El gasto con tarjetas de los extranjeros se dispara hasta marzo por el auge turístico

Todas las previsiones apuntan a que la Semana Santa habrá cerrado con cifras récord de ocupación y de gasto. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, aseguraba este domingo que había sido la mejor en muchos años para la capital española, con una ocupación del 90%; cifras que podrían ser extrapolables a otros puntos de la geografía española. El impulso del turismo nacional ha sido clave para ello, pero también el fuerte aumento que ha registrado la llegada de viajeros extranjeros tras haberse superado por completo los efectos de la Covid. 

De acuerdo con los datos que maneja CaixaBank, primera entidad del país por volumen de activos, el gasto con tarjetas de los extranjeros ya había aumentado un 26% en las tres primeras semanas de marzo en relación al mismo periodo del año pasado. Este indicador venía de dispararse un 48% en enero y un 30% en febrero, meses que en 2022 todavía estuvieron marcados en términos de actividad por los efectos de la variante Ómicron del virus.

La entidad extrae estos datos de sus TPV y de los reintegros que los extranjeros realizan en sus cajeros. En el tercer mes del año fueron el consumo presencial y, sobre todo, el electrónico los que registraron un mayor dinamismo, con un incremento del 26 y del 52%, respectivamente, mientras que los reintegros caen un 17% con respecto al mismo periodo del pasado ejercicio. La actividad con tarjetas por parte de los turistas internacionales crece más que los pagos con tarjetas españolas (aumentan un 7% interanual en las tres primeras semanas de marzo). 

La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos había previsto que los viajes en esta Semana Santa repuntasen un 20% respecto al año anterior. La ocupación -que en marzo habría sido del 72% frente al 53% de 2019- podría elevarse en abril hasta el 80% gracias al impulso de las fiestas, de acuerdo con las cifras que baraja la Alianza de Cadenas Hoteleras. El presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), Carlos Garrido, añadía la pasada semana en declaraciones a Europa Press que las reservas habían subido un 15% en relación al año previo a la pandemia, un ejercicio en el que viajaron a España 83.509.153 turistas procedentes de otros países. 

La inflación no frena la actividad

El aumento de las llegadas coincide con un periodo en el que la inflación sigue siendo elevada. La tasa anual de IPC se habría situado en el 3,3% en el mes de marzo, de acuerdo con el avance del Instituto Nacional de Estadística, pero se espera un nuevo repunte en abril debido al efecto base, ya que la energía se abarató con fuerza ese mismo mes en 2022. Según la consultora Simon-Kucher, las tarifas hoteleras se han disparado un 40% en Semana Santa respecto al ejercicio pasado hasta los 183 euros al día de media.

El listado de destinos más caros lo lideran Sevilla y Málaga, donde las festividades y el buen tiempo generan un incremento de la demanda, provocando que los precios de los hoteles se disparen por encima de los 300 euros en el caso de la ciudad hispalense. Pese a registrar las tarifas más caras de España, la ocupación en ambos casos podría superar el 90%. En el segundo escalón del ranking se sitúan Barcelona y Madrid, con una tarifa media de 224 y 206 euros, respectivamente.

Pese al temor a una desaceleración provocada por la situación inflacionaria, a la escalada del Euríbor que ha provocado la subida de los tipos de interés, a la caída de la tasa de ahorro en 2022 hasta su nivel más bajo desde 2018, según el Banco de España, o a la volatilidad en los precios de los suministros, "el turismo continúa por la senda de una recuperación imparable", apuntan desde la firma. Entre los signos de recuperación que aprecian destacan destinos de temporada como Baleares, que espera tener la mayoría de su oferta hotelera abierta a lo largo de este mes, u otros como Barcelona, que ya superan en número de viajeros las cifras de 2019.

Las cifras oficiales que se han dado a conocer hasta la fecha confirman la buena marcha del sector. España recibió cerca de 8,5 millones de turistas extranjeros en los dos primeros meses del año, esto es, un 49,1% más que en el acumulado de enero y febrero del pasado ejercicio. La cifra de visitantes fue solo un 1,3% inferior a la del mismo periodo de 2019, sin embargo su gasto ha superado esta vez al de entonces. El desembolso de los visitantes foráneos superó los 10.544 millones de euros, por lo que fue un 12,9% superior al de los dos primeros meses del año 2019 -y un 54,7% superior al del año pasado-, según las estadísticas de Frontur y Egatur publicadas hace solo unos días por el Instituto Nacional de Estadística.