La hibridación de plantas renovables se ha convertido en el nuevo 'boom' de las energías limpias. Las eléctricas están aprovechando sus parques eólicos para llenarlos de placas solares y sacar el máximo partido a los terrenos e infraestructuras con los que ya cuentan. De hecho, España es uno de los países pioneros en la hibridación de energía renovable porque es un proceso de generación que abarata costes, mejora la producción y garantiza un suministro más estable.
Hay que tener en cuenta que uno de los mayores impedimentos para el crecimiento de las energías renovables es la capacidad de conexión. De este modo, las plantas de generación híbridas utilizan el mismo punto de conexión a la red y comparten infraestructuras, como la subestación y la línea de evacuación de la electricidad producida. Además, se ubican en terrenos que ya estaban destinados a la generación renovable y permiten contar con caminos e instalaciones comunes para la operación de ambas tecnologías.
Digamos así que la hibridación permite optimizar el uso de la red y minimizar el impacto ambiental de los proyectos en los lugares donde están ubicados. Al contar con tecnología fotovoltaica y eólica, la instalación reduce significativamente la dependencia de las condiciones ambientales cambiantes y las limitaciones por la posible falta de recursos como el viento o el sol. No obstante, aunque la hibridación permita producir con dos tecnologías renovables complementarias, nunca se podrá evacuar más producción de la que se tenga concedida.
Acelerar la tramitación ambiental
Por su parte, la tramitación de instalaciones híbridas sigue el mismo procedimiento que cualquier otra instalación renovable, aunque en ocasiones se puede acelerar el cumplimiento de los criterios establecidos en los hitos de desarrollo. Por ejemplo, la hibridación permite evitar impacto ambiental al no haber necesidad de construir más líneas eléctricas, ya que se comparten las existentes. Actualmente, hay dos modalidades de hibridación permitidas por la normativa: plantas nuevas construidas para un desarrollo híbrido e hibridación de nuevos módulos de generación partiendo de instalaciones ya existentes, siempre que estas no se desmantelen.
Iberdrola construirá en Burgos la primera planta híbrida eólica y solar de España. Destinará más de 40 millones de euros a la instalación de dos plantas fotovoltaicas de 41 y 33 megavatios (MW) para hibridar el complejo eólico Ballestas y Casetona (BaCa) de 69 MW. En total sumarán más de 170.000 módulos fotovoltaicos y se ubicarán en los municipios de Revilla Vallejera, Villamedianilla y Vallejera. Promoverá más de una decena de proyectos en distintas provincias, algunos para hibridar proyectos ya existentes y otros directamente híbridos. No obstante, la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán levantó su primer proyecto híbrido eólico-solar en Port Augusta (Australia), con 50 aerogeneradores y 250.000 paneles solares.
En el caso de Endesa, a través de su filial Enel Green Power España, invertirá más de 1.500 millones de euros en construir siete proyectos de renovables hibridados en la central térmica de Teruel (Andorra), que sumarán más de 1.800 MW de capacidad. También contará con dos plantas de almacenamiento con baterías y un electrolizador de generación de hidrógeno verde. Asimismo, en Portugal combinará una instalación con 365 MWp de energía solar fotovoltaica y 264 MW de energía eólica en la Región de Abrantes, que también contará con una batería de 168 MW. Por otro lado, en el embalse de Alto do Rabagão, instalará 43 MWp de energía solar fotovoltaica flotante, 48 MW de energía eólica y 49 MW de almacenamiento con baterías.
Por su parte, Naturgy anunció a mediados de mayo la compra de una cartera renovable en España de 422 MW de energía eólica ya en operación y 435 MW de hibridación solar fotovoltaica en "avanzado estado de desarrollo". En Australia, la gasista prevé disponer de una potencia renovable operativa de aproximadamente 1 gigavatio (GW) en 2024 y entre los proyectos destaca el de hibridación solar y almacenamiento de Cunderdin (128 MW solares y 55 MW de almacenamiento).
Acciona energía es pionera en el sector
Acciona Energía es otro de los actores importantes en el campo de la hibridación. La compañía fue pionera al recubrir la torre de un aerogenerador del parque eólico Breña (Albacete) con paneles orgánicos flexibles destinados a producir energía para el consumo eléctrico interno de la turbina. Actualmente, tiene en cartera 2,3 GW de hibridación, que están pendientes de iniciar o de avanzar en su proceso de aprobación medioambiental, aunque todos tienen garantizado su acceso a la red. Destacan las plantas fotovoltaicas que pretende levantar en los parques eólicos de Escepar y Peralejo, situados en los términos de Villalba del Rey y Tinajas (Cuenca). Su construcción comenzará este año y constan de 90.384 módulos, que producirán una media de 92 gigavatios hora (GWh) anuales de electricidad limpia.
La portuguesa EDP Renovables también ha obtenido autorización para poner en funcionamiento un proyecto híbrido en España. Junto al parque eólico de Cruz de Hierro, situado en la localidad de Santa María del Cubillo (Ávila), ha instalado más de 25.000 paneles solares. Esta es la primera planta híbrida instalada en España que recibe autorización de explotación y la segunda en la península ibérica, después de que EDPR pusiese en marcha en el norte de Portugal el pasado enero el que fue su primer proyecto híbrido a escala mundial.
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