En 2020 se retiraron de la circulación unos 460.000 billetes en euros falsos, lo que supone una disminución del 17,7% en comparación con un año antes.
El Ejecutivo comunitario asegura que el país cumple el requisito de estabilidad de precios al contar con una de las mejores tasas de la UE, no tiene un déficit excesivo y los tipos de interés están en la media de la zona.
Pese al ritmo de crecimiento de los precios en la zona euro, en máximos históricos, el Banco Central Europeo insiste en un endurecimiento "gradual", lejos de la aceleración de la Fed.
Desde hoy la de 12 kilos, la más consumida, se queda en 19,95 euros, uno más que en enero y hasta seis más que hace un año, y eso que la subida tiene un tope del 5%.
La autoridad bancaria considera que se debe salvaguardar el papel del dinero público como ancla del sistema monetario y alerta a los inversores en 'monedas estables' sobre los riesgos en que incurren.
La divisa europea se ha convertido en otro problema para la inflación porque aumenta el impacto de los precios energéticos pero también en amortiguador de la desaceleración económica en Europa.
El índice interbancario regresó a positivo en su cotización diaria el pasado 12 de abril pero en su último estirón está a punto de cambiar de signo al promedio mensual, que se usa como referencia hipotecaria.
El gobernador del Banco de España cree que el escenario que ha provocado la invasión ucraniana de Putin invita al organismo económico rector de la zona euro a actuar sugiendo una senda "clara y predecible".
Tal y como avanzó en la última reunión del BCE, la presidenta esper concluir la adquisición de deuda para el verano y después analizará una posible subida de los tipos de interés en la zona euro.
El debate entre el actual presidente francés y la candidata de ultraderecha en materia económica se ha centrado en las posibles bajadas de impuestos, en especial una reducción del IVA a las fuentes de energía.
Según los datos arrojados por la Unión Europea y el Banco de España se observa una preferencia por los métodos de pago digitales frente al tradicional dinero en efectivo, algo que la pandemia ha acelerado más.
La moneda ya supera su nivel previo a la invasión rusa de Ucrania en un mercado 'dopado' por las medidas impuestas por el Kremlin para tratar de mitigar la respuesta de Occidente.
El banco central sigue estudiando sus opciones aunque se queda sin tiempo para dar una respuesta a tiempo ante la espiral inflacionista que se está retroalimentando por el efecto divisa.
Ambos países pretenden minimizar el impacto de las penalizaciones contra Moscú sobre sus intercambios comerciales recurriendo al trueque y utilizando divisas que no sean el dólar y el euro.
Recuerdan que el precio del litro de combustible ya sobrepasa el euro en muchos países de la UE, y solicitan recuperar las medidas excepcionales que fueron adoptadas cuando Rusia se anexionó Crimea.
El mercado anticipa una subida de tipos más fuerte de la Fed tras el nuevo máximo en 40 años de inflación, lo que resta protagonismo al plan del BCE de acelerar en la retirada de estímulos.
Las economías de la zona euro y de la UE crecieron un 5,3% en 2021, una décima más de lo esperado.
El valor del tipo de cambio de la moneda rusa acelera su caída en los mercados ante la posibilidad de un veto a sus exportaciones de crudo y gas, así como el riesgo inminente de suspensión de pagos.
La divisa de Rusia se derrumba hasta un 30% después de la ola de sanciones adoptada por EEUU y la Unión Europea aunque recupera terreno tras la histórica subida de tipos de 1.050 puntos básicos.
"La fortaleza de la recuperación de la actividad total señalada por el índice ofrece bienvenidas evidencias de que hasta ahora la economía ha mostrado una resistencia alentadora".
Eurostat sitúa a España a la cabeza de las economías del euro con un crecimiento de su economía del 2% en el último trimestre del pasado ejercicio.
Por contra, el índice manufacturero subió a máximos de cinco meses, con 50 enteros en vez de los 58 de diciembre.
El último dato del IPC en EEUU alcanzó el 7%, nuevo máximo desde hace 40 años pero en línea con las expectativas de los analistas que creen que el pico ya se ha alcanzado o está próximo.
Pese al deterioro generalizado de este sentimiento en los países que comparten el euro, España es una de las zonas en las que esta percepción modera su descenso tan solo ocho décimas, hasta los 108,5 puntos.
El PIB de España ha aumentado un 60%, de los 700.993 millones de euros de 2001 a los 1,12 billones de 2020, con un avance de la renta por habitante del 40 %.
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