Pendiente de resolución

La ex número dos de Transportes, Isabel Pardo de Vera, descarta presidir Asval

Pardo de Vera ha descartado la oferta antes de que la Oficina de Conflictos de Interés se pronunciara sobre si permitía o no que accediera al puesto.

Isabel Pardo de Vera, ex secretaria de Transportes, rechaza presidir Asval
La ex número dos de Transportes, Isabel Pardo de Vera, descarta presidir Asval
Europa Press

La ex secretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana Isabel Pardo de Vera ha descartado presidir la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (Asval) antes de que la Oficina de Conflictos de Interés se pronunciara sobre si permitía o no que accediera al puesto, según han informado fuentes próximas a Pardo de Vera a Europa Press.

La intención de la junta rectora de Asval de proponer a todos sus asociados en la próxima junta, convocada para el 20 de diciembre, se ha hecho pública esta mañana con la intención de encontrar un relevo de Joan Clos, el actual presidente de la asociación, por Pardo de Vera. El nombramiento estaba pendiente de la resolución de la Oficina de Conflictos de Interés, que debía dar el visto bueno al haber ocupado Pardo de Vera un cargo público.

Finalmente, la ex secretaria de Estado de Transportes ha decidido descartar este nombramiento antes de que dicha oficina se pronunciara asegurando que "ella jamás haría nada sin contar con el aval de la Oficina de Incompatibilidad y el beneplácito del Gobierno", según han informado fuentes próximas a Pardo de Vera.

Trayectoria profesional 

Isabel Pardo de Vera fue nombrada secretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en sustitución de Pedro Saura en la pasada legislatura, a propuesta de la anterior ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez. Antes de este nombramiento, Pardo ocupó el puesto de presidenta de Adif, compañía en la que ingresó en el año 2007 a través de una Oferta de Empleo Público y tras haber trabajado en el sector privado de la ingeniería y consultoría de proyectos de infraestructuras ferroviarias y de carreteras.

Tras más de dos años y medio desde su nombramiento, Pardo presentó su dimisión, junto al entonces presidente de Renfe, Isaías Táboas, tras el problema que hubo sobre las dimensiones y el diseño de los trenes de Cercanías para Cantabria y Asturias.

Tras su renuncia, Pardo apuntó, sobre su dimisión tras la polémica de este caso, que "nunca" ha tenido "apego al puesto" ni problema por poner su cargo "como siempre a disposición" y aseguró que "nunca se han fabricado trenes que no cabían por túneles y nunca se ha desperdiciado ni un solo euro".

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