Tenía razón el presidente francés Emmanuel Macron cuando sorprendió a la opinión pública al rechazar la necesidad de terminar el gasoducto Midcat. Francia no solo no está importando gas natural desde la península ibérica, sino que se ha convertido en uno de los principales destinos de exportación del gas licuado (GNL) que recibe desde EEUU en barcos metaneros.
España disparó en agosto las importaciones desde Francia a través de los gasoductos VIP Pirineos que conectan ambos países a través de Irún y Larrau, según datos del Boletín Estadístico de Enagás. En concreto, las compras de gas se elevaron al equivalente a 4.688 GWh, un 95% más que el mismo mes del año pasado y el triple (+200%) más que en julio.
Hasta ahora, el país galo había sido el mayor destino de las exportaciones energéticas de gas pero este verano se ha revertido la tendencia ampliando el déficit comercial de España en materia energética. Hasta agosto, el agujero de la balanza se había disparado hasta los 25.000 millones de euros.
Francia se erige ahora en la cuarta fuente de suministro en la tarta por detrás de EEUU, que sigue a la cabeza con el 26,5% del total, o Argelia que mantiene su peso en el 24% del gas que llega a España. Nigeria representó el 15,3% y se consolidad como un socio comercial estable en hidrocarburos.
De este modo, el sistema español de gas redujo algo la proporción de gas procedente de los metaneros rusos con GNL que se han convertido en una de las fuentes principales de suministro tras el estallido de la guerra.
España todavía compró a Rusia 4.505 Gwh de gas en agosto y eleva la cifra en 2022 hasta los 32.770 GWh a pesar de que tras el inicio de la guerra en febrero se instauraron restricciones en la UE para reducir el consumo de gas ruso porque financia la invasión que ordenó el Kremlin sobre Ucrania.
Ya es habitual ver a la cabeza del ranking a otro país que históricamente nunca ha estado entre las principales fuentes de suministro. Estados Unidos (EEUU) exportó a España 10.074 GWh, un 92,22% más interanual. Desde que comenzó el boom del 'fracking' al otro lado del Atlántico, España se ha convertido en el mayor comprador europeo de gas estadounidense y solo Corea del Sur, China y Japón en la escala de clientes.
El gas americano ha venido a sustituir progresivamente a las compras de gas a Argelia, que hasta octubre de 2021 suponía prácticamente la mitad del suministro español. Sin embargo, Argel cortar cerrar el gasoducto Magreb-Europa que desemboca en Tarifa (Cadiz) a raíz de las tensiones con Marruecos y porque ese tubo pasa por territorio marroquí.
Ahora solo funciona Medgaz que une directamente Argelia con España y esto ha reducido el flujo de gas total entre ambos países en un 41% interanual. En agosto se situó en 9.127 GWh sin aportación de metaneros con GNL. En lo que va de 2022 el volumen alcanza los 69.184 GWh, un 38% menos que en los ocho primeros meses de 2022.
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