Una cadena de valor muy compleja 

Los precios de origen agrícola y ganadero cumplen un año al alza sin visos de bajar

Unos insumos todavía elevados, la incidencia de la sequía sobre la producción de determinados cultivos especialmente los cereales y un entorno internacional inestable no falicitan la relajación de los precios.   

Los precios de origen en el campo cumplen un año al alza sin visos de bajar
Los precios de origen en el campo cumplen un año al alza sin visos de bajar
Europa Press

Los precios en origen (aquellos que perciben directamente agricultores y ganaderos por sus productos) acumulan un año de alzas por la concatenación de factores como la sequía, la inestabilidad geopolítica (por la guerra en Ucrania, sobre todo) y unos insumos que apenas, en algunos casos, empiezan a dar algo de tregua. Tales son los casos del gasóleo y la electricidad. Una situación que repercute en el precio que pagan los consumidores por los productos agroalimentarios en los supermercados. Es decir, a pie de explotación agricultores y ganaderos reciben más por sus productos pero los todavía elevados costes de producción estrechan todo posible beneficio. Fuentes del Ministerio de Agricultura, consultadas por La Informacion, sostienen que los precios en origen seguirán moderándose en los próximos meses en línea con el valor final que pagamos todos los consumidores. Una percepción que no comparten, desde el ámbito de la producción primaria, organizaciones agrarias como Asaja y COAG.  

Estadísticas como el 'Índice de Precios Percibidos por los agricultores' que elabora el propio Ministerio de Agricultura, retratan claramente este fenómeno. Con datos hasta marzo de este año calculaban un índice mensual de 163,77 frente a 128,32 de junio del año pasado tomando 2015 como el año base (100). Respecto al mismo mes de 2022 serían 26,34 puntos más. En una línea similar, el Índices de precios de productos agrícolas', que publica Eurostat, también considera como la estadística española el 2015 como año base (=100). La misma  registra un gran salto a  partir del segundo trimestre de 2022, cuando el indicador pasa de 160,75 a 192.02 para registrar en los dos trimestres restantes cifras elevadas aunque inferiores: 187,27 (tercer trimestre) y 188,44 (cuarto trimestre). En los tres primeros meses de este año la cifra fue de 180,72. Todavía lejos los datos anteriores a la invasión rusa de Ucrania.

"Hay muchas variables como la climática, los insumos y luego está la inestabilidad política. Lo que ha pasado en esta campaña es que se han juntado las tres", Pablo Resco (Cajamar) 

En una línea similar se mueve la media de los 27 países miembros de la Unión Europea. El índice se situaba en los 177,45 en el primer trimestre de 2022 para, posteriormente, iniciar una destacada escalada disparándose hasta los 216,74 en el segundo trimestre del año pasado, los 200,65 de los siguientes tres meses y los 201,49 del último trimestre de 2022. En los tres primeros meses de este año se ha colocado en 177,17. 

Clima, insumos y política

Entonces, ¿qué cabe esperar en los próximos meses de los precios en origen en el campo? Para Pablo Resco, responsable de Estrategia Agroalimentaria de Plataforma Tierra de Cajamar, "hay muchas variables como la climática que no es solo nacional, los insumos son otra y luego está la inestabilidad política. Lo que ha pasado en esta campaña es que se han juntado las tres". En este sentido, explica, que además hay muchas tipologías de cultivos . "No es lo mismo un sector muy dependiente de los mercados internacionales con otro más marcado por la producción nacional. Por ejemplo, el precio del cereal hace lo que marcan la Bolsa de París y Chicago y lo que suceda en Rusia. Sin embargo, la cereza está más condicionada por la producción anual", señala Resco en declaraciones a La Información. 

Al respecto, este experto estima que "es posible que a lo largo de los próximos meses o semanas poco a poco veamos una paulatina moderación: el precio de la leche va cayendo, la carne da síntomas de estar moderándose o, al menos, de no crecer, aunque también puede haber situaciones coyunturales en productos que por diversas razones experimenten cierto incremento". Lo que, a su juicio, "tarde o temprano se terminará trasladando a la cadena agroalimentaria". Una línea similar defienden fuentes del Ministerio de Agricultura, que prevén que los precios en origen se vayan moderando en los próximos meses en paralelo con los precios finales de los alimentos. En el departamento de Planas lo justifican en  que "hay indicadores que han ido bajando en materias primas y energía". 

En marzo, el dato más reciente, las estadísticas de Agricultura apuntaban a la moderación de algunos insumos como la electricidad (-60,25%) y los carburantes (-4,59%) 

Los propios datos de Agricultura, en concreto el de 'Índices de Precios Pagados por los Agricultores' con datos de marzo, apuntan hacia la moderación de algunos insumos como los fertilizantes nitrogenados (realizados en base a nitrógeno) cuyo precio respecto al mismo mes del año pasado cae un 16,34% mientras que lo pagado por la electricidad caía un 60,25% frente al 4,59% de los carburantes. Lo que contrasta con las subidas de insumos como las semillas (+9%), la alimentación del ganado que se eleva una media del 10,46% , los piensos simples (+13,28%) y un 5,92% de los productos fitopatológicos. 

Pérdidas "desmesuradas" en algunos cultivos 

"El incremento de precios va a seguir", sostiene el director general de Asaja Juan José Álvarez en declaraciones a este medio. Lo que atribuye a unos costes de producción todavía elevados. "Los productores pocas cosas podemos repercutir", apunta el representante de esta organización agraria quien no duda en tachar de "desmesuradas" las pérdidas en muchas producciones a pesar de que no se ha incrementado lo sembrado. En su opinión, la imagen de una metafórica 'tormenta perfecta' sobre el campo se ajusta como un anillo al dedo: sequía, Ucrania e insumos son los ingredientes de la misma.  

Al respecto, Resco (Plataforma Tierra de Cajamar) "la energía nos está dando un respiro y el gasto en electricidad o petróleo se ha moderado bastante incluso llegando a niveles de antes de la guerra". También cree que una situación económica mejor de lo esperada y unas políticas monetaras más restrictivas "están afectando a la economía y moderando el consumo". En este sentido, añade que también se está rebajando el precio de los fertilizantes  especialmente los nitrogenados "que para los cultivos que se van a desarrollar ahora será un alivio". Una moderación que cree que no será generalizada y señala hacia la situación de los frutales y de productos como la cereza  aunque lo atribuye a " problemas climatológicos y temas coyunturales de mercado".

"El incremento de precios va a seguir", apunta Juan José Álvarez (Asaja) 

En una línea similar se pronuncian el secretario provincial de COAG Almería y responsable de Frutas y Hortalizas, Andrés Góngora, quien añade que "los costes de producción, en términos generales no están bajando" y menciona el caso de los salarios y el agua para riego. "Los fertilizantes han bajado algo, pero la tarifa eléctrica está volviendo a su escalada, aunque la formación de los precios tiene poco que ver con los costes de producción porque son los supermercados los que marcan a través de la oferta y la demanda", reflexiona el representante de esta organización agraria. En este sentido, ve "peligroso" que se lancen ciertos mensajes sobre los precios desde Agricultura y aduce que "la sequía no se ha superado". A su juicio, ya es "tarde" para el cereal y habrá que ver si lo mismo sucede con otros cultivos como el olivar y los productos hortofrutícolas.  

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