El PIB de Alemania, la primera economía europea, roza ya la recesión técnica tras confirmarse que cayó un 0,1% en el tercer trimestre del año. La 'locomotora' está siendo incapaz de salir del estancamiento en medio de una coyuntura marcada por la subida de los tipos de interés -que golpea a sus empresas exportadoras-, por la debilidad de algunos de sus socios clave, como China, y por las tensiones geopolíticas que vuelven a presionar al alza los precios de la energía.
La Oficina Federal de Estadística (Destatis) ha confirmado ese retroceso de la actividad, que venía de avanzar apenas al 0,1% en el trimestre previo y de paralizarse entre enero y marzo -la propia oficina ha revisado una décima a la baja este último dato-. En términos interanuales, la economía alemana se contrajo un 0,8% y un 0,4% con los datos ajustados por precios y calendario.
Por componentes, el gasto en consumo final de las familias cayó un 0,1%, prácticamente lo mismo que en el trimestre previo, mientras que la formación bruta de capital fijo o inversión productiva aguantó en positivo y se incrementó un 1,1%. Por el contrario, la inversión en construcción retrocedió un 1%. Las exportaciones se vieron afectadas por un contexto de debilidad general y de financiación más cara y retrocedieron un 0,8% en relación al segundo trimestre. Las importaciones retrocedieron con más fuerza, un 1,3%.
"Después de la débil evolución de la primera mitad del año, la economía alemana comenzó la segunda mitad de 2023 con un ligero descenso", afirma Ruth Brand, presidenta de la Oficina Federal de Estadística. En su estadística, Destatis señala, además, que a principios de la segunda mitad del año, los resultados económicos también fueron débiles en los otros grandes estados miembros de la Unión Europea.
Máximo histórico de ocupados en el tercer trimestre
Sin embargo y, al igual que está sucediendo en otras economías europeas, esta debilidad no ha impedido que la ocupación siga aumentando, aunque con menos fuerza. De julio a septiembre el número de cotizantes rozó los 46 millones, lo que supone un alza del 0,7% interanual y un nuevo máximo histórico.
Hubo más personas ocupadas, pero el número medio de horas trabajadas por ocupado se redujo un 0,7% en comparación con el mismo periodo del año previo por el aumento del empleo a tiempo parcial, la reducción de horas extra y el efecto calendario. La productividad por persona ocupada retrocedió un 1,6% en relación al ejercicio previo.
Que la economía alemana permanezca en una situación de letargo afecta al resto de la Eurozona. Tanto es así que en sus últimas previsiones, publicadas la semana pasada, la Comisión Europea contemplaba que la región apenas avance un 0,6% este año y que Alemania despida el año con una contracción de su actividad del 0,3%. Su recuperación el año que viene sería lenta, según los mismos cálculos, dado que el PIB germano apenas avanzaría un 0,8%.
Estas perspectivas contrastan con las que Bruselas ha dado a conocer para España que, según sus estimaciones, avanzará un 2,4% este año y echará el freno para avanzar al 1,7% el que viene. El hecho de que Alemania y otras grandes economías, como Francia, se estén viendo más castigadas por la coyuntura actual podría llevar al Banco Central Europeo (BCE) a mantener la pausa en la subida de los tipos de interés que, mantuvo sin cambios en octubre.
Así, está previsto que en su próxima reunión del 7 de diciembre deje el precio del dinero por segundo mes consecutivo en el 4,5%, su nivel más alto desde 2001 tras haber aplicado diez subidas consecutivas desde julio del año pasado. La inflación también permite este oxígeno 'extra', dado que la tasa general del Índice de Precios al Consumo (IPC) se moderó el mes pasado en Alemania hasta el 3,8%, la menor desde el inicio de la guerra de Ucrania.
Mejora la confianza de los empresarios alemanes
Mientras, la confianza de los empresarios alemanes ha registrado en noviembre su tercer repunte mensual consecutivo, de acuerdo con el índice elaborado por el Instituto de Investigación Económica de Múnich (Ifo). Este indicador se ha situado en 87,3 puntos desde los 86,9 del mes anterior, alcanzando su mejor lectura desde el pasado mes de julio, informa Europa Press.
En concreto, los empresarios germanos valoran de manera ligeramente más positiva la presente coyuntura, mientras que las expectativas también han mejorado, con su mejor lectura desde mayo. "La economía alemana se está estabilizando, aunque a un nivel bajo", asegura Clemens Fuest, presidente del Ifo, después de que las empresas germanas hayan valorado algo mejor su situación actual y las expectativas para los próximos meses sean menos pesimistas.
