Inditex, dueña de Zara, Lefties, Berskha, Stradivarius o Massimo Dutti, está dando otro estirón en su rentabilidad en 2023 pese a la desaceleración del consumo en algunos de los mercados en los que opera. El gigante textil no solo ha elevado su proyección de margen bruto para el ejercicio, sino que también está mostrando que su apuesta por el cierre de tiendas más pequeñas y el aumento progresivo del tamaño de sus actuales locales está dando sus frutos.
El auge de la venta por internet es clave para este cambio radical en la manera de hacer negocios de la empresa gallega. Su venta por tienda se disparará este año un 33% interanual respecto a 2022, hasta los 5,7 millones de euros en promedio por cada local comercial. Es casi el doble (+91%) más que hace dos años cuando Óscar García Maceiras tomó las riendas de la compañía como consejero delegado.
Mismas tiendas que en 2012, el doble de ventas
El vertiginoso aumento de la ratio de ingresos por tienda coincide también con el imparable cierre de tiendas. Solo en los últimos 12 meses, Inditex cerró 585 tiendas, o un 9,2% de su red física, hasta 5.722 locales. La reducción de unidades más acusada se produjo en su marca de Oysho (-14,3%, hasta 448), seguida de Zara Home (-10,1%, hasta 410 tiendas) y Bershka (-9,9%, hasta 856 tiendas). Zara, el buque insignia del grupo textil, cerró 161 espacios en el último año (-8,1%), hasta 1.827 tiendas.
El grupo fundado por Amancio Ortega completará el ejercicio con algo más de 5.700 tiendas, su nivel más bajo desde 2012. En los últimos cuatro años, Inditex ha bajado la persiana en 2.000 locales en todo el mundo, tendencia que se aceleró tras su salida de Rusia el año pasado y por el plan de optimización de su espacio comercial.
Sin embargo, los espacios que quedan son cada vez más grandes y el alto crecimiento de sus ventas 'online' -que va camino de suponer un tercio del perímetro de ingresos- siguen disparando su rentabilidad por local. La superficie comercial global del grupo terminará 2023 en torno a los 4,47 millones de metros cuadrados, un 5,6% menos en tasa interanual y su nivel más bajo desde 2017.
Pese a este descenso, el local promedio aumentó su superficie a 784 metros cuadrados, un 7% más que en 2022, según estimaciones obtenidas por 'La Información' a partir de datos de Bloomberg. Inditex está facturando casi 7.300 euros por metro cuadrado disponible, un 24% interanual más. En términos históricos, el grupo que dirige Óscar García Maceiras y preside Marta Ortega está a punto de duplicar sus ingresos de hace diez años con el mismo número de tiendas y un 41% más de superficie comercial en sus tiendas.
"Inditex tiene presencia en 213 mercados, con una baja cuota en cada uno de ellos y en un sector altamente fragmentado, por lo que vemos fuertes oportunidades de crecimiento. Seguimos estimando un creciente aumento de la productividad de las ventas en nuestras tiendas. El crecimiento bruto del espacio en 2023 se situará alrededor del 3% y continúa la tarea de optimización de las tiendas. Inditex espera que la contribución del espacio a la venta sea positiva en 2023", explica la empresa.
Aumento de márgenes y ventas por internet
En los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal 2023 (1 de febrero-31 de octubre), la empresa textil registró unas ventas netas de 25.609 millones de euros, un 11% más que el año pasado y un 15% más sin tener en cuenta el impacto de las divisas. Pese a la desaceleración en el crecimiento frente a anteriores periodos, Inditex volvió a estirar su margen bruto en un 12,3%, hasta 12.203 millones de euros, que representa un 59,4% sobre las ventas netas.
Se trata de un incremento de 67 puntos básicos que la empresa prevé acelerar hasta los 75 puntos básicos ante el avance de ventas de la empresa del 1 de noviembre al 11 de diciembre, que ya se corresponden con el cuarto trimestre de su ejercicio. Con todo, el beneficio neto de Inditex en nueve meses creció un 32% interanual, hasta 4.102 millones de euros, nuevo récord en la serie a estas alturas del año.
El modelo de venta integrada 'online' y física no permite distinguir qué porcentaje corresponde a cada cual pero la empresa se ha propuesto alcanzar el 30% de su facturación como ventas digitales. Los analistas esperan que al cierre de 2023 supere la cota de los 32.000 millones de euros en ingresos, de modo que el dueño de Zara estaría cada vez más cerca de la cota psicológica de los 10.000 millones en ventas por internet de acuerdo con su objetivo. "Seguimos experimentando una evolución muy positiva en la venta online y esperamos una participación creciente de la misma en la venta total del grupo", apunta la textil en sus previsiones.
