Hungría está de moda. Audax Renovables entró en el país en 2020 con la compra de la comercializadora E.ON y en apenas tres años se ha convertido en uno de sus pilares para seguir creciendo. La energética acelera para cerrar un acuerdo de 'market access' como el que firmó en España con Shell Energy Europe Limited en febrero del año pasado.
El objetivo no es otro que mantener su posición dominante en el mercado húngaro -donde no opera Shell- y seguir engordando el resultado bruto de explotación (Ebitda). En España, Shell es proveedor externo exclusivo de electricidad y gas del grupo con sede en Badalona hasta 2028 -cinco años a contar desde febrero del año pasado. En definitiva, aspira a cerrar lo más pronto posible una potencial operación de suministro estructurado de energía a través de un socio estratégico, lo que le permitirá reducir las necesidades de circulante y libera a su vez un nivel importante de caja.
Audax y sus sociedades tienen presencia en España, Portugal, Polonia, Alemania, Italia, Francia, Países Bajos, Panamá y Hungría. Entre todos los mercados, registró un Ebitda de 96 millones de euros en 2023, lo que supone un incremento del 78% en comparación del ejercicio precedente. Según las cuentas de la empresa, destacan los buenos resultados obtenidos en Países Bajos, donde la focalización en el segmento pyme y la política de fijación de precios han permitido revertir la situación del curso anterior. Por otro lado, Hungría también fue relevante gracias a la consolidación del negocio y a la entrada en el mercado gasista.
El beneficio bruto seguirá creciendo en los próximos años
"Vemos con optimismo el Ebitda para los próximos dos/tres años. Este crecimiento se va a mantener en los próximos ejercicios y seguiremos intentando reducir deuda financiera neta -en 262 millones de euros al término de 2023-. Obviamente, no en los términos de los últimos dos años dado que tenemos que seguir construyendo parques y habrá un trasvase entre deuda con y sin recursos que nos mantendrá más o menos estables", señala el presidente de Audax, José Elías Navarro.
El empresario, dueño de otras firmas como La Sirena o Ezentis, asegura también que Audax está siempre atenta a la rotación de activos como una manera de maximizar el beneficio de la compañía y, por ende, de sus accionistas. "Consideraremos distintas maneras de financiar el portafolio en construcción para llevar a buen término los parques en cartera", subraya.
A día de hoy, Iberia (España y Portugal), Países Bajos y Hungría son las tres grandes áreas de Audax. El año pasado logró crecer en el portafolio de comercialización en todas y en la segunda el grupo español no descarta nuevas operaciones inorgánicas, es decir, nuevas operaciones de compraventa. Allí desembarcó en 2017 con la adquisición de Main Energie.
El informe de resultados correspondiente a 2023 refleja que Hungría (43%) es el mercado en el que Audax suministra un mayor volumen de electricidad, mientras que Países Bajos (47%) es el principal mercado para el suministro de gas. El mercado ibérico supone un 33% y un 26% en términos de electricidad y gas, respectivamente.
No obstante, el grupo de renovables espera un nuevo horizonte en cuanto a comercialización en España "pasado el susto" de la pandemia y tras el fin de la normativa que impuso un límite de ingresos a las tecnologías inframarginales. En opinión de Elías Navarro, el 'cap' motivó una distorsión en el mercado en el que las compañías con menos posición sufrieron “competencia desleal”.
Recuperar la senda de crecimiento en comercialización en Iberia
"Ahora consideramos que es un buen momento para recuperar la senda de crecimiento en comercialización en Iberia como no podía ser de otra manera. Es un escenario optimista donde pensamos que vamos a volver a crecer de la manera que lo hemos hecho siempre, incrementando volúmenes y márgenes", apunta el directivo.
A cierre de 2023, Audax contaba con 363.000 puntos de suministro. Con el cambio que sufrió el mercado energético en los ejercicios 2021 y 2022, el grupo se focalizó en reforzar la rentabilidad por encima del crecimiento de puntos de suministro, recortándolos así en unos 155.000 hasta ahora. Solo comparando el año pasado con 2022 bajaron un 6%, con una correlación directa en la mejora del margen bruto del (+64%) y del Ebitda (+78%).
La empresa catalana cuenta con una potencia instalada de 263 megavatios (MW) y con proyectos de generación eólicos y fotovoltaicos situados en cinco países. La cartera dispone de proyectos en estado muy avanzado de tramitación, de los que 626 MWp se encuentran en una fase muy cercana al ‘ready to build’. Asimismo, cuenta con 66 MWp fotovoltaicos que se encuentran en fase de construcción.
