La subida del euríbor, como consecuencia del endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), la inflación y la búsqueda de otros productos alternativos y más rentables está mermando el ahorro de las familias en lo que va de año. Según los datos del Banco de España, el dinero de los hogares depositados en entidades bancarias se situó en agosto en 981.500 millones de euros, lo que supone una caída de 22.800 millones de euros desde que arrancó el año.
En agosto, coincidiendo con el periodo vacacional, los hogares retiraron 3.300 millones de euros. En lo que llevamos de 2023, los hogares han sacado dinero depositados en las instituciones bancarias mes tras mes, salvo en junio, cuando el estos fondos se incrementaron en algo más de 10.000 millones de euros coincidiendo con el cobro de la paga extra. Sin embargo, esta recuperación fue efímera, ya que en julio, el volumen volvió a registrar un descenso de 5.500 millones de euros.
En términos interanuales, de agosto de 2023 a agosto de 2022, los hogares han retirado 12.100 millones de euros, una cantidad que es ligeramente inferior a la registrada en julio, cuando el descenso fue de 12.600 millones de euros. El ahorro de las familias había llegado a diciembre de 2022 a registrar un nivel récord hasta situarse por encima del billón de euros pese a que la escalada de los tipos de interés ya había hecho subir el euríbor.
Amortizaciones e inflación
El incremento del índice al que se referencian la mayoría de los préstamos a tipo variable se ha notado especialmente desde que arrancó 2023, afrontando la gran revisión de sus préstamos para adquirir vivienda en los primeros meses del año, ya que el euríbor en 2022 todavía permanecía en niveles bajos. Esto ha hecho que muchas familias opten por amortizar sus préstamos parcialmente y de manera anticipara para reducir la factura.
A ello se suma la inflación, que sigue desbocada y que resta poder adquisitivo, y obliga a los hogares a echar mano del ahorro para sostener el consumo. Finalmente, incide también en esta merma del ahorro la búsqueda de productos alternativos de inversión a los depósitos, cuyas rentabilidades siguen todavía sin recoger todo el incremento de la subida de tipos, y optan por otros como pueden ser Letras del Tesoro y fondos monetarios.
Las empresas también retiran dinero de los bancos
Asimismo, las empresas también han restado dinero de los depósitos. En los primeros ocho meses del año han sacado 15.200 millones. No obstante, el volumen aumentó en agosto un 1,2% respecto a julio, lo que supone una suma de 3.600 millones, hasta 302.600 millones.
En comparación interanual, los depósitos de las empresas han caído un 4,78%, si bien en los últimos meses han evolucionado tanto al alza como a la baja, debido a las necesidades de liquidez del momento.
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