La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha provisionado un fondo extraordinario en sus presupuestos de este año 2021 para hacer frente a las contingencias que pudieran derivar de la negociación abierta con el Ministerio de Trabajo para la contrarreforma laboral. En sus cuentas, dentro de la partida de provisiones, la patronal ha reservado una cantidad específica para la eventual contratación de servicios externos de asesoramiento en materia laboral, como pudiera ser la elaboración de informes para medir el impacto de las medidas propuestas por parte del Gobierno y, en paralelo, apuntalar su oposición frontal al planteamiento de la vicepresidenta Yolanda Díaz en la mesa de diálogo social.
En concreto, según deslizó este miércoles durante la Asamblea General de la CEOE el responsable de la Comisión de Control Presupuestario y Financiero de la patronal, Salvador Navarro, dentro de los 220.000 euros de provisiones contemplados en los presupuestos se ha incluido una partida para hacer frente a colaboraciones que pudieran hacer falta ante la posible reforma laboral. Aunque no dio más detalle al respecto, fuentes de la organización empresarial explican a La Información que se trata de una provisión (es decir, no necesariamente va a utilizarse) en caso de que se quiera contratar algún servicio externo para cualquier asesoramiento necesario en materia laboral o de cualquier otra temática relacionada.
Esta partida extraordinaria justificaría el incremento del 90% que se observa en el detalle presupuestario, en el apartado de provisiones, que pasa de 115.000 euros en el año 2020 a 220.000 euros en el ejercicio 2021. Aquí suelen dotarse cantidades destinadas a provisión de cartera por posibles problemas de cobros derivados de bajas de vocalías o impagos de cuotas por parte de las empresas... así como, en este ejercicio, cuantías específicas para hacer frente a contingencias derivadas de la crisis de la Covid-19. Se trata de una reserva con la que la patronal se cubre de cara a eventualidades futuras, donde en este caso se incorporan esos gastos provistos para asesoramiento laboral.
Puede parecer un simple detalle contable, pero detrás de este apunte se esconde la necesidad de la patronal de disponer de un apoyo extra a la hora de, por ejemplo, elaborar informes de análisis e impacto de las propuestas del Gobierno en materia laboral y posibles contrapropuestas. La provisión, además, supone un refuerzo externo al propio departamento de Empleo de la CEOE, que desde hace semanas está elaborando un informe propio sobre la situación del tejido productivo y del mercado laboral y las necesidades de los distintos sectores, como contrapeso al último borrador del Ministerio de Trabajo, sobre el que han manifestado su oposición frontal.
Este mismo miércoles volvía a repetirlo el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, tras el cierre de filas de sus socios en la Asamblea General: "Hoy por hoy nuestra oposición es frontal". A juicio del máximo representante del empresariado patrio en la mesa de diálogo social, lo que plantea el Ministerio de Trabajo no es "modernizar" el mercado laboral, sino "constreñirlo". Durante su intervención, el líder de la CEOE aseguró que los borradores remitidos por el departamento que dirige Yolanda Díaz están cargados de "ideología" y de "medidas desalineadas" con las necesidades del tejido productivo y de los trabajadores. "Hoy por hoy no compartimos en absoluto el proyecto que se nos ha presentado", zanjaba Garamendi.
Dos semanas sin reuniones
Aunque el presidente de CEOE aseguraba que no se levantaría de la mesa de negociación y que está dispuesto a hablar sobre ámbitos del mercado laboral que "se pueden mejorar", lo cierto es que la mesa de diálogo social para la "modernización de las relaciones laborales" (así la ha denominado el Ministerio de Trabajo) no se reúne desde hace dos semanas. Ya el pasado miércoles se suspendió el encuentro previsto por "problemas de agenda" del secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, y esta semana la patronal y los sindicatos tampoco han sido convocados, según indican fuentes del diálogo social consultadas por La Información.
Algunas fuentes apuntan a que, en realidad, el parón en las negociaciones vendría motivado precisamente por la negativa de la patronal a sentarse a negociar la contrarreforma laboral en los términos planteados por Trabajo, aunque desde el Ministerio niegan la mayor e insisten en los motivos de agenda. En cualquier caso, el 'break' en el diálogo social está dando tiempo a la CEOE para elaborar su contrapropuesta, que pretenden hacer llegar incluso a las autoridades europeas. A ese dosier interno podrían sumarse en las próximas semanas las aportaciones de esos asesores externos para los que se ha provisionado una partida en los presupuestos de este ejercicio.
Preocupación por la reforma fiscal
Pero la reforma laboral no es la única cuyo impacto se va a medir con lupa dentro de la organización empresarial. La CEOE tiene también en el foco la reforma fiscal y para medir sus efectos ya puso en marcha hace unos meses un 'grupo de élite' conformado por más de 300 expertos fiscales, entre académicos, profesionales de grandes despachos y de las principales consultoras del país y asesores de empresas, que trabajan en la órbita de la patronal, sus organizaciones territoriales y sectoriales y sus empresas asociadas, según se recoge en el plan de trabajo de la Comisión Fiscal de CEOE para 2021 y se detalló en estas páginas.
Garamendi tampoco ocultó su preocupación en este sentido durante su intervención en la Asamblea. "Vamos a estar muy encima, porque nos preocupa muchísimo este tema", advirtió. La patronal tiene el foco en estos momentos el estudio de la mejora de la gestión por parte del Estado, según explicó, en referencia al Gobierno central, las comunidades autónomas y los ayuntamientos. En este sentido, el presidente adelantó su postura: "Si alguien quiere armonizar, que se armonice a la madrileña", espetó a los ejecutivos autonómicos. También hizo referencia a la economía sumergida y lanzó una advertencia: "Lo que queremos es que se pague; si lo que se pretende es subir los impuestos, no es la línea adecuada".
