Incertidumbre en los mercados

Ruido inflacionista al final de la subida de tipos: por qué genera confusión en bolsa

Los inversores aguardan la ansiada pausa en la subidas de tipos de interés con cautela por los efectos secundarios que tendrá el drástico endurecimiento monetario en solo doce meses.

Wall Street
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EFE

El comportamiento de los mercados es uno de los temas más relevantes en la economía global en 2023. Más aún en el contexto global de calma tensa tras la crisis bancaria originada en Estados Unidos el pasado marzo. Es bien sabido que los precios de los activos financieros fluctúan constantemente, y que estas fluctuaciones tienen un impacto significativo en la economía real. Una de las razones de esa volatilidad se debe a la relación que existe entre los precios de los activos y la política monetaria.

En los últimos 18 meses, se ha visto un ciclo acelerado de subida de tipos de interés en algunas economías importantes, como la de EEUU. A medida que las tasas han ido aumentando, también lo han hecho los precios de los activos financieros, como las acciones y los bonos. Sin embargo, en la etapa final de este ciclo, se ha observado un fenómeno interesante: el ruido generado en los mercados financieros.

Esta distorsión o ruido haría referencia, según los expertos, a las fluctuaciones de los precios de los activos que no están justificadas por los fundamentales económicos. En otras palabras, el ruido es el resultado de la especulación y las emociones del mercado, y no de los datos económicos reales. “Esta especulación puede ser alimentada por cualquier número de factores, como la incertidumbre política o la falta de información clara sobre los movimientos de los bancos centrales”, asegura Morgan Stanley en una nota reciente.

En este contexto, es interesante explorar por qué el ruido en los mercados tiende a aumentar en la etapa final de un ciclo de subida de tipos de interés. Florian Späte, estratega senior de bonos en Generali Investments, indica que “en la última etapa del ciclo, los inversores empiezan a preocuparse más por los posibles riesgos que la subida de los tipos podría conllevar para los mercados, y empiezan a especular más sobre la duración de este ciclo y sobre la próxima recesión”.

Dicho de otra forma, los inversores se vuelven más temerosos a medida que se acerca el final del ciclo, y esto se traduce en una mayor volatilidad y en fluctuaciones de precios que no están justificadas por los fundamentales económicos. Además, la falta de información clara por parte de los bancos centrales sobre sus políticas futuras también contribuye al ruido en los mercados.

Para comprender por qué la evolución de los precios en la bolsa tiende a generar ruido en el ciclo final de subida de tipos, es importante tener en cuenta la interconexión de los mercados y cómo las decisiones económicas afectan a los inversores. Según Philipp Vorndran, estratega jefe de Flossbach von Storch, "los inversores están preocupados por el impacto que las subidas de tipos pueden tener en el crecimiento económico, la inflación y, por tanto, en los beneficios empresariales". En este contexto, cualquier noticia o evento que afecte a la economía, como una subida de tipos, puede generar incertidumbre en los mercados.

Otro factor que considerar es la especulación de los inversores en torno a las decisiones de los bancos centrales. Como afirma Albert Edwards, estratega jefe de Société Générale, "los mercados han estado especulando sobre las subidas de tipos durante tanto tiempo que ahora cualquier noticia, ya sea buena o mala, puede tener un impacto significativo en los precios de los activos". 

Precaución con los bonos

De este modo, la especulación de los inversores puede amplificar la volatilidad de los mercados y generar ruido en el ciclo final de subida de tipos. Späte manifiesta su opinión sobre la situación económica actual y cómo esto está afectando al mercado de bonos en Europa. Según Späte, “la situación económica en Europa sigue siendo frágil y vulnerable a eventos externos, lo que ha llevado a una persistente falta de demanda en los mercados de bonos”.

Esta falta de demanda ha llevado a que los rendimientos de los bonos en Europa sigan siendo bajos, incluso en el caso de los bonos corporativos, que en teoría deberían ofrecer un mayor retorno debido al mayor riesgo que presentan en comparación con los bonos del gobierno. “La búsqueda de rentabilidad ha llevado a muchos inversores a recurrir a los bonos corporativos, pero incluso estos bonos ofrecen rendimientos bajos debido a la falta de demanda”, señala Späte.

Esta situación ha llevado a que muchos inversores estén buscando alternativas a los bonos para obtener una rentabilidad adecuada. “Los inversores están buscando alternativas, como los bonos de mercados emergentes o la renta variable, en busca de mayores retornos”, explica Späte. Sin embargo, estas alternativas también presentan riesgos, lo que puede hacer que los inversores sean más cautelosos a la hora de invertir en ellas.

En este contexto, Späte hace hincapié en la importancia de la diversificación de cartera. "Es importante que los inversores diversifiquen sus carteras, no solo en términos de activos, sino también en términos de regiones geográficas y sectores. Esto puede ayudar a reducir el riesgo y a obtener una rentabilidad adecuada en un entorno de mercado difícil", destaca Späte.

En conclusión, el ruido en los mercados financieros es un fenómeno interesante que ocurre en la etapa final de los ciclos de subida de tipos de interés. “Si bien es difícil predecir cuándo se producirá una recesión, es importante que los inversores mantengan una perspectiva a largo plazo y eviten dejarse llevar por la especulación y las emociones del mercado”, finaliza Späte el análisis.

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