Sin prisa pero sin pausa. Así se puede calificar el crecimiento que ha experimentado Indexa Capital, el mayor gestor automatizado de nuestro país, que ya ha alcanzando los 700 millones de euros bajo gestión gracias a alrededor de 31.000 clientes. De hecho, la firma va a más gracias al boom por el mundo de la inversión y, sobre todo, por el auge de la gestión indexada. Este boom ha hecho que bata sus propias previsiones más optimistas y que pronostique ahora que alcanzará los 1.000 millones en el verano de este año e, incluso, algo antes.
La firma fundada por Unai Ansejo, François Derbaix y Ramón Blanco ha experimentado un crecimiento meteórico desde su nacimiento en 2015, aunque se ha acelerado en el último año. La Covid-19 y los confinamientos han puesto más de moda el mundo de la inversión y le ha permitido doblar el patrimonio gestionado o asesorado desde los 345 millones hasta por encima de los 700 millones durante 2020. Unai Ansejo, su CEO, ha señalado a La Información que "en noviembre contemplábamos alcanzar los 1.000 millones a finales de 2021 pero todo se ha acelerado y, de seguir así, lo lograríamos en verano e incluso algo antes".
Esta buena marcha se ha logrado gracias a que durante 2020 han duplicado el número de clientes y de que la base de usuarios antiguos también aporta dinero a los distintos vehículos de inversión. "Actualmente el dinero del cliente antiguo supone alrededor de un 70% y, por tanto, el de los nuevos sobre un 30%. De media, los inversores invierten, de manera inicial, alrededor de 10.000 euros y aportan unos 800 euros al mes", señala Unai Asenjo.
De los 700 millones de euros de activos gestionados o asesorados, la mayoría (545 millones) están en las carteras de fondos indexados. Aquí, el perfil del cliente de Indexa tiene un 60% de su exposición a renta variable y el 40% restante en renta fija. Otros 137 millones están en planes de pensiones indexados, tanto individuales como de empleo mientras que los 12 y 6 millones restantes son para planes de pensiones y entidades de previsión social voluntaria (EPSV) y su fondo de fondos Indexa RV Mixta Internacional 75, respectivamente.
El objetivo, a medio y largo plazo, en aún más ambicioso para Indexa Capital. El gestor automatizado prevé "ser la mayor gestora independiente de nuestro país a cinco, seis o siete años". Para ello, deberá alcanzar las cifras de firmas como Mutuactivos o Bestinver, que cerraron el pasado ejercicio con un patrimonio bajo gestión de 6.563 y 4.593 millones de euros, respectivamente.
Esta evolución ha tenido premio para los fundadores de la compañía. Indexa Capital ha logrado su primer año de beneficios tras ganar alrededor de 20.000 euros y dejar atrás las pérdidas de 248.000 euros registradas en 2019. Además, anunció que bajará un punto básico (0,01%) su comisión de gestión en las carteras de fondos de menos de 500.000 euros a partir del 1 de enero de 2021.
La compañía también ha comenzado su expansión internacional y, a comienzos de noviembre del año pasado, aterrizó con su servicio de gestión de carteras de fondos de inversión indexadas en Bélgica. Dicho servicio está disponible en francés y para personas físicas residentes en Bélgica, donde las carteras están depositadas en BinckBank, del grupo SaxoBank. El objetivo es, poco a poco, abrir en países de Europa continental hasta que se conviertan en el gestor automatizado independiente líder en Europa y 'top 3' a nivel mundial.
Otras firmas también han visto aprovechado el boom por el mundo de las inversiones ya que el número de 'robo advisors' se ha disparado desde que en 2014 apareciese Feecapital en nuestro país. Por ejemplo, Finizens cerró el año con más de 10.000 clientes, alrededor de 2.000 más que un año antes mientras que Finanbest o InbestMe son otros de sus 'rivales. Los bancos también quieren su trozo del pastel y muchos cuentan con presencia en este negocio ya que Bankinter tiene PopCoin; Openbank opera con el asesoramiento de BlackRock y la gestión de Santander; y Caixabank cuenta con Smart Allocation.
Las gestoras más grandes del mundo también han sacado partido a la buena evolución de la bolsa estadounidense y, también, al boom por la inversión. BlackRock elevó sus activos bajo gestión en 2020 un 16%, hasta los 8,67 billones de dólares mientras que los de Vanguard, la gran gestora pasiva, han superado la marca de los siete billones de dólares por primera vez tras lograr entradas de efectivo netas de 186.000 millones de dólares el año pasado. De hecho, el patrimonio se disparó desde los 6,2 hasta los 7,1 billones.
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