Nuevo capítulo en las negociaciones del VI Convenio Colectivo de Endesa. En la última reunión que han mantenido sindicatos y empresa se trató el capítulo de régimen económico y desde la eléctrica se ha trasladado el compromiso de que sus 9.000 trabajadores no pierdan poder adquisitivo durante la vigencia del nuevo acuerdo, que comprenderá de 2024 a 2028.
Una comunicación interna, a la que ha tenido acceso La Información, pone de manifiesto que Endesa apuesta por una línea continuista y en ella se destaca que los conceptos salariales entre 2018 y 2022 se sitúan un 6% por encima del IPC real del periodo. El escrito pone de ejemplo que una persona de nivel competencial II, en el periodo 2018-2022, ha tenido un incremento en sus retribuciones salariales del 24,39%, lo que da un promedio anual del 4,88%. Fuentes de la empresa han preferido no hacer comentarios.
El 31 de diciembre termina la vigencia del actual acuerdo y se activará de manera automática el periodo de ultraactividad, de un año de duración. No obstante, no aplicarán algunas medidas como el incremento salarial y la paga ligada al beneficio bruto de explotación (Ebitda) porque solo pueden estar activas legalmente bajo el paraguas de un convenio colectivo.
Mantener la paga de septiembre de (hoy de 1.664 euros)
Mientras llega dicha fecha se siguen manteniendo las reuniones de la mesa de negociación y la eléctrica que dirige José Bogas apuesta por mantener la aplicación del incremento general fijo y su revisión asociada al IPC, así como eliminar el aumento adicional. Además, ha realizado un primer planteamiento para trasladar una parte de esa subida que plantea borrar al fondo de las promociones económicas cada uno de los años de vigencia del convenio.
Otra de las propuesta de la empresa es la de seguir con la paga de septiembre, actualmente en 1.664 euros. "Con los planteamientos de Endesa se busca conseguir el mayor consenso posible para formalizar un convenio nuevo que mantenga aquellos aspectos que han funcionado en el anterior, y planteando aquellas modificaciones que nos permitan ser más flexibles para abordar las nuevas necesidades de la compañía",
UGT reclama una subida salarial del 3% anual
UGT, sindicato mayoritario, reclama un incremento salarial anual del 3% para cada año de vigencia y la consolidación de la paga ligada al Ebitda. Por su parte, CCOO propone un incremento salarial -consolidable y revalorizable- conforme al IPC más un incremento lineal de productividad. También solicita un pago anual de 400 euros para aquellos trabajadores que realicen cursos formativos no obligatorios y un importe o un número de acciones a determinar por “retención del talento”. Otra demanda del sindicato es la equiparación salarial mediante tablas, de modo que “mismo puesto de trabajo, mismo salario”.
En cuanto a los pluses o complementos, solicita que se definan tres en concreto: uno que refleje la particularidad del departamento de inspecciones/cortes; otro que refleje la particularidad de los riesgos que afronta el personal que recorre gran cantidad de kilómetros a diario y otro por peligrosidad, penosidad y toxicidad por la realización de trabajos. El Sindicato Independiente de Energía (SIE) también apuesta por un incremento económico general del 3% anual y una subida en tablas del 10% para el año que viene y del 5% para el resto del periodo. La fórmula del actual convenio consiste en un incremento consolidable y revalorizable del 1% anual.
La negociación del convenio ha llegado hasta la justicia por la 'guerra' sindical. La Sala de lo Social de la Audiencia Nacional ha suspendido la vista que comenzó el 14 de noviembre a demanda de CCOO y SIE. Ambos intentan impugnar la negociación al considerar que la dirección de la empresa ha otorgado la "mayoría absoluta" a UGT y que se ha producido así una "evidente vulneración del derecho de la plantilla”.
Según el acta de suspensión, a la que ha tenido acceso este medio, a propuesta de la Sala, las partes acordaron que la Audiencia Nacional solicitara a las distintas oficinas públicas de elecciones sindicales los certificados de los representantes unitarios a 17 de junio de 2023 de las empresas que han de computar para la mesa del convenio.
Además, se debe determinar si los representantes unitarios de la empresa Gridspertise Iberia se han de considerar o no a los efectos de representatividad alcanzada por cada uno de los sindicatos. Desde SIE defienden que los mandatos con más de cuatro años de vigencia no deben computar a la hora de la representatividad y que se deben tener en cuenta los de las empresas del ámbito funcional del actual convenio.
UGT afirma que, en base a la jurisprudencia de diversas sentencias sobre delegados a computar, se reconocieron como válidos en el momento de constituir la mesa un total de 506 delegados, correspondiendo 258 a UGT, 175 a CCOO, 73 a SIE y otros tres a CIG, que no alcanza el mínimo para estar en las negociaciones. Otro punto donde chocan es en el número de integrantes de la mesa. En la misma línea, COO y SIE denuncian que se redujo con el fin de "favorecer" a UGT con "mayoría absoluta y en contra de los porcentajes de representación reales de la plantilla". Para los anteriores convenios, la mesa estaba compuesta por 11 miembros y ahora está formada por 9 (siempre tiene que ser número impar), con cinco representantes de UGT, tres de CCOO y uno de SIE.
Jornada laboral de 35 horas semanales
En línea con el acuerdo entre PSOE y Sumar para formar el nuevo Gobierno de coalición, desde CCOO han planteado reducir la jornada laboral a 35 horas semanales (1.561 horas anuales). El sindicato señala que la jornada lleva 20 años congelada y que esta bajada "es necesaria para mejorar la conciliación y el bienestar de la plantilla". En cuanto a la propuesta de extender la jornada continua a toda la plantilla, Endesa ha sugerido eliminar las jornadas de convenios de origen y simplificar el actual esquema en varias tipologías de jornada. Por su parte, en relación al teletrabajo, la dirección ha manifestado que ya se dispone de un acuerdo (hasta junio de 2024) y que se negociará cuando toque.
