CIS de noviembre

La negociación de los PGE y el estado de alarma pasan factura a PSOE y Podemos

El barómetro realizado por la institución demoscópica es previo a la polémica por el acuerdo del Gobierno de coalición con Bildu. El PP cae levemente tras la moción de Vox, que sube en el sondeo junto a Cs.

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EFE

El Gobierno de coalición nota cierto desgaste tras un mes movido por cuestiones como el estado de alarma o los Presupuestos Generales del Estado. Así lo refleja el CIS de noviembre, que muestra cómo PSOE y Unidas Podemos perderían algo de apoyo con respecto al mes de octubre si ahora mismo se celebraran elecciones. Unos resultados que, aun así, les bastarían para mantenerse en Moncloa si lograran el apoyo de algunos de sus socios de investidura. Y que también evidencian que al PP no ha acabado de surtirle efecto el rechazo a Vox que escenificó en la moción de censura planteada por los de Santiago Abascal. De hecho, estos últimos ganan apoyo a la vez que la formación de Pablo Casado cae de manera leve. 

El PSOE volvería a ser el partido que ganaría las elecciones generales, gracias al 30,4% de apoyo, un 0,4% menos que en octubre. Le seguiría el PP, que obtendría el 18,6 de los apoyos, perdiendo un 0,3% con respecto a hace un mes. Vox se consolida como tercera fuerza, y gana un 0,7% para colocarse en un 13,2% de sufragios. Unidas Podemos conserva la cuarta plaza, pero cae un 0,3% y se queda con el 11,4 de estimación de voto. Ciudadanos también aumente su posible base electoral, y llega al 9,5%, un 0,7% más. Estos datos suponen que socialistas y naranjas serían los únicos que mejorarían resultados en comparación con los comicios del pasado año. PP y Vox perderían más de dos puntos con respecto al 10-N de 2019, y Unidas Podemos un 1,4%.

En la valoración de líderes, los ciudadanos continúan sin dar el aprobado a cualquiera de ellos. El que mejor nota obtiene es Pedro Sánchez, a pesar de que suspende con un 4,4. Le sigue Inés Arrimadas, que logra un 3,7. El tercero es Pablo Casado, con un 3,4, y muy cerca de él se queda Pablo Iglesias, que alcanza un 3,3. El que peor consideración tiene de cara a la ciudadanía es Santiago Abascal, que se debe conformar con un 2,3. Si se compara con lo que lograron en octubre, Sánchez, Casado e Iglesias mejoran. Mientras que los jefes de filas de Ciudadanos y Vox caen un 0,2.

Las estimaciones de la institución que dirige José Félix Tezanos responden a un trabajo de campo realizado entre el 3 y el 12 de noviembre, a través de 3.853 entrevistas. Un periodo que coincidió con la resaca de la aprobación del estado de alarma que se extenderá hasta mayo de 2021, y en medio de las peticiones de algunas comunidades como Asturias o Castilla y León para que les permitan realizar un confinamiento domiciliario. Su preparación coincidió también con algunos de los días con más contagios y fallecidos por la pandemia de coronavirus. Además, es el primer barómetro que se elabora desde la moción de censura de Vox, que fue rechazada por todos los partidos con representación en el Congreso.

Del total de las entrevistas, 1.000 de ellas se han centrado exclusivamente en Cataluña. El objetivo ha sido testar el posible sentido del voto de los catalanes tras oficializarse la convocatoria de las elecciones autonómicas al Parlament para febrero de 2021. Los resultados del sondeo muestran que el partido mayoritario sería ERC, que se consolidaría así como primera fuerza tanto en la región como en el independentismo. También se recoge un crecimiento del PSC hasta el segundo puesto, lo que allanaría el camino a un pacto por el Govern de los de Oriol Junqueras y los de Miquel Iceta. La ruptura en la antigua Convergencia pasa factura tanto a JxCat como a PDeCAT, ya que los primeros serían quinta fuerza por detrás de En Comú Podem y Ciutadans, y los segundos apenas lograrían respaldo en las urnas.

La economía, muy mal para la mayoría

El CIS ha seguido la línea de su anterior encuesta y ha continuado preguntando a los ciudadanos por la economía. La inmensa mayoría, casi un 90%, lo tiene claro: la situación actualmente, con la crisis sanitaria repuntando, es muy mala (46,3%) o mala (42%). Solo un 0,2% cree que el país pasa por un buen momento económico, junto a un 3,2% que estima que la coyuntura es buena. Aun así, la mayor parte de los sondeados admite que actualmente le va bien en este aspecto, con un 51,9% definiendo como buena su economía doméstica. Un 16,5% sí señala que está en un mal momento, y un 6,5 destaca que se encuentra en una etapa muy mala.

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