El miedo a la recesión se apodera de los inversores y aboca a Wall Street a cerrar en números rojos, que registra su peor semana del año. Al cierre de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, pierde un 0,45%, lo que se traduce en 139,40 puntos menos, hasta 30.822,42 mientras que el selectivo S&P 500 restaba un 0,72% o 28,02 unidades, hasta 3.873,33. Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq, que aglutina a las principales tecnológicas, sufrió las mayores pérdidas con una bajada del 0,90% o 103,95 enteros, hasta 11.448,40.
En el conjunto de la semana, el S&P 500 cayó un 4,8%, su peor semana desde el 17 de junio, y el Dow perdió un 4,1%, su peor semana desde la semana que terminó el 26 de agosto. Mientras que la mayor caída fue para el Nasdaq, que cayó un 5,5%, su peor semana desde el 10 de junio. Estas bajadas son sorprendentes si se tiene en cuenta que las acciones de EEUU seguían un patrón al alza a principios de este verano, subiendo de sus mínimos de mediados de junio gracias a las ganancias de las compañías que no fueron tan malas como se temían y algunos datos sólidos de empleo.
Sin embargo, los inversores, que esperaban que esta recuperación a mediados de verano fuera el comienzo de un nuevo repunte del mercado, se asustaron cuando los datos del martes confirmaron que la inflación sigue alta. Los inversores ahora anticipan que la Reserva Federal (Fed) tendrá que seguir aumentando los tipos agresivamente, lo que podría llevar a la economía de EEUU a una recesión.
Por su parte, la caída de este viernes ha estado alimentada en parte por el anuncio del gigante del trasporte de paquetería FedEx de que llevará a cabo recortes, despidos y el cierre de 90 oficinas por una bajada del volumen global de envíos. Tras anunciar este jueves unos resultados trimestrales peores de lo esperado, la empresa cayó un 21,40%, tras dejarse la víspera otro 13%. En unas declaraciones al canal CNBC, el director ejecutivo de FedEx, Raj Subramaniam, se unió a las voces que predicen una recesión internacional.
Por sectores, en el cierre ha imperado el rojo y las mayores pérdidas son para el energético (-2,17%) y el de industriales (-2,53%). Mientras que los dos únicos sectores que han cerrado en verde son el de bienes esenciales (0,25%) y el inmobiliario (0,03%). Entre los 30 valores del Dow Jones casi se dividía a la mitad las compañías que han terminado la sesión en rojo y en verde. Llamaban la atención las pérdidas de Boeing (-3,67%) y Chevron (-2,6%), mientras que en el otro extremo destacaban las ganancias de Home Depot (1,63%) y Johnson & Johnson (1,53%).
En el mercado del petróleo, el crudo de Texas ha cerrado en 85,11 dólares el barril y al cierre de Wall Street la rentabilidad del bono del Tesoro estadounidense a diez años bajaba al 3,445%, el oro subía a 1.683,50 dólares la onza y el dólar bajaba frente al euro, con un cambio de 1,0011.
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