La banca pide paciencia con los depósitos y descarta mejoras por presión política

El retraso en la remuneración de los depósitos amenaza con convertirse en una disputa entre Gobierno y la banca. Mientras que la ministra de Economía pidió a os bancos que trasladen la subida de los tipos de de interés a los depósitos, tanto el consejero delegado de Banco Sabadell como el presidente de Caixabank han señalado que esta política comercial vendrá determinada por los clientes y la competencia.

De esta manera, el consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, ha asegurado que la remuneración "llegará no porque ella lo diga (en referencia a la vicepresidenta primera y ministra de Economía y Transformación Digital, Nadia Calviño) sino por competencia". Por su parte, el presidente de Caixabank, José Ignacio Goirigolzarri, ha reconocido que "puede tener su opinión", pero que no podrá influir en las políticas comerciales de cada entidad. 

Con estas palabras los dos directivos han mandado un mensaje claro al Gobierno. En estos mismos cursos, la ministra de Economía, Nadia Calviño, instó a las entidades financieras que fueran trasladando la subida de los tipos de interés a las remuneraciones de los depósitos, y señaló que el próximo 29 de junio se reunirá con las patronales bancarias, CECA y AEB, para hablar varios temas, entre ellos, el pago de las imposiciones a plazo fijo.

Durante su intervención en la segunda jornada de los cursos de verano organizados por la Universidad Internacional de Menéndez Pelayo y APIE, González-Bueno aseguró que "los depósitos están llegando y lo están realizando de forma progresiva". El banqeuro reconoció que a pesar de que no son productos modernos, tienen demanda y explicó que es en el terreno de las hipotecas donde mantienen una "feroz", en palabras de González-Bueno competencia entre entidades.

En ese sentido, el directivo ha recordado que el tipo medio en abril de las nuevas hipotecas escaló en abril al 3,68%, frente al euríbor, el índice de referencia de las hipotecas a tipo variable, que se situó en el 3,757% en abril. "El activo ha subido mucho, porque se ha repreacido mucho en la parte de las empresas, pero el pasivo menos". González-Bueno reclamó al Gobierno que no se fije únicamente en las imposiciones a plazo fijo, sino que "es necesario tener una visión más global de las entidades financieras".  Para posteriormente añadir que "es inoxerable, esta discusión se va a quedar desfasada por el paso del tiempo. Los ajustes no son inmediatos".

Mira también

La liquidez y la concentración bancaria frenaron la remuneración de los depósitos

Por su parte, Goirigolzarri volvió a insistir que "quien tiene que tomar las decisiones de precios y definirlas es cada uno de los bancos", tampoco las patronales. Durante su exposición, el presidente de Caixabank ha repasado la evolución de los tipos en los últimos años, desde 2016, cuando éstos se encontraban en negativo.  En ese momento, "los bancos reaccionan de manera diferenciada, según sea el segmento de empresas y de particulares, repercutiendo a los primeros ese coste y no a los depósitos". Esto llevó, señaló Goirigolzarri, que "buscar productos para que nuestros clientes tuvieran cierta rentabilidad frente a los tipos de interés negativos, que era más sofisticados" y que ha llevado a que el 40% de los recursos de los clientes de Caixabank estén fuera de balance.

Por su parte, la presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelan, ha evitado entrar en el debate, asegurando que se trata de una cuestión entre entidades. "No se puede hablar de precios por cuestiones de la Comisión Nacional del Mercado de Competencia", ha insistido. 

La banca pide no más reducciones del número de bancos

Durante su intervención, González-Bueno lanzo también otros dos mensajes. Uno que "no es conveniente que se reduzca el número de bancos, estamos más concentrados que en Europa y eso afectaría a la competencia", (a la que tanto se ha referido) y otro que hay productos que son mejores para el cliente y para el banco, como son fondos asegurados o seguros de ahorro, con rentabilidades que se sitúan por encima del 2%.

Durante su intervención también ha repetido el mantra en el que se apoya el sector para evitar trasladar la subida de los tipos de interés a estos productos de ahorro conservador: la excesiva liquidez del sistema. "Una de las ventajas del sistema financiero español es que está saneado y eso ha producido un excesivo desapalancamiento de las familias y empresas, que ha llevado a que la situación de liquidez de los bancos sea muy abundante ".