El temor a una guerra total en Oriente Medio se diluye este lunes pese del ataque masivo y directo de Irán sobre Israel del pasado sábado. La falta de continuidad en el envío de drones y misiles iraníes, la ausencia de respuesta militar inmediata de las fuerzas israelíes y los llamamientos a evitar una escalada del conflicto refuerzan la tesis entre los inversores de un evento aislado que no tendrá recorrido debido a las capacidades disuasorias de ambos países y los llamamientos a la contención.
Contra pronóstico, los mercados reaccionaron con visibles y mayoritarias subidas en las bolsas europeas y caídas en los precios del petróleo. Sin embargo, el Ibex 35 se quedó fuera del tono positivo y cerró plano (+0,01%), hasta 10.687 puntos. Los ascensos fueron notables dentro del contexto bélico en el Dax alemán (+0,4%), Cac francés (+0,43%) y Mib italiano (+0,56%). Solo el Ftse 100 británico cayó un 0,5%, arrastrado por los valores relacionados con las materias primas y el petróleo. Wall Street se sumó a la oleada alcista con avances del 0,3% para el S&P y Nasdaq al cierre de la sesión europea y en la media estadounidense.
Ni siquiera el buen comportamiento de varios pesos pesados del Ibex 35 pudo saldar la jornada con mejor resultado. Las acciones de Inditex (+1,4%), que representan por sí solas el 15% del selectivo, fueron las más alcistas, seguidas de BBVA (+1,2%), Sabadell (+0,9%), Unicaja (+0,8%) y Bankinter (+0,7%). El sector financiero vuelve a verse animado por las previsiones de menores rebajas de tipos que dejaron tras de si la reunión del BCE de la semana pasada y los datos macro en ese país.
En terreno negativo, los sospechosos habituales en este 2024 pertenecen al gremio de las renovables. Solaria (-3,6%), Acciona Energía (-2,8%) y su matriz Acciona (-2,2%) volvieron a ocupar el furgón de cola en bolsa junto a Cellnex (-2,23%) y Ferrovial (-1,98%). La petrolera Repsol (-1,3%) y Telefónica (-0,9%) fueron claves para que el comportamiento del Ibex 35 no moviese la aguja hacia los avances.
"La situación parece haberse tranquilizado, con Irán dando por finiquitado el tema. Israel, por su parte, si bien ha dicho que respondería, no parece que lo vaya a hacer en el corto plazo dado que no tiene para ello el apoyo de los aliados que le ayudaron a minimizar el impacto del ataque iraní este fin de semana, especialmente del Gobierno de EEUU, que ha dejado muy claro que no participará en un posible ataque de represalia contra Irán, dando por bueno y finalizado el tema", explica Juan J. Fernández-Figares, director de Link Securities.
En el mercado energético, el barril de Brent, referencia europea, registra un descenso del 1,5%, hasta 89,5 dólares. El euro sube un 0,1%, hasta 1,065 dólares, después de su fuerte caída de la semana pasada tras la reunión del BCE y la perspectiva de una divergencia de tipos con la Fed de EEUU que provoque una depreciación de la divisa europea en los mercados. El interés de la deuda a 10 años en España repunta al 3,27%, con el bono alemán al 2,43% y el estadounidense al 4,6%.
"En este sentido, cabe señalar que todas las partes involucradas han actuado según lo previsto. Irán, de cara a la opinión pública del país y del conjunto del mundo árabe, “estaba forzado” a responder al ataque israelí a su consulado, pero lo ha hecho de un modo, anunciándolo de antemano, que parece estaba destinado a permitir a Israel y sus aliados, tal y como ha ocurrido, minimizar el impacto del ataque, lo que parece indicar que no desea una escalada del conflicto en la región. Ahora todo depende de la respuesta israelí, aunque, como hemos dicho, la falta del apoyo de sus aliados creemos que impedirá un ataque directo a Irán", añaden desde Link.
Reacción contenida en Asia y Oriente Medio
Al cierre de la sesión en Europa, la cotización del oro repuntaba un 0,3%, hasta 2.350 dólares, con la plata subiendo un 2,7%, hasta 28,6 dólares, en tanto que el Bitcoin cedía un 1,5% tras su desplome del domingo y se coloca en torno a los 64.700 dólares. La criptodivisa afronta esta semana el ajuste técnico del 'halving' por el cual se reduce la emisión de nueva moneda con implicaciones inciertas para el sector, aunque en anteriores ocasiones empujó su cotización.
El comportamiento de los mercados asiáticos también ha sido mixto. La Bolsa de Catar registraba un descenso del 0,4%, el DFM del mercado de Emiratos Árabes Unidos cedía un 0,8%, mientras que la Bolsa de Arabia Saudí, que abre los domingos, firmó una caída del 0,3% en el índice Tadawull., aunque repunta un 0,9% este lunes. Por su parte, el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio cedió un 0,9%, el Hang Seng un 0,7%, mientras que el CSI de Shenzhen y Shangái repuntaba un 2,5%.
