Tras cumplir la cuarta parte de la condena

Bárcenas solicitará permisos para salir de prisión en pleno juicio por la caja 'B'

El extesorero del PP va a plantear esta petición acreditando buena conducta y después de que la Audiencia fijara la pena máxima en 12 años de cárcel. 

Luis Bárcenas
El extesorero declara el lunes en el caso Villarejo por la trama Kitchen
Agencia EFE

Luis Bárcenas mueve ficha para obtener sus primeros permisos penitenciarios. Según confirman a este diario fuentes de su entorno, el extesorero popular va a solicitar este trámite a la Junta de Tratamiento de la prisión de Soto del Real (Madrid). Se trata de un movimiento que se produce después de que la Audiencia Nacional haya fijado en 12 años la pena máxima que cumplirá en prisión tras su condena por la trama Gürtel. De este modo, se abre la veda a que el político solicite estos permisos teniendo en cuenta que ya ha cumplido más de la cuarta parte de la pena que le impuso la Audiencia en el año 2018 por la primera época de las actividades de la red. 

La decisión del tribunal de establecer un máximo de pena a cumplir se produjo la misma semana que arrancó el juicio por una de las piezas de la caja 'B' del partido. En este caso se enfrenta a una petición de la Fiscalía Anticorrupción de cinco años de prisión por el supuesto pago con dinero negro de la reforma de su sede, en la calle Génova. Se trata de una acusación mucho menor de la que afrontaba por Gürtel época I donde fue condenado por la Audiencia Nacional a 33 años de cárcel, aunque luego el Tribunal Supremo se lo redujo a 29. El motivo por el cual fijan ahora el máximo en 12 años es porque es la cifra correspondiente al triple de la pena más alta impuesta. En su caso es la de blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública, penadas ambas con cuatro años de cárcel.

La Sala de lo Penal le compensó además por las comparecencias en sede judicial que cumplimentó mientras estuvo en libertad provisional así como por los 44 meses de retirada de pasaporte. En todo este tiempo desde que saliera a la luz sus famosos papeles en los que anotó el pago de sobresueldos a la antigua cúpula del PP, Bárcenas ha ingresado hasta en dos ocasiones en el centro penitenciario de Soto del Real. La primera de ellas la ordenó el entonces magistrado instructor, Pablo Ruz, cuando decretó en junio de 2013 prisión incondicional y sin fianza para evitar riesgo de fuga así como la destrucción de las fuentes de prueba. En aquella ocasión solo estuvo 19 meses en la cárcel ya que, a principios de 2015, pagó la fianza de 200.000 euros para salir del centro penitenciario al que volvió en 2018.

Aludirá a la buena conducta

Su condena a 33 años de cárcel hizo que el tribunal que le juzgó ordenara su vuelta al centro tras celebrar una 'vistilla' y sin esperar a que la sentencia, en la que el PP fue condenado como partícipe a título lucrativo, adquiriera firmeza. De este modo, el que fuera responsable de las finanzas del PP ha cumplido ya más de un cuarto de la pena, lo que le posibilita acceder a los permisos penitenciarios. Las fuentes consultadas, que descartan que vaya a pedir el tercer grado, precisan que la petición se amparará en la buena conducta que ha tenido en todos estos años en prisión (más de 1.500 días) y en el cumplimiento con la Justicia. No obstante, Bárcenas no se plantea pedir su inclusión en programas de reinserción, como así se le propuso recientemente a Iñaki Urdangarín. El marido de la infanta Cristina cambió la cárcel de Brieva (Segovia) por un centro de inserción social en la localidad de Alcalá de Henares.

En lo que a Bárcenas respecta, formulará la petición ante la Junta de Tratamiento de la prisión madrileña, tal y como lo estipula el Reglamento Penitenciario. De no conseguir luz verde de Soto del Real, cuya dirección es la que tiene que autorizar este movimiento, podría recurrir al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria. Así pues, el extesorero planea sus primeras salidas de la cárcel en un momento en el que vuelve a acaparar todas las miradas, primero por el juicio que acoge desde esta semana la Audiencia Nacional y segundo por el escrito que remitió a Anticorrupción apenas 5 días antes de que empezara la vista por las obra de Génova. Su compromiso de colaborar con la Justicia y aportar más pruebas que acreditarían esta supuesta contabilidad opaca han llevado al magistrado Santiago Pedraz, que investiga el resto de la pieza que sigue abierta, a citarle a declarar.

Aunque en un principio la comparecencia se había fijado para este lunes, el magistrado que ahora investiga la causa también conocida como 'Papeles de Bárcenas' ha decidido dejar en 'standby' esta declaración a petición expresa de su defensa. De este modo, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, que sustituye a De la Mata en el 5, ha retrasado hasta el mes de abril su comparecencia en sede judicial pero le ha advertido que quiere pruebas ya de la supuesta caja 'B' de la formación para la que trabajó durante poco más de tres décadas. Con todo, y al margen de la información que pueda ir suministrando sobre este asunto, el extesorero todavía mantiene una cita judicial el lunes en el marco del caso Villarejo.  

Ante el juez el lunes

En este procedimiento, lejos de estar imputado, figura como perjudicado de una supuesta trama que se habría orquestado desde el Ministerio del Interior del Gobierno de Mariano Rajoy para sustraerle las pruebas que acreditarían el pago de sobresueldos y las donaciones de empresarios. No obstante, las novedades que pueda aportar sobre este capítulo que se investiga en el caso Kitchen quedarán salvaguardadas ya que su declaración se produce en la pieza secreta que abrió el magistrado Manuel García Castellón. En la misma han declarado hasta la fecha el que fuera su chófer y posterior 'topo' policial, Sergio Ríos Esgueva, el propio Bárcenas y su hijo. Según ha podido saber este diario, Esgueva detalló al juez las órdenes concretas que habría recibido de la brigada parapolicial liderada por Villarejo en aras a hacerse con grabaciones y pendrives con información sensible de la formación popular.

A todo ello hay que añadirle una tercera pata y es el juicio por la reforma de Génova. Anticorrupción acusa a la formación, que se sienta en el banquillo como responsable civil subsidiaria, de pagar los cerca de 900.000 euros que costaron estas obras con dinero que salía de la caja de las donaciones. En las dos sesiones de vista oral que se han celebrado hasta el momento se ha evidenciado el choque de posturas entre la defensa del extesorero, que ha llegado a insinuar que propondrá un careo con Mariano Rajoy si éste contradice a su cliente, y el Partido Popular. El abogado externo del partido, Jesús Santos, también fue noticia esta semana por la docena de encuentros que mantuvo entre los años 2017 y 2020 con un constructor amigo de Bárcenas. Santos desvinculó a la actual cúpula de la formación de este asunto aunque el jefe de asesoría jurídica, Alberto Durán, estaba al tanto de estas reuniones mantenidas con un emisario del extesorero. 

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