La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha cumplido lo prometido. La víspera del día de los difuntos, la CAM ha recibido las llaves del Isabel Zendal, el hospital de emergencias que la líder autonómica se comprometió a levantar en apenas 90 días. La entrega de la obra civil, que se lleva a cabo este sábado, da cuenta de una proeza arquitectónica en toda regla. La funcionalidad de sus instalaciones no están tan claras. Y es que las mil camas del megahospital de Valdebebas exigen un equipo de miles de sanitarios que, tres meses después de las primeras paladas, la Comunidad aún no ha logrado reclutar.
"No hay ningún sobrecoste ni ninguna desviación. El proyecto, además de los tiempos, ha respetado el presupuesto". Así lo aseguran fuentes de la CAM en conversaciones con La Información. En principio, la CAM anunció una partida de 51.706.443,76 euros para el proyecto. El Isabel Zendal va a suponer a las arcas autonómicas, garantizan, lo que mismo que se contrató en su momento. Aunque hay matices. "El calculo inicial preveía un coste que luego, con el curso de las obras, mejoras en el proyecto y necesidades, ha variado", apunta la CAM.
Aún queda mucho por hacer y por planear. Por los 80.000 metros cuadrados del Zendal aún no se ve ninguna bata blanca. "Lo que pretendemos es activar al personal de los hospitales (del SERMAS), que ya conozca bien el funcionamiento de este nuevo centro" explicó esta semana el consejero de Sanidad regional, Enrique Ruiz Escudero. Sin detenerse en detalles, la CAM confirmó las previsiones (y el temor) de los sanitarios madrileños.
Este miércoles, después de la Mesa Sectorial entre los sanitarios y la Administración, el sindicato AMYTS, presente en la reunión, confirmó a este diario que el Ejecutivo regional seguía sin definir su estrategia. "La CAM ha asegurado que, en todo caso, el personal será cubierto de forma voluntaria". Y ¿si no los hay? "Las autoridades sanitarias nos han asegurado que, en tal caso, la plantilla se formaría con personal contratado como refuerzo por la Covid. En ningún caso serán traslados forzosos". La CAM mantenía el suspense: "Informaremos cuando comience el proceso".
A fecha de este sábado, la CAM sigue sin compartir sus cábalas sobre cuánto personal hace falta en el Zendal. Hasta 7.000 profesionales, según voces sindicales. Cerca de 6.000, si se toman de referencia otros centros del SERMAS, en un escenario donde Madrid quiera sacar partido a las mil camas, con su medio centenar de puestos de UCI, y a los más de 50 millones de inversión. El equipo de Díaz Ayuso apenas suelta prenda. "La Consejería de Sanidad está ultimando el Plan Funcional de Recursos Humanos para que el Isabel Zendal pueda empezar a recibir pacientes a la mayor brevedad". La CAM aún tiene margen.
El plazo para poner en marcha el megahospital de Valdebebas aún no ha vencido... pero la oleada de contagios resta días al calendario. El Isabel Zendal ha ido escalando sus 12 metros de altura casi al mismo ritmo que la curva de contagios en la capital. El 10 de septiembre, el primer hospital específico para emergencias de toda España se encontraba al 35% de su ejecución. El día previo, las UCI madrileñas superaban el 39% de ocupación. El 23 de octubre, la obra estaba ejecutada al 95% y la saturación de las UCI se había disparado al 38,96%. Hoy la obra civil termina oficialmente y las unidades de intensivos se mantienen por encima del 38%, atendiendo a 492 contagiados en estado crítico.
Sobre el papel todo está claro. El 1 de noviembre comenzarán el 'Plan de Montaje', desde camas hasta equipos tecnológicos. Después se afinarán los suministros. "Testaremos todo por seguridad y se concluirán trabajos exteriores", detallan desde la CAM. A todas luces, las cuadrillas cumplirán con su parte antes de final de año. Una de cal y otra de arena, Madrid sigue sin definir de dónde sacará a los médicos y enfermeras que exige un proyecto de tal magnitud.
"Mantendremos y contrataremos todos los refuerzos que sean necesarios en los distintos hospitales que cedan profesionales al Isabel Zendal", zanjan desde la Comunidad sobre el riesgo de un 'coladero' en el SERMAS. En plena huelga general, los sanitarios esperan con ansias (y ansiedad), conocer los detalles de esa "adscripción voluntaria" que el equipo de Díaz Ayuso planea presentar en la Mesa Sectorial de la próxima semana. No habrá bombos ni platillos, cuando la presidenta tome posesión de la obra para su entrega al uso de los madrileños -si llegan las batas blancas-, como pronto, dentro de otros dos meses.
