Resultados trimestrales

Bank of America, JPMorgan... La banca rinde cuentas ante el acelerón de EEUU

Los grandes bancos de Wall Street se preparan para presentar sus primeros resultados de 2021 tras la revisión al alza del crecimiento de EEUU, la mejora del empleo y de las perspectivas sobre el crédito.

La Fed da seis meses a cuatro bancos para enviar un nuevo plan de dividendos
La Fed tomará nota de los resultados bancarios para eliminar las restricciones al sector.

Llega el momento en el que a las compañías cotizadas en Wall Street les toca rendir sus primeras cuentas del ejercicio 2021. Como es habitual, son las entidades financieras las que dan el pistoletazo de salida a la temporada de resultados y abren el sendero al resto de la 'América Corporativa'. Todavía con  la pandemia como el gran lastre económico y en la antesala del punto de inflexión de la economía, los inversores han tomado nota en las últimas fechas sobre cómo los analistas están siendo cada vez más positivos con los bancos norteamericanos. ¿Qué es lo que se espera de ellos y por qué? 

Las acciones bancarias, medidas por el ETF de SPDR S&P Bank, repuntaron un 25% este año, superando el beneficio medio del 8% en el índice S&P 500. El sector, sin duda, se ha beneficiado de la mejora de las condiciones económicas. El motivo viene de la mano de la lectura de las últimas cifras que se están publicando. Los datos parecen confirmar que la economía está creciendo a un ritmo rápido, la inflación se está recuperando e incluso el mercado laboral estadounidense está despegando, a pesar de que las solicitudes iniciales de desempleo son más débiles de lo previsto.

Las noticias han sido tan buenas que incluso el Fondo Monetario Internacional (FMI), generalmente el último en enterarse, elevó sus pronósticos de crecimiento económico de Estados Unidos del 6,4% para 2021, solo ligeramente por debajo de la estimación del 6,5% de la Reserva Federal (Fed). Este tono optimista, en cambio, no ha sido tan bueno para las acciones value, entre las que se encuentran los bancos. El Dow Jones, índice de referencia más orientado al valor, ganó 647,39 puntos, o un 2% la semana pasada, pero el Nasdaq subió un 3,1%. El S&P 500 se elevó un 2,7%.

La diferencia es aún más marcada cuando se compara el valor y el crecimiento puro. El fondo cotizado en bolsa Invesco S&P 500 Pure Growth avanzó el 3,2% la semana pasada, superando al 0,6% de los ETF de Invesco S&P 500 Pure Value. Es una tendencia que se ha convertido en norma: el growth ha ganado un 9,2% durante el último mes frente al 1,6% del value

Sin embargo, esto es lo que precisamente le da más ventaja al value y al sector de las finanzas en plena temporada de resultados. DeBusschere señala que a partir de la presente semana la tendencia puede cambiar de forma relevante, en especial, en la cotización de las entidades financieras, que representan más del 40% del ETF de Pure Value. “No está de más que las acciones de los bancos en general se hayan movido lateralmente y que todavía parezcan baratas”, comenta.

Los catalizadores de los bancos de Estados Unidos

Pero va más allá de eso: la Reserva Federal ha prometido no subir los tipos de interés con prontitud, por lo que la política monetaria más estricta convirtió a los bancos en unos valores por los que apostar a corto plazo y como como una inversión de largo alcance, no una inversión de largo alcance. “Tengo que creer a la Fed de que no ajustarán la política", asegura Andrew Slimmon, gestor de carteras de Morgan Stanley Investment Management. “Esto podría durar bastante tiempo”, añade.

Aunque hay motivos con los que tener una visión más constructiva, al menos en un marco temporal más ajustado. Tom Michaud, CEO de Keefe, Bruyette & Woods, empresa que pertenece a la firma de análisis Stifel, así lo cree: “La presentación de los resultados de los bancos será un catalizador más positivo de lo que se piensa y puede impulsar a sus cotizaciones a precios más altos”.

“Estamos apenas a la mitad del rally”, considera Matt O’Connor, analista de Deutsche Bank, en una nota reciente. El experto coincide en que los beneficios por acción aumentarán hasta en un 20% en 2023 y 2024 y que las acciones repuntarán hasta en un 50% en los próximos dos o tres años. “Los bancos seguirán beneficiándose de las cosas que les han ayudado este año, pero el crecimiento de los préstamos será un motor de los resultados en la segunda mitad del año, ya que la economía se está consolidando”, resalta.

Un salto del 10% en el crecimiento de los préstamos suma aproximadamente un 8% a las ganancias de los bancos, por lo que la industria financiera generalmente necesita ver un aumento de un punto porcentual completo en los tipos de interés para ver un impacto similar en sus beneficios”, analiza el experto de Deutsche Bank.

Los bancos que estaría mejor posicionados, según el analista de la entidad germana serían Bank of America, Citizens Financial, JPMorgan, M&T Bank, Truist Financial, US Bancorp y Wells Fargo. Este último, cabe recordar que es una de las grandes apuestas en la cartera del multimillonario inversor Warren Buffett, uno de los grandes inversores históricos del sector.

No obstante, Deutsche Bank no es la única entidad que tiene una visión positiva de los grandes bancos. Goldman Sachs también emitió una nota alcista sobre el sector. “Con los grandes bancos listos para presentar beneficios, esperamos que los equipos gestores adopten un tono optimista para este año y el próximo”, profundizan.

En 2020, la banca sumó decenas de miles de millones a sus provisiones con la expectativa de pérdidas crediticias inminentes, pero con la economía recuperándose a un ritmo más elevado de lo esperado, esas estimaciones pronto podrían convertirse en retornos positivos. Los bancos también se enfrentaron a restricciones sobre las recompras de títulos propios y pagos de dividendos el año pasado, ya que la Reserva Federal quería que conservaran capital durante la recesión. Pero la Fed expuso el mes pasado que estaba buscando aliviar esas políticas. Su clima, a corto plazo, se despeja.

Mostrar comentarios