Con demanda récord de 130.000 millones

El Tesoro Público emite 15.000 millones del primer bono sindicado del año 2024 

Estas obligaciones, que vencerán el 30 de abril de 2034, se distribuirán entre inversores institucionales y minoristas mediante seis entidades financieras que han recibido el mandato del Tesoro para esta operación. 

Los inversores piden 72.000 millones de la emisión sindicada a 10 años del Tesoro
Los inversores piden 72.000 millones de la emisión sindicada a 10 años del Tesoro
Europa Press

El Tesoro Público ha emitido este miércoles 15.000 millones de euros en un nuevo bono sindicado a 10 años, con vencimiento el 30 de abril de 2034. Para este bono, el Tesoro ha recibido una demanda récord, superior a los 130.000 millones de euros, la mayor demanda registrada en su historia. Se trata de la mayor emisión de la historia junto a la realizada en abril de 2020. Fuentes del Ministerio de Economía han destacado que la gran demanda junto con el elevado número de inversores y de alta calidad reflejan el profundo acceso del Tesoro a los mercados financieros.

Los inversores habían solicitado 72.000 millones de euros de esta emisión sindicada de obligaciones a diez años, según datos del mercado.  El Tesoro Público prevé pagar 11 puntos básicos más por estos títulos que el bono de referencia a ese plazo (emitido con cupón del 3,55% y con vencimiento en octubre de 2033) y que a esta hora del miércoles alcanzaba rendimientos del 3,14% en el mercado secundario de deuda.  Esta demanda pone de manifiesto la elevada confianza de los inversores en la economía española, según fuentes ministeriales. 

Estas obligaciones, que vencerán el 30 de abril de 2034, se distribuirán entre inversores institucionales y minoristas mediante seis entidades financieras que han recibido el mandato del Tesoro para esta operación ( BBVA; Banco Santander; Barclays Bank; Credit Agricole, Deutsche Bank y J.P. Morgan).

Emisión de obligaciones a diez años 

Con esta colocación, y según fuentes del Ministerio de Economía, el Tesoro afrontará el próximo vencimiento de una emisión de obigaciones a diez años con un cupón del 4,8% y que tiene un importe en circulación de unos 17.000 millones de euros. El Tesoro emitió en 2023 cuatro obligaciones de deuda sindicada y prevé realizar otras tantas en este ejercicio.

Emisión de 257.000 millones en bonos 

Por su parte, el Tesoro Público emitirá este año un total de 257.000 millones de euros en bonos, prácticamente la misma cifra que el pasado ejercicio de los que, descontadas las amortizaciones previstas, 55.000 millones se corresponderán con deuda de nueva emisión, esto es, alrededor de 10.000 millones de euros menos que en 2023 y el nivel más bajo desde el estallido de la pandemia de coronavirus. 

El Estado prevé así cubrir sus necesidades de financiación en pleno repliegue del Banco Central Europeo (BCE), que lleva ya meses reduciendo sus compras de bonos soberanos y que podría, además, iniciar las rebajas de tipos a lo largo de este año, una vez que la inflación del área del euro quede controlada.

Fue el anuncio que hizo el nuevo ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en su primera intervención en una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros desde que asumió el cargo en sustitución de Nadia Calviño, que ejerce desde principios de mes como presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

Cuerpo ha asegurado que la estrategia del organismo, como viene sucediendo en años anteriores, es "prudente" pero "flexible", por lo que permitirá minimizar el impacto de la política monetaria del BCE (de momento, el coste de la cartera de deuda apenas ha subido 45 puntos básicos y los tipos oficiales lo han hecho en 450 puntos básicos desde julio de 2022) y hacer frente, al mismo tiempo, a una coyuntura económica incierta.

Perspectivas para España 

Por otra parte, las perspectivas apuntan a que España verá reducirse su crecimiento este año al calor de la fuerte desaceleración de la economía de la Eurozona, que podría haber cerrado el pasado ejercicio en recesión técnica si, como apuntan los principales indicadores macro, el PIB se contrajo entre octubre y diciembre pasados (en el tercer trimestre ya lo hizo un 0,1%, según Eurostat). 

Ese contexto tan complejo no ha impedido, sin embargo, que la economía española creciese alrededor del 2,4% el pasado ejercicio, en línea con la última estimación que el Ejecutivo incorporó en el Plan Presupuestario remitido a Bruselas a mediados de octubre.

Mostrar comentarios