El hospital para Emergencias de Madrid avanza viento en popa. El Gobierno regional anunció este lunes que las obras acabarán en noviembre... pero el macroproyecto de Valdebebas podría encallar en una apremiante falta de sanitarios que tiene en jaque a toda la red del SERMAS. El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, apuntó que la plantilla de este centro se armaría con "voluntarios" ya en nómina. El propio Escudero aclaró después que la coletilla no hacía referencia a la no remuneración del personal, sino a la voluntad de los sanitarios de trasladarse de sus centros al nuevo hospital. Lejos de tranquilizar a los especialistas, el plan de Isabel Díaz Ayuso para blindar una de las apuestas estrella de su Ejecutivo ha levantado suspicacias en unas plantillas, al límite.
Desde la Consejería de Sanidad madrileña ha explicado en conversaciones con La Información que las instalaciones del Isabel Zendal, como bautizarán al hospital para pandemias, se nutrirá de "unidades multdisciplinares desde los hospitales mediante un proceso negociado". En este último punto reside el carácter "voluntario" del que habló Escudero, "pero evidentemente retribuido", aclara el departamento. El plan se basará en "un proceso de movilidad", que no es otra cosa que un trasvase de sanitarios desde los propios hospitales del SERMAS. Lo mismo ocurriría, apuntan desde la Consejería, si se tuviera que repetir el despliegue de Ifema. El problema sin resolver es cómo tapará el Gobierno regional los agujeros que deje esta migración en los mismos hospitales que el virus ya tiene contra las cuerdas.
El Ejecutivo regional ya ha admitido que con el intercambio no será suficiente. "Se va a reforzar con todas las contrataciones que sea posible para dotar a este nuevo recurso", trasladan a este diario. Pero los sanitarios, a diferencia de las camas, no pueden doblarse en cuestión de días. El asunto sigue sin resolverse: ¿De dónde saldrán los profesionales? La propia Díaz Ayuso puso el énfasis en este problema, tras su reunión de este lunes con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al incidir en que la falta de médicos es un problema de toda España.
Esta falta de refuerzos fue la puntilla que empujó a los profesionales de la Atención Primaria -aquellos que en primavera sacaron adelante a los cerca de 4.000 enfermos que pasaron por el Ifema-, a convocar un parón en la región de ahora en una semana. Así lo anunció la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) el pasado jueves, al llamar a la huelga "indefinida y completa" en los centros de salud. Escudero apuntó este lunes que Madrid está lista para "activar" el hospital de campaña "en cualquier momento", algo que, insistió, deberá asumirse con "naturalidad" y no como "algo dramático". Madrid ya probó su capacidad de despliegue, pero sin sanitarios las camas solo son camas.
Los sanitarios que se le 'escaparon' a Madrid
La Consejería de Sanidad perdió la oportunidad de retener en las consultas madrileñas a los MIR de Atención Primaria que, esta primavera, terminaron su residencia. La región llamaba a las puertas de la fase 2 de la desescalada, un salto para el que el Ministerio de Sanidad exigía unos centros de salud fortalecidos. Cerca de 1.200 profesionales finalizaron su periplo como residentes el martes 26 de mayo. De los 223 que acabaron la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria, no pasaron de 40 los que firmaron el contrato que les ofreció el Ejecutivo autonómico. Varios especialistas consultados por La Información aseguran que, hasta el lunes 25, la víspera al último día de residencia, Madrid aún no les había puesto un contrato físico sobre la mesa. Muchos de ellos aplacaron la primera ola Covid en el Ifema.
En el estado de alarma, las autoridades madrileñas se comprometieron a contratar 10.000 profesionales de 'refuerzo Covid', en principio, hasta el 31 de mayo, plazo que pronto se amplió. Aunque por poco, la Consejería nunca llegó a alcanzar esta cifra. Los cinco sindicatos que forman la Mesa Sectorial -CCOO, UGT, el Sindicato de Enfermería SATSE, AMYTS y CSIT Unión Profesional- denunciaron en su momento que, en contra de lo apalabrado, no todos los contratos se habían beneficiado de esta primera prórroga.
Desde CCOO denunciaron en su momento que, la primera semana de mayo, algunos sanitarios que tenían apalabrada una ampliación hasta el 31, se encontraron con el cese cuando fueron a firmar la prórroga. Al igual que con los MIR, las autoridades madrileñas trataron de reincorporar después a estos profesionales, pero muchos ya habían sellado un contrato con otras CCAA. La temporalidad y la falta de adhesión de los médicos a un único centro -en el caso de los especialistas de Primaria-, tampoco ayudó a retener a unos sanitarios que hacían falta en cada rincón. El departamento de Escudero ha actualizado el escenario a este medio: "Se han realizado 9.347 contratos de refuerzo, de momento hasta el 30 de diciembre", aseguran.
Ante la pregunta sobre cómo se solventará esta acuciante falta de personal, la Consejería pasa de puntillas sobre el 'agujero' de especialistas y mira a los 'fichajes' de Enfermería. "Este verano se han realizado otras 5.398 contrataciones, principalmente de enfermeras, técnicos de Enfermería y celadores, de las cuales ya está activada la renovación de todas las primeras (más de mil) también hasta el 31 de diciembre". Las cifras generan el mismo optimismo entre los profesionales que en el Ejecutivo regional.
Desde Satse comparan los números a la situación de otros países de la UE. "Para llegar a la media europea de 811 enfermeras por cada 100.000 habitantes necesitaríamos ampliar las plantillas estructurales", alerta el sindicato. En una situación de pandemia, con Madrid de nuevo como epicentro, la urgencia es mayor. El sindicato pone en duda las cuentas de la Consejería: "Hablan de cerca de mil enfermeras este verano para cubrir las vacaciones de una 18.000, entre fijas e interinas... algo no cuadra". "Madrid debe aumentar las plantillas estructurales, consolidar el empleo y sacar vacantes de nueva creación. Entre las que se jubilan, las que están de baja y las que se van, el incremento de plantilla con refuerzos no es suficiente".
La presión asistencial sigue al alza. Madrid cuenta ya con 3.849 ingresados con Covid, 308 en las últimas 24 horas. Más de 400 están en una UCI. ¿En qué se traducen las cifras? El 'bicho' ha vuelto a colonizar más de un cuarto de las camas de los hospitales madrileños -los contagiados suponen un 25%, sobre el 9,5% de la media nacional-. Durante el mando único, Sanidad aprobó medidas excepcionales como la contratación de graduados sin MIR o médicos jubilados. Ante la cuestión sobre si Madrid valora recurrir de nuevo a estos fichajes, la Consejería se ha limitado a responder que "Recursos Humanos está contemplando distintas opciones". Todo es posible. Y la obra del hospital de Valdebebas podría estar lista antes de blindar su plantilla.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios