Nada cambia en la relación entre Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso. En su primera reunión en Moncloa, presidente del Gobierno y de la Comunidad de Madrid han puesto de manifiesto de nuevo sus diferencias, que son enormes, en un encuentro que ha durado hora y media. Ayuso ha reclamado respeto a la autonomía fiscal de Madrid, ha insistido en que bajará los impuestos en esta legislatura y ha avisado que si el Gobierno central aprueba una armonización su Ejecutivo recurrirá al Tribunal Constitucional.
Ayuso ha presentado un documento a Sánchez con dos decenas de demandas en las que destaca esa defensa de la autonomía en materia fiscal. El Gobierno madrileño tiene previsto rebajar medio punto todos los tramos del IRPF; deducciones a familias, jóvenes y a empresas; y aprobar un aumento de las bonificaciones por herencias y donaciones entre hermanos y entre tíos y sobrinos. Habrá, por tanto, una rebelión de Madrid si el Gobierno avanza hacia una armonización fiscal con otros territorios.
La jefa del Ejecutivo madrileño también ha reclamado a Sánchez que se decida ya a avanzar hacia una reforma del modelo de financiación autonómica. Madrid ha cuantificado que este mismo año recibirá 5.500 millones menos que Cataluña, teniendo un millón de ciudadanos menos. Madrid, ha reconocido Ayuso en su primera comparecencia en Moncloa, es partidaria de esa reforma porque la comunidad está "infrafinanciada".
"La Comunidad de Madrid ya es la región más solidaria (aporta el 68% del Fondo de Garantía de los Servicios Públicos Fundamentales). En este sentido, el Gobierno regional no va a permitir que sean los ciudadanos madrileños, sus autónomos o sus empresas los que paguen la factura independentista con sus impuestos. Asimismo, la Comunidad rechaza cualquier incentivo fiscal que el Gobierno de España ponga en marcha para beneficiar unilateralmente a una única comunidad autónoma. Una armonización de impuestos como la que pretende el Gobierno supone un recorte fiscal de 5.900 millones de euros, unos 2.300 euros por familia, que perjudicaría, sobre todo, a las rentas medias y bajas", se puede leer en el documento que Ayuso ha entregado a Sánchez.
5.000 millones para la red de Cercanías
En materia de infraestructuras, Ayuso ha reclamado a Sánchez una inversión de 5.000 millones para la red de Cercanías. "Es prioritario y urgente conocer las actuaciones que se van a llevar a cabo para mejorar el servicio, mantenimiento y fiabilidad de la infraestructura de Cercanías de Madrid", se recoge en el mismo documento. En materia de Vivienda, la Comunidad de Madrid muestra su rechazo a limitar los precios de alquiler, "una política intervencionista que coarta la libertad del individuo y perjudica a las familias ya que el 90% de las viviendas que están en el mercado son de pequeños propietarios".
La Comunidad de Madrid también rechaza que recursos básicos como la luz o el gas experimenten subidas tan elevadas que perjudican seriamente a las familias más vulnerables. "La nueva tarificación de la luz afecta especialmente al colectivo doméstico, empresarial -que no puede adaptarse por su actividad económica-, industria electrointensiva (aluminio y el cobre), a las personas que teletrabajan y las acogidas al bono social. Esta situación obedece a la falta de previsión y planificación del Gobierno. Sobra descoordinación entre Ministerios y el Ejecutivo autonómico recuerda que existen alternativas en países de nuestro entorno que deberían ser estudiadas por el Gobierno", contempla el mismo documento.
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