Cuánto dinero del sueldo va a la pensión: así se cotiza a la Seguridad Social

Tener acceso a derechos como el paro, las bajas por enfermedad, el permiso por paternidad y maternidad o la pensión pública cuando nos jubilamos… tiene un precio. Ese precio es el que se paga todos los meses a la Seguridad Social para poder financiar el sistema.

Contingencias comunes, horas extraordinarias, accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, desempleo, formación profesional y Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) son los elementos por los que cada español dado de alta en la Seguridad Social cotiza. Sin embargo, aunque se trata de aportaciones obligatorias establecidas por ley, no todos los empleados tienen que abonar la misma cantidad.

Por lo general, esta cuota depende especialmente del salario de cada persona y de las contingencias que cubra. Pero, ¿cómo se calcula?

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Dependiendo del salario que se perciba, cada trabajador pagará una cuota a la Seguridad Social que está dentro de unos límites fijados por el Estado. Así, se establece una base de cotización máxima y mínima que varía en función de cada categoría profesional. Estas bases se encuentran entre los 1.466,40 euros (mínima) y los 4.070,10 euros al mes (máxima), excluyendo gastos de transporte y dietas, para las categorías profesionales más altas. Para categorías profesionales medias, la base mínima se sitúa en los 1.050 euros, mientras que la máxima se mantiene en el mismo nivel para todas las categorías que cotizan de forma mensual.

Una vez fijadas las bases, se establece el tipo de cotización sobre un porcentaje del sueldo dependiendo de la causa que cubra. Así, para las contingencias comunes, que son las que cubren enfermedades comunes, bajas por maternidad y paternidad, accidentes no laborales o pensión de jubilación, este porcentaje es del 28,30%, compartido entre empresa (23,6%) y trabajador (4,7%).

Para las relacionadas con las horas extraordinarias de fuerza mayor, el porcentaje total que se aplica es del 14%. En este, la compañía aporta un 12% y el empleado un 2%. En el resto de horas extraordinarias, el porcentaje de cotización total es igual al de las contingencias comunes y se reparte de la misma forma entre empresa y trabajador.

Además de estos tipos, también existen los relacionados con el desempleo, es decir, aquellos que nos cubrirán en caso de que en algún momento no tengamos trabajo. En este caso, el porcentaje para el tipo general es del 7,05% (5,5% empresa y 1,55% trabajador). Dependiendo de si el empleado cuenta con un contrato de duración determinada a tiempo completo o a tiempo parcial, deberá cotizar por uno u otro, aunque los tipos serán los mismos, del 8,3% (compartido en un 6,7% para la compañía y en un 1,6% para el empleado).

Junto con estos tipos de cotización, también existe el que se destina al Fogasa, que es el que se encarga de cubrir los impagos de las empresas. Por lo tanto, es una partida que asume la empresa y que se sitúa en el 0,2%. Asimismo, se encuentra la de formación profesional, destinada a cursos de formación y calificación profesional para trabajadores, que se sitúa en el 0,7% (0,6% compañía y 0,1% trabajador).

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Así, para calcular cuánto dinero de nuestro sueldo va a la Seguridad Social, que también será la encargada de pagarnos nuestra pensión gracias a estas cotizaciones cuando nos jubilemos, simplemente habrá que aplicar los porcentajes por los que se cotice a la base de cotización.

Por ejemplo, si una persona que forma parte de una categoría profesional media cotiza por una base mínima de 1.050 euros, deberá destinar un 4,7% a las contingencias comunes, es decir, 49,35 euros que irán a cubrir, entre otros, su pensión de jubilación. De la misma forma se aplicarán los porcentajes al resto de elementos por los que cotice. Por ejemplo, en el caso del desempleo en el tipo general, se aplicaría un 1,55%, es decir, 16,27 euros.