Las Castillas blindan sus territorios

Ayuso se planta y pedirá a Sánchez que permita el cierre de Madrid... por días

La presidenta regional mantiene la incertidumbre a solo 72 horas de la festividad de Todos los Santos, cuando se prevé que se dispare la movilidad.

La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page.
La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page.
Comunidad de Madrid

"Voy a pedir que nos permitan cerrar Madrid por días". El último giro de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, mantiene la incertidumbre de los madrileños. A 72 horas del puente, la líder 'popular' ha confirmado que solo procederá al aislamiento de la región si el presidente, Pedro Sánchez, le permite decretarlo por días, frente a la semana que se marcó como mínimo en la última orden del estado de alarma. Desde cuándo y hasta cuándo siguen siendo las dos grandes preguntas para los madrileños. "No hemos hallado informes que avalen la eficacia epidemiológica de las limitaciones de entrada y salida de carácter perimetral, por lo que consideramos que, de adoptarse, esta medida debiera poder tomarse por días", reza la misiva que Ayuso ha enviado al líder del PSOE.

Carta de la líder madrileña al presidente Pedro Sánchez
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Con esta última maniobra, Díaz Ayuso podría dejar sin efecto una de las exigencias de la última orden sobre el decreto de alarma del Ministerio de Sanidad: los cierres perimetrales debían durar, al menos, siete días. "La Comunidad sabe lo que hay que hacer porque tiene un plan". Pero el plan de Díaz Ayuso sigue dejando a los madrileños con un pie dentro y otro fuera de la región de cara al puente. "Es una decisión difícil que no tomaré sola", deslizó la presidenta. No ha sido así. Y es que la CAM ha confirmado que solo decretará el cierre si Sánchez cede y deja en sus manos la fecha de caducidad de la medida.

Esta tarde, la líder madrileña se ha reunido con el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page. Ayuso justificó el retraso en la toma de decisiones con que esta se tomaría, finalmente, en consenso con los gobiernos de estas dos CCAA cuyas decisiones, por ser territorios colindantes, se afectan directamente. Mientras las dos 'Castillas' han acordado el cierre de sus territorios hasta el próximo 9 de noviembre, no hay certezas para los madrileños. 

"Voy a escribir una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hoy mismo porque mañana se debate la prórroga del Estado de alarma y se está modificando el Real Decreto. Le voy a pedir que se permita a las comunidades autónomas, y en este caso, a Madrid, perimetrar por días porque en el Estado de alarma se decide que es por periodo de siete días y no sé por qué motivos", ha declarado la presidenta sin detallar si, finalmente, acordonará o no la región de cara a la próxima fiesta. 

Los presidentes castellanos han trasladado un mensaje unánime: contra el virus, las fronteras se disipan. El discurso de la líder madrileña ha sido otro. "Madrid es la única región que ha sufrido un estado de alarma a la carta", ha denunciado. Mientras el país vive un efecto dominó de confinamientos, Díaz Ayuso ha argumentado que su equipo técnico no lo tiene tan claro. "No han reportado ninguna evidencia de que los cierres en grandes áreas sean efectivos. Creo en las medidas quirúrgicas y en ir al detalle", ha aseverado .

El titubeo de Díaz Ayuso ha alimentado los rifirrafes en la coalición en plena escalada. Mientras el vicepresidente ha defendido con firmeza el cierre -"No estamos en Madrid, ni en el resto de España, para fiestas ni puentes"-, el ala más conservadora ha presionado a la presidenta para mantener abiertas las fronteras madrileñas. La portavoz de Vox en la Asamblea, Rocío Monasterio, se ha mostrado implacable y ha tildado a Aguado de "infiltrado de Sánchez". Por su parte, Ayuso ha preferido mantenerse en un segundo plano hasta esta tarde, cuando ha comparecido abrigada por los presidentes de las dos 'Castillas'.

La evolución de la pandemia ha vuelto a poner a las autoridades en la encrucijada de calibrar economía y salud en la misma balanza. Aragón, País Vasco y Asturias, dieron los primeros pasos en la nueva cascada de confinamientos. El efecto dominó no se hizo esperar. Navarra, La Rioja y Murcia engrosaron la lista. "Firmeza, colaboración y determinación", han coincidido los presidentes castellanos este miércoles, que han acordado el aislamiento perimetral hasta el 9 de noviembre. Desde el jueves, en el caso de Castilla-La Mancha, y desde el  viernes, en el de Castilla y León. Estas regiones se suman así a Murcia, Navarra, La Rioja, Aragón, Asturias y Euskadi que ya han anunciado el cierre perimetralmente sus territorios.

Con el cierre de Madrid aún en el aire, la CAM dio a conocer un nuevo giro en su hoja de ruta contra la pandemia. El Ejecutivo madrileño permitirá las reuniones de no convivientes, de hasta seis personas, durante el toque de queda, entre las 0.00 horas y las 6.00 horas. Apenas un apunte limita estos encuentros: solo se podrán producir siempre que no haya movilidad. Madrid abre así el cerco a las reuniones familiares y de ámbito privado, las mismas a la que la propia CAM señaló como el principal foco de contagio en la capital.

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