Endesa ha registrado un beneficio neto de 1.059 millones de euros hasta septiembre, lo que supone una caída del 36% en comparación con el mismo periodo del ejercicio precedente, al no contabilizar ningún resultado extraordinario como ocurrió en 2022 con la venta del negocio de movilidad eléctrica a su matriz Enel y por el impacto del gravamen especial del Gobierno a las energéticas.
No obstante, la eléctrica ha asegurado que se encamina a conseguir sus objetivos financieros para el ejercicio completo: 4.400-4.700 millones de beneficio bruto de explotación (Ebitda), 1.400-1.500 millones de resultado ordinario neto y un dividendo de alrededor de 1 euro por acción, según ha confirmado el propio consejero delegado de la compañía, José Bogas, en la conferencia con analistas.
El beneficio ordinario neto -el que sirve de base para el reparto del dividendo-, fue de 1.059 millones, un 28% menos interanual, afectado por la caída del Ebitda y, en mayor medida, por unas mayores amortizaciones, derivadas del mayor nivel inversor; unos mayores costes financieros, sobre todo como consecuencia de la subida de tipos de interés; y por una mayor tasa fiscal efectiva del 29,5% afectada por el gravamen extraordinario aprobado en 2022 (-208 millones de eurtos), según ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Bogas ha advertido de que el gravamen energético reduce la capacidad de invertir de las 'utilities' españolas "en comparación con el resto de jugadores europeos". Por su parte, los ingresos bajaron un 22%, hasta 19.211 millones de euros, y el Ebitda disminuyó un 3%, hasta los 3.353 millones. El retroceso se debe principalmente al efecto negativo del gravamen al sector energético que entró en vigor en 2023 y por el impacto positivo no recurrente registrado en 2022 de la sentencia favorable del bono social (+152 millones de euros). Excluidos estos efectos, el Ebitda habría registrado una subida del 7%. El negocio de generación convencional también tuvo una aportación negativa de 738 millones de euros, afectado principalmente por la extrema volatilidad en los mercados de gas, con efectos no recurrentes que impactaron en el tercer trimestre.
Aumenta la generación de caja y las inversiones
Según la empresa, la "normalización de las condiciones del mercado" situó la generación de caja entre enero y septiembre en 2.800 millones, lo que supone 2.300 millones más que un año antes. La inversión creció un 2%, hasta alcanzar los 1.509 millones. El 76% lo dedicó a redes y energías renovables, lo que califica como "pilares de la transición energética". La compañía tiene operativos 9.300 megavatios (MW) de potencia renovable (hidroeléctrica, solar y eólica) en la península, 800 MW más respecto a cierre de septiembre del curso pasado. El 79% de la producción peninsular en el periodo estuvo libre de emisiones, seis puntos más que el año anterior.
La deuda neta aumentó un 6% respecto al cierre de 2022, con 11.600 millones de euros, como consecuencia del pago de los dividendos y las inversiones. Por el contrario, la deuda bruta disminuyó un 24% debido fundamentalmente a la fuerte reducción de los colaterales (-67%), que cubren las operaciones en los mercados internacionales de materias primas hasta 2.200 millones. La ratio de apalancamiento (deuda neta respecto al ebitda) se situó en 2,2 veces. El coste de la deuda es del 3%.
Endesa terminó septiembre con 10,5 millones de clientes eléctricos en España. De ellos, 6,9 millones están en el mercado libre (un 1% más que el año anterior) y 3,7 millones, en el regulado (un 3% menos). La empresa tiene ya vendida el 100% de su producción propia de electricidad para 2023 y el 91% para 2024, en ambos casos a un precio de 65 euros megavatio hora (MWh), cumpliendo con la regulación en vigor.
En cuanto al negocio del gas, redujo el volumen comercializado en un 8%, hasta 70 teravatios hora (TWh), debido a un consumo "sustancialmente menor" en las centrales de ciclo combinado y pese al aumento entre los clientes industriales y domésticos. La compañía tiene vendido ya el 98% del gas que compra para 2023 y el 73% para el año que viene. La base de clientes se mantiene en 1,8 millones.
Actualización del plan estratégico el 23 de noviembre
Endesa ya tiene fecha para la presentación de la actualización de su plan estratégico. La eléctrica dará cuenta al mercado de su 'nueva' hoja de ruta para el periodo 2024-2026 el 23 de noviembre, justo un día después que su matriz, Enel. No obstante, no se trata de un 'Capital Markets Day' cualquiera para la compañía española, sino que el inversor estará más pendiente que nunca tras que este mismo año se haya producido una revolución en la cúpula del grupo energético transalpino.
Las fuentes financieras consultadas por La Información señalan que el nuevo consejero delegado de Enel y vicepresidente de Endesa, Flavio Cattaneo, llegó a la compañía italiana, matriz de la española con un 70% del capital, con una consigna clara: racionalizar inversiones y continuar con la rotación de activos. El objetivo no es otro que conseguir una importante reducción de la deuda. La compañía italiana cerró el primer semestre de este año con una deuda financiera neta de 62.159 millones de euros y aspira a terminar el curso en una horquilla de entre 51.000 y 52.000 millones de euros, lo que supone un recorte del 16% o 10.000 millones de euros menos.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios