Hasta 24.688 millones

Toyota duplica su beneficio neto entre abril y diciembre por la venta de híbridos

La facturación por ventas de la empresa avanzó un 23,9 % interanual hasta los 34,02 billones de yenes (214.194 millones de euros) entre abril y diciembre, los nueve primeros meses del año fiscal nipón.

Toyota duplicó su beneficio neto entre abril y diciembre, hasta 24.688 millones de euros
Toyota duplicó su beneficio neto entre abril y diciembre, hasta 24.688 millones de euros
Agencia EFE

El fabricante de vehículos japonés Toyota Motor se anotó un beneficio de 3,94 billones de yenes (24.688 millones de euros) entre los meses de abril y diciembre, lo que significa un 107,9% más interanual. La causa se debe al incremento de las ventas y en particular la de los automóviles híbridos. La mayor empresa automotriz del mundo por volumen de ventas registró en dicho periodo un beneficio operativo de 4,24 billones de yenes (26.567 millones de euros), lo que representa un avance del 102,1 % respecto al mismo período del año precedente, según ha informado la propia compañía. 

En lo referente a la facturación por ventas de la empresa avanzó un 23,9 % interanual hasta los 34,02 billones de yenes (214.194 millones de euros) entre abril y diciembre, los nueve primeros meses del año fiscal nipón. En este período Toyota vendió un total de 7.295.00 vehículos de su propia marca y de otras firmas que pertenecen al grupo, entre ellas Lexus y Daihatsu, lo que representa un avance de 804.000 unidades más que el año anterior.

Dentro de su informe financiero, Toyota destacó el "incremento de sus ventas en todas las regiones", y en especial las de vehículos híbridos, de los que comercializó un 37,9 % interanual más. La empresa con sede en Aichi (centro de Japón) también atribuyó la mejora de su beneficio operativo a "los esfuerzos de recorte de costes para compensar el encarecimiento de materiales a raíz de la pandemia" y a la mayor disponibilidad de semiconductores tras la carestía de años anteriores.

Sin contabilizar la polémica de sus filiales 

Los resultados de Toyota no contabilizan el impacto de las recientes irregularidades detectadas en dos de sus filiales, el fabricante de minivehículos y vehículo utilitarios Daihatsu Motor y una compañía de autopartes, que han obligado a la matriz a detener parte de su producción doméstica y a paralizar la distribución de varios modelos.

En relación a estos resultados de los primeros nueve meses del año, Toyota Motor espera embolsarse un beneficio neto de 4,5 billones de yenes (28.188 millones de euros) para la totalidad del año fiscal, que concluirá el próximo mes de marzo, y lo que constituiría un avance del 83,6 % respecto al año previo y una cifra récord.

Por último, su beneficio operativo avanzaría un 80% hasta los 4,9 billones de yenes (30.693 millones de euros), mientras que su facturación por ventas crecería un 17% hasta los 43,5 billones de yenes (272.484 millones de euros).

Producción anual de coches 

Por su parte, el presidente del Consejo de Administración de Toyota, Akio Toyoda, afirmó en rueda de prensa que la directiva de la empresa quiere "analizar ampliamente" los problemas detectados en las filiales consistentes en la manipulación de sus test de calidad, los cuales podrían repercutir en la producción anual de vehículos de la empresa.

En base a estos resultados de los primeros nueve meses del ejercicio, Toyota Motor espera embolsarse un beneficio neto de 4,5 billones de yenes (28.188 millones de euros) para la totalidad del año fiscal, que concluirá el próximo mes de marzo, y lo que constituiría un avance del 83,6% respecto al año previo y una cifra récord. Su beneficio operativo avanzaría un 80 % hasta los 4,9 billones de yenes (30.693 millones de euros), mientras que su facturación por ventas crecería un 17% hasta los 43,5 billones de yenes (272.484 millones de euros).

Tras la publicación de sus resultados este martes, las acciones de Toyota Motor terminaron con una subida del 4,77%, hasta los 3.135 yenes (19,63 euros), y su capitalización bursátil, la mayor en la Bolsa de Tokio, alcanzó los 48,8 billones de yenes (305.536 millones de euros), la máxima cifra hasta la fecha para una firma nipona. 

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