La investigación sobre la denominada 'Operación Kitchen', urdida en 2013 para espiar al entorno del extesorero del PP Luis Bárcenas y arrebatarle la información comprometedora para el partido que pudiera conservar, ha cogido un impulso con la reciente imputación de la ex secretaria general de la formación política María Dolores de Cospedal y su marido, Ignacio López del Hierro. Pero antes de interrogarles por su presunta participación en ella, el juez instructor Manuel García Castellón quiere profundizar en si la trama quería apartar al inspector jefe del grupo de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) que investigó la Gürtel y la presunta caja 'b' de los 'populares'.
Para ello, ha citado este martes, 15 de junio, a declarar como testigo a Manuel Morocho, el inspector 81.067, que firmó los informes que obran en los sumarios de los procedimientos antes mencionados y que afectan directamente al PP. No es la primera vez que el policía comparece en la pieza 7 del caso 'Tándem', que investiga el operativo parapolicial sufragado con fondos reservados. Ya lo hizo en febrero de 2019 cuando afirmó ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Manuel García Castellón, que en enero de 2015 le trasladaron durante un año y medio a la Dirección Adjunta Operativa (DAO), entonces dirigida por el investigado Eugenio Pino, para que realizara una labor de apoyo, lo que le hizo sospechar de que el objetivo de este movimiento era que no avanzara en la investigación sobre la trama Gürtel.
En esta ocasión, el juez instructor le llama para adentrarse en fechas anteriores, en 2013, justo en los meses antes al inicio del operativo parapolicial, que se creó el "11 de julio" de ese año, según el auto por el que se imputa a Cospedal y se cita al inspector del UDEF. Su comparecencia se debe a la aparición de su nombre en las agendas del comisario jubilado José Manuel Villarejo que acaban de ser analizadas por la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional y en las que se deja entrever un cierto malestar por su labor como policía judicial.
"Problemas sobre el último informe de Moroc"
Así se constataría el 29 de abril de 2013, cuando Villarejo apuntó: "Aviso de problemas sobre el último informe de Moroc". Una frase que reseñó bajo el nombre de "Orti", en referencia al que fuera jefe de Gabinete de Cospedal durante su etapa como presidenta de Castilla La Mancha, José Luis Ortiz, también investigado, y un número de teléfono. En ese momento, la UDEF se encontraba analizando los conocidos 'papeles de Bárcenas', las hojas donde el extesorero del PP anotó durante casi 20 años las entradas y salidas de dinero de la presunta caja 'b'.
El Juzgado Central de Instrucción número 5, que investigaba el caso Gürtel, procedimiento en el que estaba siendo investigado el exgerente del PP -y por el que ahora está cumpliendo 29 años de prisión- encargó a esta unidad policial analizar la contabilidad manuscrita de Bárcenas, en la que aparecían altos cargos del partido y empresarios que habrían donado cantidades a la formación política.
Casi un mes después, el 23 de mayo de 2013, Villarejo volvió a hacer referencia al inspector de la UDEF en su diario. Según recoge el juez instructor, el comisario jubilado apuntó que otro de los investigados por la 'Operación Kitchen', el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, al que apodó como "Chisco", estaba "muy mosca porque Cospe (la ex secretaria general del PP) le dio gran bronca". Seguidamente, el 12 de junio, aparece una anotación sobre "Morocho-Lisboa" y otra bajo el nombre "Cospe" en la que se lee: "Este Moroc nos necesita a Losa y a mí. Morocho-Lisboa".
El juez cree que la alusión a la capital portuguesa podría tener relación con algún cambio de destino, pero debido a que en su declaración anterior, hace ya dos años, no hizo ningún tipo de afirmación "sobre si se le llegó a ofrecer o manejar de algún modo un posible traslado a Lisboa", quiere que sea él mismo quien le aclare qué pueden significar estas notas de Villarejo.
El objetivo de las denuncias y querellas era "generar una presión para que doblegáramos y no siguiéramos en la función encomendada que era investigar unos hechos".
No fue a este magistrado instructor, sino al tribunal que juzgó el presunto uso del dinero de la caja 'b' para pagar parte de la reforma de su sede -que quedó visto para sentencia el pasado mes de mayo-, a quien Morocho le relató que le ofrecieron puestos mejor remunerados para que él voluntariamente solicitara apartarse de la investigación, ya que ésta sería la única forma que podría dejar de ser adscrito como policía judicial. Además, recordó que había sido objeto de denuncias y querellas que, en su opinión, lo que buscaban era "generar una presión para que doblegáramos y no siguiéramos en la función encomendada que era investigar unos hechos".
En su primera declaración ante el juez Manuel García Castellón por la trama Kitchen, el inspector explicó que la justificación que le dieron para llevarle a la DAO fue su experiencia en investigaciones en materia financiera, pero apuntó que la realidad fue que se "resintió" su labor como jefe del grupo que investigaba la red corrupta liderada por Francisco Correa. Es más, afirmó que estando en el departamento de Pino, en agosto de 2015, confirmó sus sospechas de que se estaba llevando a cabo una investigación paralela "secreta" sobre Bárcenas, cuya información obtenida se incluyó en las bases de datos policiales posteriormente y con datos "descontextualizados". Esto mismo reiteró el pasado 25 de marzo ante los portavoces parlamentarios que integran la comisión de investigación sobre este asunto en el Congreso de los Diputados.
De "prestar ayuda" a Bárcenas al "Plan contra LB"
La declaración del inspector Morocho dará paso, dos semanas después, el 29 de junio, a María Dolores de Cospedal, quien declarará como investigada, al igual que su marido, el empresario Ignacio López del Hierro, cuyo turno es el día siguiente. El juez quiere interrogarles al entender que tuvieron una intervención "decisiva" para captar a Sergio Ríos, quien fuera chófer de la familia Bárcenas, como confidente de la operación parapolicial.
En su auto, el magistrado instructor recoge distintas anotaciones de las agendas de Villarejo del año 2012, de las que se desprende que Cospedal y López del Hierro pudieron participar en una "serie de movimientos que aparentemente estarían encaminados a prestar ayuda" al extesorero del PP. No obstante, estas actuaciones cambiarían en julio del año siguiente, coincidiendo con el ingreso en prisión provisional de Bárcenas y la aportación de un pendrive al entonces juez instructor Pablo Ruz con documentación relativa a la contabilidad paralela del partido.
A partir de entonces, señala la resolución, se estableció un "plan contra LB.", según reflejó Villarejo, y comenzó a producirse "una cadena de anotaciones que permiten inferir la participación" de Cospedal y López del Hierro "en la captación" del chófer, que recibió 2.000 euros al mes procedentes de fondos reservados, según consta en el sumario.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios