En los momentos de mayor tensión e incertidumbre por la crisis derivada de la Covid, apareció el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en el programa televisivo de Susanna Griso. Allí, la presentadora catalana le preguntó sobre cómo saldría España de la crisis -en esos momentos existía una discusión sobre si sería en forma de 'U' o en forma de 'V'- y el ministro contestó que sería en forma de "lámpara de Aladino". Como si de un deseo cumplido se tratara, un año después, Escrivá respira aliviado tras los optimistas datos económicos que recibe en desempleo y en la afiliación a la Seguridad Social.
El pasado martes el ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones hacía públicos tres datos positivos para la economía española. En primer lugar, el número de cotizantes a la Seguridad Social ganó 91.451 nuevos cotizantes medios respecto al mes de junio, lo que situó el número total de ocupados en 19.591.728. En segundo lugar, el paro consiguió su mayor caída de la serie histórica, quedando con 3.416.498 desempleados. Y, en tercer lugar, el número de trabajadores en ERTE cerró julio en 331.486, 56.719 menos que el mes anterior, lo que lo convierte en el nivel más bajo desde el inicio de la pandemia.
Sin embargo, los datos que aporta el ministerio de Escrivá reflejan una paradoja, las actividades económicas más castigadas desde que surgió la pandemia del coronavirus han sido las que más empleo han proporcionado. Así, podemos apreciar que, mientras que las industrias extractivas, la construcción y el sector primario apenas llegan al 1% de variación con respecto al mes anterior, la hostelería y las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento alcanzan un 5,69% y 6,08% respectivamente. Sin embargo, el economista Francisco Coll Morales prefiere ser cauto con estos aumentos porque "la hostelería, el entretenimiento son actividades estacionales y esos incrementos estaban más que contemplados, y debían haber sido bastante más abultados de lo que vemos".
Cabe destacar que, en números absolutos, las que más aportaron a la afiliación fueron la industria manufacturera (1,8 millones de personas), la reparación de vehículos de motor y motocicletas (2,4 millones) y actividades sanitarias y servicios sociales (1,7 millones). Sobre este último, Coll asegura que su aumento se ha debido a "el refuerzo del sistema sanitario para enfrentar la pandemia y a la conversión de todos esos interinos en empleados fijos".
Por otro lado, las comunidades que más empleo han generado han sido curiosamente aquellas que más han sufrido los efectos perniciosos del virus, al tener mayor dependencia del turismo. Destacan Islas Baleares con una variación mensual de 4,40%, la Comunidad Valenciana, con un 0,59%, Cantabria, con un 2,74% y Cataluña, con un 0,88%. Todas ellas por encima de la media nacional de variación mensual (0,47%) y a varios puntos porcentuales de otras comunidades como Navarra (0,14%), La Rioja (-0,24%) y Canarias (-0,78%). El porcentaje negativo de esta última se debe a las restricciones impuestas por las islas para evitar la llegada de turistas.
Ayer por la mañana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presumía de los "extraordinarios" datos del mercado laboral y aseguraba que España está "recuperando y consolidando el crecimiento económico". Sin embargo, Coll Morales pide "ser muy cautelosos a la hora de hablar de recuperación del empleo". Así, asegura que éste "se recupera, pero solo eso, no estamos creando empleo". Para el economista, la recuperación de puestos de trabajo se debe a la "estacionalidad" y a la "incorporación de los empleados en ERTE". Por último, el economista sentencia: "Hemos recuperado el 88% del empleo destruido".
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