Según los analistas de Banco Santander

El mercado ve en Grenergy otro posible objetivo de compra 'verde' tras Opdenergy

Los inversores financieros están dispuestos a adquirir activos renovables internacionales y en España si cuentan con acuerdos de compraventa de energía a largo plazo (PPA). Cuenta con un potencial de revalorización del 28%.

Instalación de paneles solares fotovoltaicos.
Los analistas ven en Grenergy el siguiente objetivo de compra 'verde' tras Opdenergy.
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Las renovables españolas son un objeto de deseo de los grandes inversores. A principios de junio se conocía que Antin presentó una oferta pública de adquisición (opa) sobre la totalidad de las acciones de Opdenergy y ahora Grenergy podría ser otra candidata a recibir ofertas de compra. Al menos así lo creen los analistas del Banco Santander, que opinan que la sociedad es un "claro objetivo" de posibles fusiones y adquisiciones gracias a sus activos internacionales y nacionales con esquemas de compraventa de energía a largo plazo, los conocidos como PPA (Power Purchase Agreement).

Según estos expertos, Grenergy "ofrece muchas opciones a los inversores". Por ejemplo, la venta de una participación en Valkyria (cartera de activos de 1,1 GW en España), desde un 49% hasta el 100%, podría dar lugar a valoraciones que oscilarían entre los 47,80 y 57,60 euros por acción, mientras que una opa sobre la empresa podría dar lugar a una valoración de 68,20 euros/acción. El banco le da una recomendación de comprar y un precio objetivo de 34,90 euros por acción, lo supone un potencial de revalorización del 28% con respecto al cierre del lunes.

Asimismo, Santander considera que Grenergy no tendría necesidad de ampliar capital hasta 2026 si ejecuta con éxito la operación Valkyria. La reciente venta del proyecto de Belinchón, por una valoración muy superior a la esperada, es el primer hito de Valkyria y ha contribuido a reducir el endeudamiento de la compañía.

2.000 millones en PPA

"Una vez cerrada, debería reducir significativamente el apalancamiento de la compañía hasta 4,8 veces la ratio deuda neta/Ebitda, eliminando así una de las principales preocupaciones de los inversores en los últimos meses. Su objetivo para 2025 de 5 GW en operación más en construcción podría alcanzarse con un año de retraso", indica el informe. 

En el primer trimestre, Grenergy aupó un 15% el beneficio, hasta cinco millones de euros, mientras casi duplicó el Ebitda con 14,3 millones de euros. Tiene actualmente contratados 2.000 millones de euros en PPA entre España y Chile por un total de 1,4 GW. Adicionalmente, tiene otros 1,5 GW en negociación. El resultado también se vio influido por la venta de dos parques solares en Chile con una potencia de 21,6 MW. La cartera de proyectos de Grenergy creció hasta 14 GW, de los que 1,8 GW están ya en operación o en construcción. En lo que respecta a su cartera de almacenamiento posee casi 10 GWh entre Latinoamérica, Estados Unidos y Europa.

No obstante, los analistas advierten de que hay un "sentimiento negativo" sobre las "pequeñas renovables" como consecuencia de una combinación de tipos de interés al alza y una corrección de los precios del 'pool' en España. "Solo la opa sobre Opdenergy ha suavizado la espiral negativa. Grenergy no ha sido inmune a esta situación, y desde enero sus acciones han sufrido una corrección superior al 20%", subraya el documento. La oferta pública de adquisición lanzada por parte del fondo francés por más de 865 millones, con una prima del 46%, contagió a todo el sector y las renovables se dispararon en bolsa.

Los movimientos corporativos se podrían reactivar en la bolsa española en un momento de incertidumbre política, bajo el cual las energéticas temen que la indefinición electoral frene las inversiones y la transición 'verde'. En este sentido, la opa sobre Opdenergy espera al nuevo Gobierno tras un primer aval de la Comisión Nacional de los Mercados y Valores (CNMV). El supervisor ha validado la documentación presentada, pero no puede aprobar la oferta que el Ejecutivo autorice la operación.

Por su parte, las grandes del sector han aparcado su reordenación a la espera de que se aclare el panorama político. Al nuevo Gobierno le tocará así lidiar con más que previsibles operaciones entre grandes empresas que están en ciernes a nivel europeo y que pueden afectar a alguna de las compañías españolas, según llevan tiempo advirtiendo desde el propio sector. Bajo este contexto, entra en juego, además, la normativa española antiopas, recientemente renovada por el Ejecutivo, que permite un veto público a determinadas inversiones en empresas que se consideren estratégicas para el sector en el que operan, y en el energético, casi todas las grandes los son.

Naturgy y su 'Proyecto Géminis'

Fuera de las fusiones y adquisiciones, una de las operaciones que más espera el sector es la culminación del proyecto 'Géminis'. Naturgy está a la espera del momento oportuno para relanzar la escisión de la compañía en dos, que también servirá como posible vía de escape para los fondos CVC y GIP. El propio presidente y consejero delegado de la gasista, Francisco Reynés, volvió a defender el lunes el "sentido industrial" del 'spin-off', aunque sin atreverse a ponerle fecha. 

La actual vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ya dejó entrever claro estaba de acuerdo con la separación de Naturgy en dos cotizadas y un cambio en La Moncloa podría facilitar la operación. Uno de los dos grupos gestionará de forma integrada los negocios liberalizados (Naturgy MarketsCo): el desarrollo de las energías renovables, la cartera de clientes de energía y servicios asociados, el parque de generación convencional y la gestión de los mercados mayoristas de energía. Por su parte, el otro aglutinará toda la parte de infraestructuras reguladas (Naturgy Networks) de distribución y transporte de energía.

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