La empresa ferroviaria Magyar Vagon, que forma parte del grupo empresarial húngaro DJJ Group interesado en adquirir el 100% del fabricante de trenes español, ha confirmado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que está manteniendo conversaciones y negociaciones en relación con la posible formulación de una oferta pública de adquisición (OPA) sobre la totalidad de las acciones de Talgo a un precio de 5 euros por acción. Una operación, que según lo explicado por el grupo, se encuentra en 'stand by', hasta que no obtenga "los correspondientes consentimientos de las entidades financiadoras por el cambio de control".
Ante este escenario, la operación se encuentra paralizada hasta que se obtenga el visto bueno de los bancos que financian la compañía española y, por ende, tienen potestad para aplicar la habitual cláusula de control para imponer sus condiciones ante un cambio de propiedad como el que se plantea. Fuentes del mercado explican a este periódico que los planes del grupo húngaro pasaban por ejecutar la OPA, al margen de la negociación con la banca, pero tal y como dicta el comunicado emitido por la empresa ferroviaria que dirige el multimillonario Andreas Tombor, "la CNMV no permite someter la oferta a la condición de la obtención del consentimiento de las entidades financiadoras por el cambio de control".
En esta coyuntura, el holding magiar reconoce al supervisor bursátil que "no existe certeza de que se vaya a formular una oferta pública de adquisición de acciones de Talgo". Y que de producirse, "se comunicará debidamente al mercado de acuerdo con la ley y normativa aplicable".
Volverá a cotizar el lunes
Una vez se han explicado los detalles de la operación, el regulador ha decidido levantar "con efectos de las 08:30 horas. del lunes 12 de febrero de 2024" la suspensión cautelar que afrontaba la compañía desde la tarde de este jueves cuando sus acciones se disparaban cerca de un 10% en el parqué madrileño ante los rumores de una oferta, que llevaron al supervisor a congelar su cotización a la espera de que los inversores recibieran más información sobre una posible operación.
El interés del grupo húngaro, desvelado el pasado 16 de noviembre por La Información, obligó entonces a la CNMV a suspender la cotización de la compañía y a Talgo a informar a los mercados que aún se trataba de un "acuerdo preliminar", y a descartar "la certeza de que este vaya a seguir analizando la operación". Varios meses después, los tambores de OPA volvieron a resonar este jueves con la información publicada en El Confidencial, que apuntaba a que el holding liderado por Tombor habría cerrado la auditoría previa junto al fondo Trilantic, máximo accionista del grupo español, y estaría ultimando los detalles para presentar su oferta ante la CNMV.
El fondo mencionado controla la compañía de forma indirecta a través de la sociedad Pegaso Transportation International SCA, que a fecha de hoy es titular del 40,03% del capital de la firma. Más allá de esta sociedad, el resto del capital se reparte entre la familia Torrente Blasco, que maneja otro 5,03% del capital a través de su firma de inversión Torrblas; la aseguradora Santa Lucía (2,86%), y el resto está en manos de miembros del Consejo de Administración e inversores minoritarios como Amundi (2,05%), Santander Asset Management (1,86%) o Norges Bank (1%).
A la vista de apuntalar la expansión internacional de su compañía con los servicios de la fabricante de trenes española, la filial de DJJ Group ha fichado como nuevo consejero delegado de su área ferroviaria a Ludvig László, ex director general de Siemens Mobility en Hungría, que será también el encargado de analizar la potencial compra de Talgo. Una operación que Tombor, cercano al primer ministro Viktor Orban, ha situado en el centro de su estrategia para levantar un gigante europeo de infraestructuras dedicado al ferrocarril.
