Grifols da otro paso al frente para seguir expandiéndose en Estados Unidos. La multinacional de los hemoderivados ha cerrado la transacción para adquirir siete centros de donación de plasma en el país a la empresa Kedplasma (sociedad perteneciente al Grupo Kedrion) por un precio total de 55,2 millones de dólares (46,48 millones de euros). Los siete centros adquiridos cuentan con licencia de la U.S. Food and Drug Administration (FDA, por sus siglas en inglés) y de las autoridades europeas y obtienen aproximadamente 240.000 de litros de plasma anuales.
La biotecnológica catalana podrá disponer de forma inmediata del plasma obtenido en estos centros. "Con esta adquisición Grifols constata su compromiso de seguir aumentando su aprovisionamiento de plasma de manera orgánica e inorgánica", apunta la mayor farmacéutica del Ibex 35 (9.486 millones de euros de capitalización) en el comunicado remitido esta misma mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La firma resalta cómo desde enero de este año, sus esfuerzos para acelerar la ejecución de su plan de expansión le permiten disponer de forma inmediata de aproximadamente cerca de 1,4 millones de litros de plasma adicionales al año, al tiempo que sigue adelante con la apertura de nuevos centros.
La operación ha sido financiada con recursos propios, sin emitir deuda. Esta adquisición está alineada con la estrategia de expansión y diversificación de acceso a plasma de Grifols, que cuenta con una red integrada por 296 centros de plasma en EEUU tras esta operación y 55 en Europa, concretamente en Alemania, Austria y, recientemente en Hungría. Asimismo, Grifols mantiene su firme compromiso de aumentar el suministro de plasma y terapias plasmáticas para seguir asegurando que los pacientes reciben los tratamientos y la atención que necesitan.
Resistió el impacto de la Covid
Precisamente, la compañía tiene en marcha -en principio hasta el próximo 14 de junio si no alcanza antes los umbrales previstos- un programa de recompra de acciones propias. El objetivo del mismo es construir autocartera que prevé destinar como pago para futuras operaciones corporativas. El importe máximo de estas operaciones en bolsa ascenderá a 125 millones de euros, el equivalente al 1% del capital.
La empresa capitaneada por los hermanos Grífols logró resistir el pasado ejercicio al impacto del Covid-19 con un beneficio neto de 619 millones de euros, que supone una reducción de apenas un 1,1% en relación al año previo. El grupo despidió el ejercicio con una cifra de negocio de 5.340 millones de euros, con un incremento del 4,7% interanual, impulsado por los crecimientos de las divisiones Bioscience y Diagnostic. Excluyendo las ventas de plasma a terceros, sus ingresos avanzaron un 6,5%.
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