La principal responsable del negocio digital de Bankinter, Gloria Ortiz, ha decidido hacer caja vendiendo acciones del grupo en un momento en el que la entidad se encuentra inmersa en la integración del negocio bancario de Evo Banco. En concreto, la directora de Banca Digital, Tecnología y Operaciones decidió el pasado viernes desprenderse de un total de 8.689 títulos por 53.825 euros, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Ortiz, que anteriormente fue directora financiera de Bankinter y responsable de la relación con inversores, vendió las acciones justo al día siguiente de la reunión del Banco Central Europeo (BCE) en la que la institución monetaria decidió aplicar un nuevo recorte en el precio del dinero, una medida que perjudica el negocio tradicional de la banca, que debe buscar fórmulas alternativas de ingresos -o tener un negocio muy definido- para poder hacer frente a un entorno de tipos de interés en mínimos históricos que perdura en el tiempo.
Las órdenes de venta, el cualquier caso, se dieron en un momento en el que los títulos de la entidad alcanzaron máximos de un mes y se ejecutaron a 6,01 y 6,02 euros por acción. Además tienen lugar en plena integración de Evo, entidad por la que Bankinter pagó 66 millones de euros a Apollo, uno de los grandes fondos de inversión de Estados Unidos, con cientos de miles de millones de euros en activos bajo gestión.
El objetivo de Bankinter con la compra de Evo es impulsar su negocio digital y atraer a un público más joven. Antes del parón de agosto María Dolores Dancausa remodeló la cúpula de ambas entidades para encajar ambas estructuras corporativas, aunque mantuvo a Enrique Tellado como líder de Evo Banco. Eso sí, 'rebajó' su estatus de CEO a director general. Según fuentes del banco, la venta de acciones de Ortiz no está relacionada con ningún cambio en la estructura corporativa del grupo.
En la hoja de ruta de Evo, desvelada por Dancausa hace algunas semanas, se contempla una hipoteca 100% digital, un agregador de cuentas y una 'hucha de ahorro', productos que está previsto que estén disponibles antes de finales de año, mientras renueva la aplicación móvil del banco. En paralelo, Evo tiene previsto cerrar cuatro de las cinco oficinas que mantiene en la actualidad el próximo 18 de octubre.
No se prevé un ERE en Evo ni en Bankinter
Se trata de las sucursales de Barcelona, Bilbao, Sevilla y Valencia, por lo que solo mantendrá operativo el establecimiento de la calle Serrano de Madrid, un ajuste que, según informó la compañía, atiende a una apuesta por lo digital y que no llevará aparejado ningún ERE (Expediente de Regulación de Empleo), aunque sí puede haber despidos, según informaron los sindicatos.
Sea como fuere, Evo Banco ya cerró 39 sucursales y redujo su plantilla en algo más de 260 trabajadores (algo más del 50% de la plantilla) a finales de 2017 -antes de su adquisición por parte de Bankinter- en el marco de un ERE que el banco justificó con la necesidad de adaptarse a un entorno de transformación digital, innovación tecnológica y rentabilidad en el negocio de la banca minorista.
Tras la compra, Evo aportó 452.000 nuevos clientes a Bankinter con un perfil mayoritariamente joven y de carácter digital, así como 3.050 millones de euros en depósitos y 745 millones de euros en préstamos hipotecarios. El retorno sobre la inversión (ROI) se espera que sea superior al 10% en el medio plazo. Hasta junio de 2019, la entidad se anotó beneficios de 31 millones de euros.
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