Las grandes eléctricas cierran filas ante el asalto de las renovables en el centro de mando del mercado eléctrico (pool en la jerga). La reciente revisión de las reglas del mercado mayorista ha agitado al Comité de Agentes del Mercado (CAM), órgano consultivo del Operador de Mercado MIBEL (Omie), la sociedad que gestiona el pool, pues ha obligado a adaptar su objeto y su composición al actual crisol energético. Iberdrola y EDP, gigantes históricamente representados en los citados órganos de control, se mostraron especialmente reticentes ante la irrupción de los gigantes verdes.
Omie es la sociedad gestora del mercado eléctrico en la Península Ibérica, es decir, del conjunto de transacciones de compra y venta de energía. Mientras que el bautizado como Comité de Agentes es el órgano supervisor que auxilia al Omie en la resolución de incidencias y la adopción de reglas que afectan a los procesos de casación y liquidación.
Se da la circunstancia de que, tanto en el capital de Omie, como en el Pleno del órgano consultivo, las grandes eléctricas -Iberdrola, Endesa, Naturgy y EDF- se encuentran ampliamente representadas. Bien a título propio, bien a través de la patronal eléctrica Aelec.
Omie publicó en julio una propuesta para la modificación de las reglas del juego del mercado eléctrico para adaptarlo al régimen económico de las renovables. Además, sugería una nueva configuración del Comité, a fin de democratizar su estructura para ampliar su representatividad a todos los agentes de mercado con interés en formar parte del mismo. Dicho trámite atendía a la aplicación obligada de la circular 3/2019 de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Esta, a su vez, respondía al requerimiento de Bruselas a través de su última directiva (2019) sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad.
El gestor del pool sacó a consulta pública su propuesta. En los comentarios recibidos, consultados por La Información, tanto Iberdrola como EDP tratan de poner coto al peso de los nuevos operadores y asociaciones renovables en el órgano de supervisión. La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán trasladó su preocupación por que el nuevo criterio, más flexible, de representatividad de los nuevos grupos de interés pudiera "ensanchar demasiado el alcance de las asociaciones que pueden optar de manera natural a integrarse en el CAM".
Omie ha recordado a los gigantes del sector que Bruselas ha exigido reglas "transparentes y no discriminatorias" para democratizar el mercado eléctrico
EDP trató de salvaguardar el derecho de ciertos agentes a convocar sesiones extraordinarias del Pleno del órgano consultivo. Estas sesiones excepcionales, según la propuesta del gestor del sistema, se celebrarán cuando la iniciativa parta del propio Omie o de un grupo equivalente al 5% de los miembros del Comité. Ante este planteamiento la eléctrica con sede en Lisboa ha sugerido que dichas sesiones pudieran ser convocadas por "un conjunto de agentes de mercado que representen, al menos, un determinado porcentaje de la energía negociada en mercado (por ejemplo un 20%)".
La media hubiera dado más margen a las grandes eléctricas frente a los grupos renovables independientes, con mayores dificultades para reunir una amplia cuota de mercado. Ambas sugerencias fueron rechazadas en el texto definitivo del Omie. Este se encargó de recordar que, precisamente, la pauta marcada por Bruselas busca eliminar "barreras injustificadas" dentro del mercado eléctrico en lo que respecta a la participación en el mismo,así como velar por "condiciones de competencia equitativas, donde las normas y el trato que se apliquen a todas las empresas eléctricas sean transparentes, proporcionadas y no discriminatorias".
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