El empeoramiento de las condiciones meteorológicas obliga al dispositivo desplegado de Bomberos, UME y Guardia Civil a cancelar al principio de la tarde la operación para encontrar al segundo trabajador.
Los equipos de rescate encontraron cerca de la medianoche el cadáver del primero de los dos operarios a los que se busca en las proximidades de Riofrío (Aller), a cuatro kilómetros del puerto de San Isidro.
Los militares recibieron material que debía desmilitarizarse y destruirse. Han muerto cinco profesionales de las Fuerzas Armadas. Dos heridos, con secuelas de por vida, siguen peleando en los tribunales.
El aviso de la ministra de Defensa sobre la situación en algunos centros devuelve al centro de la alarma a un colectivo que ya protagonizó algunas de las peores incidencias en la pasada primavera. Su curva aumenta.
Los efectivos de reconocimiento y primer escalón, según ha informado el Ejecutivo, ya se encuentran en las instalaciones en la tarde de este viernes.
Este viernes, cuando previsiblemente se anuncien las nuevas restricciones en lugares de alta afectación del coronavirus, recibirá la petición formal de la CAM con el número de militares requeridos.
El ministro de Sanidad asegura que van a analizar todas las medidas que proponga la Comunidad, incluida la contratación de médicos extracomunitarios.
El delegado del Gobierno, José Manuel Franco, ha señalado las fuerzas de seguridad del Estado podrían estar actuando ya "hoy", pero será Madrid la que marque "el momento y los lugares" del dispositivo.
El ministro de Sanidad ha considerado "preocupante" la situación de la pandemia en la Comunida, pero cree que todavía hay recorrido antes de la alarma.
En Vilariño de Conso, según ha informado Medio Rural, se ha declarado la situación dos de emergencia como medida preventiva por proximidad a los núcleos de Soutogrande y Soutelo.
En el ayuntamiento orensano de Cualedro permanece decretada la situación dos, que se fija cuando hay proximidad de las llamas a núcleos habitados.
La incorporación de estos efectivos estaba prevista para el día 15, pero se ha adelantado a este viernes con estos 30 primeros militares de la UME que han superado la formación.
El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha anunciado la ampliación de las últimas medidas decretadas el pasado 17 de agosto para frenar los contagios por Covid-19.
Las fuerzas de extinción, apoyadas por los militares de la UME, suman cuatro días luchando con las llamas y contra un viento que perjudica su contención. Las autoridades no dan por controlado el fuego todavía.
Hasta 140 personas trabajan en la extinción del incendio, que abarca una superficie perimetrada de 4.480 hectáreas.
Algunos de los vecinos han sido trasladados al polideportivo y la Cruz Roja ha habilitado tres albergues en los que trabajan 14 voluntarios.
La nueva directiva que establece los objetivos, planeamiento y necesidades de las Fuerzas Armadas añade las pandemias y la atención social y urgente en territorio español como retos prioritarios a corto plazo.
Ante el peligro de que pudiera llegar a la localidad de Zarzalejo, los responsables de la comunidad han recurrido a las Unidad Militar de Emergencias (UME).
El incendio se inició durante la tarde de este miércoles en la parroquia de San Millao, en Cualedro, y, en solo unas horas, avanzó rápidamente alimentado por las altas temperaturas y el viento.
Los inmigrantes llegaron a Almería y fueron trasladados en torno a las 23,00 horas del martes a Granada, donde la Junta tiene un albergue para acoger a menores.
Solo uno de los tres fuegos (Monterrei, Viana do Bolo y Verín) permanece todavía fuera del control de los bomberos. Se trata del de Monterrei, que él solo ha quemado ya 450 hectáreas.
La muerte de estas personas tuvo lugar el 21 de abril, en plena pandemia, y sus restos quedaron en alguno de los depósitos de habilitados por la Comunidad.
La decisión se ha tomado tras el varapalo de los resultados de las últimas PCR, que dejan al menos tres positivos por coronavirus entre los residentes.
Sánchez presenta la ‘Biblia’ de la seguridad estratégica. La pandemia, gracias a la brillante actuación del Ejército, es la protagonista en la nueva configuración de las Fuerzas Armadas.
Clece y una empresa aragonesa se reparten el servicio para mantener a punto los cuarteles e instalaciones militares. Había casi 300 millones en juego.
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