Sevilla: "Con la información de ahora, no fue buena idea salir a bolsa en 2011"

José Sevilla, consejero delegado de Bankia, ha sido claro sobre la sentencia del caso Bankia: "Estamos muy contentos". Desde la entidad siempre se ha defendido que la salida a bolsa de la entidad que se llevó a cabo en 2011 y de la que todos los directivos salieron absueltos "era una operación reglada y regulada, siguiendo todos los cánones regulatorios exigidos". En cambio, el segundo de José Ignacio Goirigolzarri también ha admitido que "con toda la información que tenemos ahora, está claro que no fue una buena idea" la salida a bolsa en 2011. 

El CEO de la entidad financiera también ha aprovechado la presentación de resultados del tercer trimestre para descartar penalizaciones tras romper su alianza con la francesa Crédit Agricole. Cabe recordar que a finales del año pasado ambas entidades formaron una 'joint venture' para financiación al consumo en el punto de venta. "La lanzamos hace poco y entró en actividad a principios de este año", recordó Sevilla. "Nos da pena porque es una operación con muy buena pinta", admitió. En cambio, ha recordado que la inversión en este proyecto ha sido discreto, por lo que habrá previsiblemente una venta de la participación de la antigua Caja Madrid a Crédit Agricole. 

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Esta ruptura se producirá como consecuencia de la fusión con CaixaBank que las juntas de accionistas de la propia Bankia y de la catalana aprobarán los próximos días 1 y 3 de diciembre. En este contexto, al ser preguntado sobre la elección de la entidad que controla Criteria Caixa en vez de otras opciones, Sevilla ha señalado que de "CaixaBank teníamos una propuesta", algo que en el caso de otras entidades, como Sabadell, "no ha existido". "Había interés por parte de los dos accionistas para que se analizara y se ha visto que tenía valor. Estamos convencidos de que Caixa es un 'partner' perfecto", admitió.

Durante este tercer trimestre, Bankia ha decidido seguir aumentando las provisiones realizadas hasta junio en 155 millones de euros más, lo que lleva a un colchón de 465 millones para hacer frente a las posibles consecuencias que se deriven de la pandemia. Tras esta nueva aportación a la 'hucha', Bankia ha cerrado el mes de septiembre con unos beneficios de 180 millones, un 68,8% menos que en el mismo periodo del año anterior.

Los ajustes se negociarán tras el cierre legal de la fusión

Más allá de esto, el consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha afirmado que la negociación con sindicatos sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que se pueda derivar de las sinergias que se consigan con la fusión con CaixaBank comenzarán a negociarse con los sindicatos una vez que se haya cerrado legalmente la unión. De acuerdo con las previsiones que manejan en la entidad, este hecho está previsto para el próximo mes de marzo.

Sevilla espera que las salidas de los empleados empiecen a hacerse efectivas tras un acuerdo con la representación sindical y durante los años 2021 y 2022. En este sentido, podría hacerse en dos fases, una primera en servicios centrales y una segunda en las oficinas una vez que se complete la unión tecnológica, proceso previsto para el cuarto trimestre de 2021.