El mes de agosto ya ha llegado a los mercados de Wall Street. La primera sesión ha concluido con los principales índices de referencia marcando signo mixto, a pesar de que han presentado subidas durante gran parte del día. De esta forma, continúa la tendencia negativa de días atrás, donde estos registraron caídas en el cómputo global de la semana pasada.
El pasado miércoles se conoció que el crecimiento del PIB de EE UU en el mes de julio marcó un crecimiento interanual del 6,5%, cerca de dos puntos por debajo de las expectativas. Además, la Reserva Federal se reunió para decidir qué hacer sobre los estímulos económicos y confirmó que no tiene intención de retirarlos en el corto plazo, aunque mantiene su temor al virus y su impacto en la economía.
Así, el selectivo que agrupa a las principales empresas tecnológicas, que presentaron la semana pasada sus cuentas de resultados del primer semestre del año, ha marcado un avance plano tras la clausura de los mercados. El Nasdaq ha registrado una subida muy ligera del 0,06%, situándose en 14.681 puntos.
Por su parte, el selectivo que engloba el mercado más amplio, el S&P 500, se ha mostrado inestable durante toda la sesión, donde llegó a subir por encima del 0,5%. Sin embargo, al cierre de los mercados ha borrado su avance y ha concluido con una caída del 0,2% u 8 puntos, para alcanzar las 4.387 unidades. En el conjunto de la semana pasada, dejó unas pérdidas del 0,4%.
El selectivo de referencia de las 30 principales empresas de Estados Unidos, el Dow Jones Industrial, ha liderado las subidas durante gran parte de la sesión, pero finalmente se ha dado la vuelta y ha cerrado perdiendo un 0,3% o 97 unidades, deslizándose hasta los 34.838 puntos. En el cómputo global de la semana, marcó un retroceso del 0,4%.
El parqué neoyorquino comenzaba el mes de agosto acercándose a niveles récord tras seis meses al alza, aunque persisten ciertos temores por el avance de la variante delta del coronavirus. Los expertos señalaban como factores positivos esta mañana la buena temporada de resultados trimestrales y el progreso en Washington del plan de infraestructuras propuesto por la Administración Biden. No obstante, los inversores se sumieron en el pesimismo tras conocer datos económicos y epidemiológicos peores de lo esperado, mientras crece la inquietud por la propagación de la variante delta del coronavirus.
En otros mercados, el petróleo de Texas cayó a 71,26 dólares el barril, y al cierre de Wall Street, el oro cedía a 1.816,80 dólares la onza, el bono del Tesoro a 10 años se deslizaba al 1,174 % y el dólar perdía terreno frente al euro, con un cambio de 1,1871.
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