Duro Felguera registró unas pérdidas de 21,9 millones de euros en 2023, en línea con las "peores previsiones" de la empresa para el último año en comparación con las cuentas de 2022, cuando anotó unos ganancias de 5 millones de euros, según ha comunicado la compañía asturiana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La facturación de la firma, por otra parte, creció un 140% interanual en el mismo periodo, alcanzando los 281,2 millones de euros en 2023. La partida de la que proceden la mayor parte de estos ingresos fue la de Servicios Especializados, que suma cerca de la mitad del total (140,4 millones de euros), seguida de Plantas Industriales (73,7 millones) y Energía (53,8 millones).
El resultado bruto de explotación (Ebitda) también experimentó una caída en 2023, cerrando el año en los 13,6 millones de euros negativos, desde los 4,2 millones positivos del ejercicio anterior. La deuda neta del grupo, por otra parte, se incrementó hasta marcar los 144,4 millones de euros.
Toma de control de los socios mexicanos
El pasado mes de febrero, las mexicanas Prodi y Mota-Engil México notificaron formalmente a CNMV la toma del control de la compañía al hacerse con una participación del 54,66% tras ejecutarse las dos ampliaciones de capital que acordaron ambas sociedades con el grupo asturiano de ingeniería.
Ambas operaciones elevaron el capital social de Duro Felguera en 91,3 millones de euros, hasta situarse en 10,75 millones de euros, dividido en algo más de 215 millones de acciones de 0,05 euros de valor nominal cada una.
De acuerdo con los datos reportados por Duro Felguera al supervisor, tras ejecutarse los respectivos aumentos de capital, José Miguel Bejos, socio de control del grupo Prodi, se atribuyó una participación del 54,66% del capital social de Duro Felguera en virtud del pacto de sindicación firmado con Mota-Engil México. "En consecuencia, José Miguel Bejos tiene el control de Duro Felguera", indicó el grupo industrial asturiano.
