El precio de la vivienda en España sigue siendo una pesadilla tanto para los que piensan en comprar una vivienda como para los que buscan un piso para alquilar. La disputa con los dueños de los inmuebles en cuanto a la subida de la mensualidad es un quebradero de cabeza hoy en día y por ello saber cómo gestionar ese aumento es esencial.
A partir de aquí y pese a que vivimos una auténtica burbuja en torno a los precios de las viviendas de alquiler, asistimos muchas veces a comportamientos injustos con inflaciones fuera de órbita en las viviendas de este tipo. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce para los propietarios que quieran ensanchar sus márgenes rentables sin contar con el oxígeno financiero de sus arrendatarios.
Para estos últimos existen derechos y políticas de protección puestas en marcha por el gobierno. De hecho, se trata de medidas ya impuestas y que se han prorrogado para establecerse también hasta finales de este mismo año.
¿Qué medidas ha impuesto el gobierno en contra del aumento de alquiler?
En el año 2023, los arrendadores podrán aumentar como máximo un 2% el precio del alquiler a sus inquilinos. Esta medida fue aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 27 de diciembre de 2022 y forma parte de la prórroga establecida en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales derivadas de la invasión de Rusia en Ucrania y sus efectos en los ciudadanos.
Esta medida excepcional tiene como objetivo mitigar los impactos de la subida del Índice de Precios al Consumo (IPC) en el ámbito de los contratos de arrendamiento de vivienda, dado que este índice es comúnmente utilizado en dichos contratos. De este modo, si eres inquilino de un piso o vivienda en alquiler, debes saber que si tu casero te sube el precio mensual.
Si lo hace aumentando en más de dos puntos porcentuales del total, estará cometiendo una ilegalidad. No obstante, cabe decir que en el caso de los pequeños tenedores de viviendas, podrán alcanzar una subida mayor únicamente en caso de acuerdo explícito con el arrendatario.
Pasos para gestionar y negociar un aumento de alquiler:
- Cuando tu arrendador pretenda aumentar excesivamente la cuota de alquiler, es recomendable intentar la vía diplomática y negociar con él. Acepta una subida en el precio, pero procura que sea un incremento que puedas afrontar y que, por supuesto, esté conforme a la ley. En este punto, también es importante recalcar el hecho de cuidar las formas y haber sido un buen inquilino (no haber tenido impagos, no haber provocado daños o no haber transgredido las normas comunitarias de convivencia o higiene).
- Busca otra vivienda: Si el aumento del alquiler pone en peligro tu economía, una opción a considerar es buscar otra vivienda más económica. Según los expertos, el precio del alquiler no debería representar más del 35% de tus ingresos mensuales. Los precios de los alquileres varían según los barrios y la proximidad al centro de las ciudades. Busca en barrios menos solicitados o menos turísticos, seguramente encontrarás un apartamento que se ajuste a tus necesidades.
- Si los dos últimos tips no son útiles, busca ayuda legal profesional. La normativa de protección frente a subidas y aumentos de alquiler abusivos están para protegerte en estos casos. Busca otra vivienda.
A partir de ahí, recuerda que pese a las normas de protección aplicadas por el gobierno frente al aumento del alquiler por parte de los arrendadores, siempre es conveniente evaluar de manera constante tu situación. El mercado se mueve y con él tus opciones de mejorar las condiciones en las que puedas vivir.
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