En la tercera ola de la pandemia

España supera los 4 millones de parados y 900.000 empleos se estancan en ERTE

El desempleo se incrementa en febrero en 44.436 personas, máximo en este mes desde 2013. La Seguridad Social suma 20.632 afiliados respecto a enero, pero pierde 400.000 empleos en un año.

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España supera los 4 millones de parados
Europa Press

El fuerte impacto de la tercera ola de pandemia sobre el mercado laboral se deja sentir en las cifras publicadas este martes por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social. España ha vuelto a superar los cuatro millones de parados, una cifra que no se veía en las estadísticas desde hace un lustro, mientras 900.000 trabajadores continúan inmersos en expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE). Aunque la Seguridad Social sumó en febrero 20.632 afiliados respecto a enero, las inscripciones en las oficinas del SEPE aumentaron en 44.436 personas, por lo que la leve creación de empleo no se tradujo en una reducción del paro. En ambos casos, se trata de las peores cifras para este mes desde 2013, el último año de la crisis financiera.

Los malos augurios se han cumplido y España ha vuelto a superar la barrera psicológica de los 4 millones de desempleados. En concreto, la cifra alcanza las 4.008.789 personas que buscan un puesto de trabajo en plena crisis de la Covid-19, tras el golpe de la tercera ola. La cifra supone un 762.742 parados más que hace un año, con un incremento porcentual del 23,5% sobre la fecha en la que nadie podía aún prever las graves consecuencias del coronavirus sobre la economía española. En paralelo, en los últimos doce meses se han perdido 400.117 afiliados en la Seguridad Social (-2,08%), de los cuales 289.055 corresponden al sector de la Hostelería, el más azotado por la pandemia.

Este mismo lunes la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, adelantaba que los datos sobre la evolución del mercado laboral en febrero serían negativos. También lo hizo la semana pasada el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en su cuenta de Twitter. Por su parte, la responsable de Trabajo, Yolanda Díaz, ha aprovechado este martes la misma plataforma para admitir que "el aumento del desempleo, con motivo de la tercera ola, es una mala noticia que refleja las patologías estructurales del mercado laboral acentuadas por la pandemia". "Seguimos trabajando para revertirlas conscientes de las personas y realidades cotidianas que hay tras las cifras", añade la ministra.

Entre tanto, 900.000 trabajadores continúan con su empleo en suspenso, afectados por los ERTE puestos en marcha por las empresas para capear estos duros meses de restricciones sanitarias y administrativas. Aunque la cifra se ha reducido un 75% respecto al pico de la pandemia, en los dos primeros meses del año se ha producido un fuerte incremento de los ERTE debido a las nuevas medidas restrictivas puestas en marcha en todas las comunidades autónomas para frenar los contagios derivados de las fiestas navideñas. El repunte es de unos 200.000 afectados si se tiene en cuenta que el año pasado finalizó con algo más de 700.000 trabajadores en ERTE.

En cualquier caso, hay que tener en cuenta que estas cifras no son definitivas. Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones matizan que dado que el momento de solicitud del ERTE y el de sus efectos pueden ser distintos, hay una cierta disparidad entre la fecha de notificación y la fecha en la que produce efectos en el alta (por ejemplo, puede ser que una empresa comunique a la Tesorería el ERTE de su plantilla el 10 de diciembre, cuando éste tiene efectos ya desde el 20 de noviembre), de modo que la serie requiere actualización prácticamente diaria y los datos actuales se irán revisando en los próximos meses. Esto explica, en parte, el baile de cifras que se ha producido desde el estallido de la crisis, que se detalla en estas páginas.

Por otro lado, con los más de 20.000 cotizantes ganados de media en el mes de febrero -un mal dato si se tiene en cuenta la evolución del mismo periodo en años anteriores, cuando los empresarios miraban con optimismo a la campaña de Semana Santa- la Seguridad Social alcanza los 18.850.112 afiliados. En términos desestacionalizados y corregidos de calendario, que son los preferidos por los técnicos del departamento que dirige José Luis Escrivá para medir el impacto de la crisis sobre el mercado laboral, el sistema perdió 30.211 cotizantes en febrero, hasta un total de 19.074.871 ocupados, poniendo fin a una racha de ocho meses consecutivos de ascensos de la afiliación en la serie desestacionalizada.

Respecto al paro, aumentó en febrero en todos los sectores económicos excepto en la construcción, donde se redujo en 5.116 personas. El mayor aumento lo registraron los servicios, los más afectados por las restricciones, con 36.877 desempleados más. Además, en el segundo mes del año se registraron 1.212.284 contratos, casi un 24% menos que en igual mes de 2020, de los que 132.431 fueron indefinidos, el 10,9% del total. Trabajo ha informado también de que el gasto en prestaciones alcanzó los 2.629 millones de euros en el mes de enero (último dato disponible), de los que 694 millones correspondieron a prestaciones para trabajadores en ERTE.

Del lado de la afiliación, con datos brutos, el Régimen General sumó en febrero 14.392 trabajadores, mientras el Sistema Especial Agrario restó 3.955 afiliados y el del Hogar añadió 1.262. Por sectores, este mes ganaron ocupados, entre otros, Agricultura, Ganadería, Construcción y Educación. El sector dentro del Régimen General que acusó un mayor descenso de afiliados fue la Hostelería, según los datos de Trabajo. El Régimen de Autónomos, por su parte, alcanzó los 3.262.255 afiliados medios, 5.515 más que el mes anterior. El balance, no obstante, preocupa al presidente de ATA, Lorenzo Amor, que ha recordado que hay 500.000 autónomos en cese de actividad y ha reclamado al Gobierno ayudas directas, "sin experimentos".

Desde el flanco sindical, UGT ha alertado de que "los malos datos del paro afectan especialmente a mujeres y jóvenes". En efecto, las cifras difundidas por el Ejecutivo este martes reflejan que el desempleo masculino subió en febrero en 13.032 personas (un 0,77%), hasta superar los 1,7 millones de parados, mientras el femenino lo hizo en 31.404 (un 1,38%), hasta los 2,3 millones de paradas, de modo que el paro entre las mujeres crece más de el doble que entre los hombres. Además, el desempleo entre los jóvenes menores de 25 asciende en febrero en 9.280 personas, con un incremento del 2,6% respecto al mes anterior, tres veces más que el paro de 25 y más años, que sube un 0,97%, según los datos recopilados por el sindicato.

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