sentido y, con el objetivo de seguir drenando liquidez, el organismo que dirige Christine Lagarde dejará de pagar a los bancos por el dinero que están obligados a mantener en la institución como reserva mínima, una medida que entrará en vigor el próximo 20 de septiembre y que está relacionada con la estrategia de drenar liquidez que mantienen las entidades.
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